POLITICA
Saber mi peso y controlarlo: ¿es tan importante para mantener una buena calidad de vida
Más allá del índice de masa corporal, los expertos ratifican la necesidad de chequear otras variables para mejorar o mantener una buena salud y pasarla bien.
Dentro de la comunidad médica, afirman que se ha comenzado a abandonar la idea de
que el índice de masa corporal es el principal indicador para determinar si una persona tiene o no una buena salud.
Más allá del índice de masa corporal (IMC), que es el parámetro base para identificar escenarios de sobrepeso, hoy los expertos se concentran en otras variables prescindiendo de la imposición que establecía al peso como único dato para diagnosticar a sus pacientes.
Pero, esa idea de que una persona que se encuentra por encima de su peso no está sana, mientras que una de contextura delgada es equivalente a gozar de buena salud, ¿funciona bajo los estándares actuales?
“La buena salud de una persona está determinada por múltiples variables: el estilo de vida,
los hábitos, la alimentación, si realiza actividad física y si tiene controlado el estrés. Este
último punto es muy importante, ya que puede afectar tanto a nivel hormonal como psíquico”, afirma Tomás Jakob (MN 134.354), médico cirujano especializado en tratamientos de obesidad y sobrepeso.
“Hoy en día como profesionales de la salud, vemos que los pacientes muchas
veces se adaptan a una dieta estricta, pero no logran trabajar en técnicas para disminuir el
estrés y, en consecuencia, tener un mejor descanso. En forma conjunta o independiente, los
altos niveles de estrés que se reflejan en hormonas como el cortisol, la adrenalina y la
noradrenalina impactan negativamente en el sistema nervioso de las personas y en su
calidad de vida”, enfatizó el profesional.
En la misma línea, la médica especialista en Medicina Interna y Nutrición y coordinadora del Grupo de Obesidad de la Sociedad Argentina de Nutrición (SAN), Marianela Aguirre Ackermann (MN 151.867), explicó que “la salud es un concepto multidimensional que abarca aspectos físicos como mentales, que tienen que ver con el bienestar emocional y cognitivo- y también se debe prestar atención a la salud social -que tiene que ver con la capacidad de interactuar de manera satisfactoria con otras personas-”.
Es decir, los especialistas resaltan tanto la realización de actividad física como la toma de un correcto descanso para lograr fines que repercutan favorablemente en sus vidas.
Otros factores que se tienen en cuenta para conocer el estado de salud de alguien son sus antecedentes, si tiene alguna condición genética, si tuvo enfermedades en el pasado o en el presente (hipertensión, diabetes, colesterol, apneas del sueño, hígado graso, etc) y también qué tipo de alimentación suele implementar en su día a día.
POLITICA
El espectáculo político se renueva
Hasta el siglo pasado se entendía que cuanto más visible un personaje más chance de ser electo, por lo que los políticos buscaban celebridad para acceder al poder. Michelle Obama muestra cómo en el siglo XXI el verdadero éxito es aprovechar la notoriedad política para hacer espectáculos.
La señora Obama no solo tiene más popularidad en las redes que Kamala Harris. En Instagram duplica a Donald Trump y superó a su marido Barack Obama incluso cuando era presidente. Y si esa popularidad no es transferible a las elecciones nacionales (preguntar a Kamala), es sumamente redituable en el mundo del espectáculo global.
La alianza de los Obama con Netflix comenzó con el documental American Factory (2019), sobre los cambios de la industria norteamericana frente a los chinos, que obtuvo múltiples premios incluido el Oscar a mejor documental
Al revés de esos presidentes que llegan al poder para tener sus medios y su programa de TV, los Obama aprovecharon su salida para legar algo más que una biblioteca, como es tradición en los Estados Unidos. Desde la productora Higher Ground consolidan una filmoteca en Netflix tan variada como para albergar una serie de citas de cincuentones que se llama The Later Daters, de reciente estreno internacional.
La alianza de los Obama con Netflix comenzó con el documental American Factory (2019), sobre los cambios de la industria norteamericana frente a los chinos, que obtuvo múltiples premios incluido el Oscar a mejor documental. Y se consolidó con la película que captura la presentación nacional de Becoming, la autobiografía de Michelle.
Mientras Barack Obama envejecía aceleradamente en los últimos años de poder, Michelle florecía, ganaba estilo y glamur y lo contaba en libros, entrevistas, conferencias multitudinarias
Estas películas coinciden con Campamento extraordinario, Trabajar: eso que hacemos todos los días, American Symphony, Paternidad, varios documentales de naturaleza y algunos infantiles en un propósito: hacer política desde el entretenimiento sin que se note.
Los Obama entendieron que cambiaron los manuales de política y que lo que tiene más popularidad no es la controversia. Michelle aprendió de su amiga Oprah Winfrey que en las plataformas ganan las historias humanas con las que el público puede identificarse. Las dos eligen mensajes de superación personal con esa seguridad que les da saberse extraordinarios ejemplos de éxito y esplendor.
Mientras Barack Obama envejecía aceleradamente en los últimos años de poder, Michelle florecía, ganaba estilo y glamur y lo contaba en libros, entrevistas, conferencias multitudinarias. Una auténtica influencer de estos tiempos, que sabe que dirigir los destinos del país más poderoso del mundo no es tan importante como tener reinar en el mundo de las redes sociales y sus negocios asociados.
La política pop se actualiza. Buscar el centro de las pantallas es de políticos del siglo pasado. En estos tiempos, la gente verdaderamente influyente, la que convierte a sus seguidores en suscriptores, es aquella que cede el protagonismo a la comunidad que conforma su red. En las series de su productora, los Obama apenas hacen unos breves cameos. Pero están. Michelle no aparece en la serie de citas, pero desde su cuenta de Instagram dejó claro quién manda. Mirando algunas escenas dejó entrever sus recriminaciones a un señor que se pasó de picante en su cita con una señora de 62. Hasta sugirió que en una próxima temporada debería estar bajo la supervisión de Logan Ury, la psicóloga de Harvard que asiste a los postulantes para conseguir pareja.
Un final feliz para la dama y ridículo para el caballero en la serie del momento es más efectivo que la mejor campaña por la igualdad. A Netflix no le convendría que esas series se conviertan en alguno de esos bodrios de canal Encuentro que envejecieron tan mal y tan pronto.
El éxito de Michelle es, precisamente, que entendió el desgaste de la política y lo poderosa que es la conexión humana. Por eso pierde cuando retoma la campaña, y brilla en sus redes que explotan cuando baila, conversa, aconseja o se deja entrevistar. La popularidad no se transfiere pero, como el público, se renueva.
-
POLITICA2 días ago
Patricia Bullrich le respondió a Victoria Villarruel tras las críticas por el gendarme detenido en Venezuela
-
POLITICA2 días ago
El descargo de Longobardi tras su salida de Radio Rivadavia: «Me hizo acordar cuando Cristina ejecutó mi despido en Radio 10»
-
POLITICA3 días ago
La Corte Suprema declaró inconstitucional la reelección indefinida en Formosa
-
INTERNACIONAL1 día ago
Atropello múltiple en un mercado de Navidad en Alemania: al menos dos muertos y más de 60 heridos
-
POLITICA1 día ago
Guillermo Castello: «Kicillof está utilizando la caja de la provincia para posicionarse políticamente»
-
POLITICA9 horas ago
Nisman: el Gobierno acepta el pedido del fiscal y levanta el secreto sobre los espías inorgánicos de la SIDE y el Ejército