Los movimientos sociales evalúan por estas horas cortar rutas y accesos de los principales centros turísticos del país en el inicio del feriado extra largo de Semana Santa. Sin interlocución con el Gobierno y mientras mantienen el reclamo por el envío de alimentos a comedores y con la denuncia penal del ministerio de Capital Humano al jefe del Movimiento Evita Emilio Pérsico arriba de la mesa, las organizaciones cercanas al peronismo y las de la izquierda redoblan su desafío a la política económica y social de Javier Milei y al protocolo antipiquetes de Patricia Bullrich.

Los referentes de las agrupaciones nucleadas en la UTEP y de la Unidad Piquetera volverán a encontrarse este viernes para definir un plan de lucha común, cuyo último capítulo se replicó este lunes en rutas provinciales de todo el país, con incidentes entre la Policía y los manifestantes en Puente Pueyrredón y Puente Saavedra.

“Lo del lunes fue amigable, lo que viene será más duro”, advirtió un articulador de los movimientos con mayor poder de convocatoria. Las organizaciones sociales hasta ahora evitaron cortes en rutas importantes, movilizaciones masivas en Ciudad y acciones más potentes en las puertas de los supermercados que los petitorios que distribuyeron en varias cadenas el 1° de febrero.

Con ese horizonte, varios de los máximos dirigentes sociales plantean cortar el miércoles, en el inicio del feriado XXL de semana santa y del 2 de abril, las rutas de alto tránsito turístico como la 2, la Panamericana y la ruta 3 en el sur. Sin preocupación por el costo político, presionan para que el Gobierno los reciba o resuelva algunas de sus demandas. La alternativa de escalar las protestas se discutieron el lunes en la reunión semanal de la mesa nacional del Evita.

Los movimientos sociales redoblan la presión contra el Gobierno días después de que el Ministerio de Capital Humano que conduce Sandra Pettovello denunciara a Pérsico, ex secretario de Economía Social y jefe del Evita, la organización social más convocante, por presunto fraude a la administración pública.

Para los referentes sociales, la denuncia contra Pérsico es un intento para disciplinar políticamente a los movimientos sociales que exigen por el envío inmediato de alimentos secos a los comedores. “Esta gente es fácil, cuando le sacan remedios a los viejos, buscan corrupción en el PAMI. Cuando nos movilizamos por el hambre, atacan a un dirigente social”, señaló el ex funcionario, que no recibió por ahora una solidaridad sonora de los dirigentes del ex Frente de Todos que integró activamente.

En el Gobierno están convocando a una licitación -a través del programa PNUD de Naciones Unidas- para enviar alimentos secos a comedores. En Capital Humano señalan que el envío de alimentos secos solo representará el 4% del gasto de política alimentaria concentrado en la Tarjeta Alimentar. Pettovello quiere ampliar la tarjeta Alimentar Comunidad -para que los responsables compren alimentos frescos y secos- de 2 mil a 4 mil comedores hasta llegar a 8 mil. En el registro nacional de comedores populares hay 44 mil establecimientos inscriptos, pero en el Gobierno calculan que no son más de 12 mil.

Antes del piquetazo que preparan para la semana que viene y que podría poner a prueba la capacidad operativa de las fuerzas federales que conduce Bullrich, los referentes sociales de la UTEP que lidera el evitista Alejandro Gramajo, mano derecha de Pérsico en Desarrollo Social, harán una demostración de fuerza en la manifestación por el Día de la Memoria, el 24 de marzo, junto a la CGT.

El Evita y la central obrera sostienen una alianza programática que tendrá un capítulo aparte en la interna del PJ porteño donde presentarán una lista común para disputarle lugares al sector de Juan Manuel Olmos y del camporista Mariano Recalde.

Las organizaciones, además, se agenciaron una silla en la naciente y convulsionada mesa de acción política del peronismo nacional que se pondrá en funciones el viernes en el microestadio de Ferro.