Juan Provéndola explicó cómo llegó a abordar el tema del espionaje: «Más que llevarme, me lo trajeron. La DIPPBA, creada en 1956 tras la Revolución Libertadora, fue utilizada inicialmente para perseguir al peronismo proscripto, pero con el tiempo se diversificó para otros fines», explicó.

El archivo de esta institución, que cuenta con millones de documentos, quedó bajo custodia de la Comisión Provincial por la Memoria en La Plata. «Tuve acceso al archivo porque una socióloga amiga me comentó sobre un dossier de espionaje en el rock. Lo encontré entre alucinante y tenebroso. Eso me llevó a explorar otras aristas del espionaje en el fútbol, el cine, los movimientos políticos, y más», agregó.

El libro, que recopila 14 ejes temáticos, aborda temas tan diversos como el espionaje durante el Mundial 1978 o la vigilancia en recitales de los Redonditos de Ricota en democracia. «Estos episodios explican cómo la represión institucional continuó operando incluso después de la dictadura. Lo de Walter Bulacio y las redadas en recitales son un ejemplo claro de cómo la policía bonaerense ejercía su poder», afirmó.

El capítulo más impactante

De los temas tratados en El ojo que espía, Provéndola destacó uno en particular: «El capítulo sobre los vuelos de la muerte y los cadáveres que aparecieron en playas bonaerenses en los 70 es el más profundo. Estos cuerpos, que fueron enterrados como NN, recién comenzaron a ser identificados 30 años después gracias al Equipo Argentino de Antropología Forense. Por mi origen en Villa Gesell, este tema me toca especialmente».

Sobre un posible segundo volumen del libro, el autor comentó: «Me gustaría profundizar en un libro específico sobre cómo se vivió la dictadura en localidades de la costa, donde, aunque no hubo desaparecidos, la represión dejó marcas invisibles».

Coyuntura actual: inteligencia interna y redes sociales

Provéndola también analizó la reciente noticia sobre un plan del gobierno de Javier Milei para autorizar tareas de inteligencia interna a la Agencia Federal de Inteligencia (AFI). «A simple vista, parece un disparate. Aunque la Ley de Inteligencia de 2001 intentó regular estas prácticas, siempre hubo irregularidades. Lo más preocupante no es lo que se conoce, sino lo que permanece oculto», reflexionó.

Además, abordó el rol de las redes sociales en el contexto político actual, calificándolas como «terminales de inteligencia». Según Provéndola, estas plataformas funcionan como herramientas para atacar periodistas y dirigentes opositores. «Durante la cuarentena, ya se visibilizaban niveles de violencia que antes parecían marginales. La digitalización amplificó estas narrativas, sobre todo entre los más jóvenes», aseguró.

El impacto cultural de las nuevas generaciones

Provéndola reflexionó sobre el cambio en las referencias culturales de los jóvenes: «Hoy, las figuras de referencia son cantantes de trap o streamers, personas con cientos de miles de seguidores pero sin un sustrato ideológico claro. Esto marca una crisis de representatividad política e ideológica».

La conexión entre Isabel Perón y Victoria Villarruel

Además reflexionó sobre la relación simbólica entre Isabel Perón y la actual vicepresidenta, Victoria Villarruel. «Aunque ambas representan expresiones de derecha, no habitan la misma casa, aunque vivan en el mismo ‘country’. Isabel fue víctima de la dictadura que Villarruel admira, algo que resulta contradictorio», explicó.

Asimismo, señaló cómo estas alianzas políticas a veces tienen objetivos provocadores: «Quizás la foto con Isabelita sea una manera de provocar incluso a su propio espacio político».

Sobre el pacto social del Nunca Más, Provéndola consideró que está bajo amenaza, pero enfatizó: «Mientras existan anticuerpos en la sociedad civil, esa consigna sigue a salvo».

El derrumbe del hotel Dubrovnik: una tragedia inédita en Villa Gesell

Provéndola, geselino de nacimiento, compartió su experiencia cercana al derrumbe del hotel Dubrovnik. «Estaba a la vuelta cuando ocurrió. Fue impactante, parecía un tsunami», recordó. La tragedia, que mantuvo en vilo a la localidad por más de diez días, dejó varias víctimas bajo los escombros y abrió interrogantes sobre controles municipales.

«Es fundamental que la investigación determine qué causó el colapso, porque algo así no es normal y genera pánico en una localidad turística», agregó. Provéndola también destacó la respuesta del intendente Gustavo Barrera y el gobernador bonaerense Axel Kicillof, quienes estuvieron presentes en el lugar.

La estrategia del gobierno de Milei

Finalmente, Provéndola analizó los primeros meses del gobierno de Javier Milei, marcados, según él, por una estrategia de provocación y distracción. «Instalan temas menores para desviar la atención de problemas de fondo. Es una estrategia eficaz, aunque perjudicial para la sociedad», afirmó. (www.REALPOLITIK.com.ar) 

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