La fiscalía a cargo de Ramiro González inició este martes la declaración testimonial de Florencia Aguirre, la esteticista amiga de Fabiola Yañez que fue sugerida por la querella representada por Mariana Gallego. Ante el fiscal, se refirió a lesiones que le observó a la ex primera dama que no habrían sido producidas por «tratamientos estéticos» sino producto de golpes que Yañez se los atribuye a Alberto Fernández.

Florencia Aguirre estuvo poco más de dos horas en la fiscalía del quinto piso de Comodoro Py. Ante el fiscal federal, Ramiro González indicó ante la fiscalía que vio «los moretones en los brazos y el ojo» de Fabiola Yañez. Cuando le consultó a su amiga, el origen de los hematomas, «ella justificó a Alberto diciendo que fue un golpe involuntario, pero yo no le creí», sentenció.

En la causa por presunta violencia de género, el expresidente tiene nueve hechos puntuales atribuidos que sustentan la acusación penal. El correlato de los episodios se construyeron a partir de la declaración de la ex primera dama.

Sobre esas circunstancias consignadas, el fiscal federal Ramiro González, expresó que más allá de las calificaciones penales que darán curso a la investigación, los hechos que originan la causa “surgen de un relato que revela un contexto de violencia de género asentado sobre una relación asimétrica y desigual de poder que se ha desarrollado a lo largo del tiempo”.

Para ir clarificando los nueve hechos imputados a Alberto Fernández, la querella pidió que Florencia Aguirre sea citada a declarar.

Ante la fiscalía, la abogada Mariana Gallego y la representante legal del ex presidente, Silvina Carriera, la esteticista relató que la ex primera dama «se sentía presa y lloraba todo el tiempo». En ese mismo sentido, reconstruyó un diálogo: “Es muy feo vivir con alguien que no te habla, no te saluda”, le habría dicho Yañez.

En ese marco Florencia Aguirre fue consultada por el Ministerio Público Fiscal, respecto a las imágenes que tomaron estado público y en la que se le veía un ojo morado a Yañez como así también, moretones en sus brazos. La esteticista rimero explicó que los tratamientos que le practicaba a la ex primera dama «no eran invasivos» y producto de ello «no dejaban hematomas». Asimismo, dijo que esos hematomas no respondían a «tratamientos estéticos», sino que serían resultado de golpes recibidos.

Durante el tiempo que declaró ante la fiscalía, sostuvo que Fabiola le contó sobre los videos e imágenes que había encontrado en el celular que perteneció al ex presidente y que se lo había dejado a su hijo Francisco. La esteticista en ese momento, dijo que «no podía creer que hubiera videos y fotos de mujeres desnudas en el celular del hijo».

Esas grabaciones fueron difundidas en diversos medios de comunicación, donde se lo veía al ex presidente con la periodista Tamara Pettinato. A raíz de esas publicaciones Alberto Fernández buscó iniciarle una causa penal a Fabiola Yañez, pero la misma no tramitó en Comodoro Py.

Según pudo reconstruir Clarín de fuentes allegadas al caso, en otro momento de su declaración testimonial Aguirre dijo que estando embarazada, Fabiola Yañez fue «responsabilizada de la pérdida de las elecciones», algo que la ex primera dama contó en su declaración ante la fiscalía. Al respecto, la testigo añadió un dato más: «No le hablaba (por Alberto Fernández) como forma de castigo».

La fiscalía entendió que en función de la relación asimétrica de poder entre el ex presidente de la Nación y Fabiola Yañez, la violencia que la que sufrió, a lo largo de ocho años en diversas modalidades y circunstancias, califica para un delito mayor que las lesiones leves. Detalló nueve hechos atribuidos a Alberto Fernández y ubicó el primero de todos en el año 2016, específicamente, cuando la pareja convivía en un departamento de Puerto Madero propiedad de Enrique Albistur.

Bajo ese criterio, pero buscando dar sustentabilidad a los hechos denunciados, la querella sugirió a través de un escrito que se cite a una testigo que «vio a Fabiola golpeada”, aseguraron fuentes allegadas al expediente y reiteraron, “todo surge de los dichos de la víctima”. Es lo que ahora, en pleno proceso de investigación, la fiscalía busca corroborar.

En contraposición a los dichos de Florencia Aguirre, diseña su estrategia Alberto Fernández. Su abogada sugirió a tres testigos que, ante escribano público, manifestaron que los moretones eran productos de caídas ocasionadas por «la ingesta de alcohol» como así también, a cirugías estéticas realizadas.

Las fotografías que muestran a la ex primera dama con moretones datan de junio de 2021, mientras que las cirugías referidas son posteriores ya que, según explicaron las autoridades médicas, se llevaron a cabo después de haber dado a luz a Francisco.