Mientras el foco de la política pasa por estas horas por la interna del PRO y la relación con el Gobierno y el Pacto de Mayo, hay otra disputa subterránea pero no menos importante. En las próximas semanas, YPF definirá dónde llevará a cabo la multimillonaria inversión de la creación de una planta de Gas Natural Licuado (GNL). Se trata de una obra que requerirá un aporte estimado entre US$30.000 millones y US$40.000 millones desde 2025 a 2031.

Por estos días, dos provincias se disputan la posibilidad de que la planta de GNL se instale en su territorio. Se trata de Buenos Aires y Río Negro. Las petroleras YPF y Petronas (Malasia) lideran el proyecto, que fue denominado como una de las “mayores obra de infraestructura” de la historia argentina. Y en ese sentido, el gobernador rionegrino Alberto Weretilneck acelera para quedarse con el proyecto.

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Tras la publicación de la Ley Bases en el Boletín Oficial, el Gobernador de Río Negro, Alberto Weretilneck, presentó este lunes un proyecto de ley para la adhesión parcial a la Ley Nacional N° 27.742, específicamente al Título VII, denominado “Régimen de Incentivo para Grandes Inversiones” (RIGI).

“Hicimos todos los deberes, confiamos en que se va a hacer acá. Queremos nuestro propio polo petroquímico”, indicaron desde el Ejecutivo provincial a TN.

El caso es que el Gobierno y la propia petrolera condicionaron la efectivización del proyecto a la aprobación del RIGI. Ese primer paso ya se cumplió, pero lo cierto es que el mandatario bonaerense Axel Kicillof se manifestó en contra del mismo -y la Ley Bases en general- desde el inicio. Esta postura opositora perjudica a la provincia en su puja con los rionegrinos, pese a tener una ventaja desde la infraestructura: cuenta con puerto y polo petroquímico en Bahía Blanca.

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En los últimos días, el Ejecutivo rionegrino le hizo varios guiños a Milei. Además de aportar votos positivos a la Ley Bases en el Congreso, también concretó una reunión de Weretilneck con el jefe de Gabinete, Guillermo Francos, con quien firmaron convenios para la continuidad de la obra pública. Esta es una atención que el Gobierno tuvo con la gran mayoría de las provincias, pero no deja de ser un gesto político en vísperas de una decisión clave para la provincia.

Pero además, en las últimas horas el mandatario se mostró con un aliado clave de La Libertad Avanza en el Congreso: Miguel Pichetto. Compartió una foto con el líder del bloque Hacemos Coalición Federal e hizo un agradecimiento especial a la empresa nacional de hidrocarburos: “Repasamos el avance de las grandes inversiones que YPF está llevando adelante en Sierra Grande y que cambiarán rotundamente la vida de los vecinos”.

Según comunicó la provincia de Río Negro, se espera que la adhesión al RIGI “potencie estas ventajas naturales con beneficios regulatorios y tributarios, promoviendo la instalación de grandes proyectos”. El gobernador Weretilneck le pidió a la Legislatura Provincial que otorgue un tratamiento urgente a la iniciativa.

Días atrás, el presidente y CEO de YPF, Horacio Marín, afirmó que está bajo análisis dónde se potenciarán y facilitará la llegada de inversiones. Si bien reconoció que Buenos Aires tiene ventaja al tener el puerto, señaló que Río Negro presenta ventajas impositivas y que eso “no es un tema menor”. De allí la importancia del gesto de adherir al RIGI.

Al respecto, en el entorno de Kicillof indicaron a TN que “no hay novedades”. Sin embargo, confían en sus posibilidades para quedarse con la planta de GNL. “Es algo que venimos trabajando con autoridades de YPF desde el 2017″, señalaron. En 2023 se efectivizó la reserva de 1500 hectáreas en el predio del Puerto Bahía Blanca para poder localizar la planta allí.

En la provincia de Buenos Aires sostienen además que la conectividad del puerto de Bahía Blanca y el agregado de contar con el quinto polo petroquímico de América Latina, mano de obra local especializada y centros de formación, le otorgan una ventaja en la carrera por quedarse con la planta de GNL.

Alberto Weretilneck, Axel Kicillof, GNL