«Hace veintidós años que estoy enlazado al entramado cultural teatral de nuestra ciudad a la que amo profundamente», comentó Gastón Marioni, quien ha sido una figura clave en la escena teatral local, destacando su paso como director del Coliseo Podestá y de Teatro Estudio. En este último espacio, la programación y la formación de nuevos artistas se mantienen activos con una agenda constante de actividades.

Una de las joyas de su carrera es Fraterno, un texto que Marioni escribió hace más de dos décadas y con el cual inauguró Teatro Estudio. «Es la obra con la que abrimos la sala, y veinte años después, con el mismo elenco, decidimos reponerla para el aniversario de Teatro Estudio», recordó el director. La obra, que cuenta la historia de tres hermanos reunidos tras la muerte de su padre y la herencia de una vinatería, ha evolucionado con el tiempo. Marioni comentó que, aunque el relato permanece intacto, las interpretaciones y enfoques han cambiado con la madurez del elenco y la sociedad misma. «Hoy la obra tiene un final mucho más amoroso y esperanzador, y nos invita a reflexionar sobre la vida y los vínculos familiares», destacó.

Marioni también abordó la transformación del teatro a lo largo de los años. En los 90, la escena teatral comenzó a explorar nuevos enfoques sobre la familia, un tema que en sus primeras representaciones ponía en duda la imagen idealizada de la familia de clase media. «El teatro, como siempre, refleja la época. En los 90, el teatro empezó a cuestionar la familia hegemónica y a poner en evidencia esos secretos ocultos», explicó.

Otro de los puntos clave de la conversación fue la importancia de las nuevas propuestas teatrales y el papel de la temporada estival en ciudades como Mar del Plata. «Este año ha repuntado la actividad teatral, con una oferta variada que incluye teatro comercial, propuestas de la calle Corrientes y teatro independiente», afirmó Marioni, quien destacó la reactivación de la temporada marplatense y la aparición de un teatro más accesible y diverso.

Sin embargo, el director también destacó los desafíos económicos que enfrenta el sector. «La crisis económica afecta a todos los sectores, y el teatro no es la excepción. Los costos de producción han aumentado, y eso se refleja en el precio de las entradas», comentó, aludiendo a las medidas tomadas por productores como Carlos Rottenberg, quien implementó precios amigables para hacer accesible la cultura a un público más amplio.

Finalmente, Marioni reflexionó sobre la vigencia de Fraterno y cómo la obra logra seguir tocando el corazón del público. «Creo que la obra sigue siendo relevante porque todos nos hemos visto en alguna parte de esa historia. La relación entre padres e hijos, los legados familiares y las decisiones que tomamos en la vida son temas universales», concluyó. (www.REALPOLITIK.com.ar)

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