Connect with us

SOCIEDAD

Una hincha de Rosario Central murió tras recibir un piedrazo en la cabeza cerca de la cancha de Newell’s

Mataron de un piedrazo a una hincha de Central. (Foto: Cadena 3 Rosario).Una mujer murió luego de recibir un piedrazo en la cabeza tras el clásico entre Rosario Central y Newell’s. (Foto: @Cadena3_Rosario)

Published

on

Este sábado, luego del triunfo de Rosario Central ante Newell’s en el clásico rosarino, una hincha murió tras recibir un piedrazo en la cabeza. El hecho se dio en la calle Ovidio Lagos entre Montevideo y Pellegrini, cerca de la cancha de la Lepra. La víctima fue identificada como Ivana Paula Garcilazo Bellón, de 32 años.

La información fue confirmada por el ministro de Seguridad de Santa Fe Claudio Brilloni al medio Cadena 3 Rosario.

Leé también: El insólito momento que se vivió en el clásico rosarino: hinchas de Central capturaron un drone de Newell’s

Según contaron los testigos y fuentes policiales, tres trapitos la atacaron a piedrazos, mientras se dirigía hacia la zona sur con su novio, con la campera de Central. Hay dos personas demoradas, mientras buscan a otro sospechoso que podría estar implicado en el ataque.

Ante un llamado, dos ambulancias llegaron al lugar para intentar reanimar a la víctima, pero ya había perdido la vida. Continúa la investigación para aportar claridad en este caso.

Una mujer murió luego de recibir un piedrazo en la cabeza tras el clásico entre Rosario Central y Newell's. (Foto: @Cadena3_Rosario)
Una mujer murió luego de recibir un piedrazo en la cabeza tras el clásico entre Rosario Central y Newell’s. (Foto: @Cadena3_Rosario)

Central le ganó 1-0 a Newell’s en el clásico de Rosario

Rosario Central le ganó 1-0 a Newell’s en el Gigante de Arroyito y desató la locura de sus hinchas. En un partido trabado y disputado como suelen ser este tipo de encuentros, el Canalla se pudo imponer gracias a una genialidad de Ignacio Malcorra, que anotó un golazo de tiro libre sobre el final del segundo tiempo.

Con este triunfo, Central salió del fondo de la tabla en la zona A y generó la gran alegría de sus hinchas por toda la ciudad. Por otra parte, Newell’s no puede salir de su mala racha y lleva cinco sin ganar.

SOCIEDAD

Trabajar en el cielo: Matías Guerra tiene 43 años, es torrista y su lugar en el mundo está en una antena

Published

on


Matías Guerra es torrista y trabaja a 70 metros. Así de altas son las antenas telefónicas, de radio o internet que suele frecuentar. Yo, en cambio, laburo a nivel del mar y los informes televisivos que hago -miren que casualidad-, se transmiten por esas antenas. Hasta acá todo parece muy alineado, pero en el momento en que se cruzan nuestros destinos porque yo tengo que entrevistarlo para una nota, surge una interferencia: mi vértigo.

Sólo pensar que Matías se sube hasta allá arriba me intranquiliza.Y mucho más si, como ocurrió, intento hacer la nota colgado desde una torre. Lamentablemente esta es una de esas limitaciones que no se pueden vencer a fuerza de voluntad. Ni siquiera sé por qué razón me dan pánico las alturas. Además, tengo muchas otras cosas más urgentes que reparar de mi aparato psíquico antes que ocuparme de la acrofobia. Después de todo, una nota a un antenista se hace muy de vez en cuando, así que esta nota para Telenoche la hice a lo Morales Solá: “Desde el llano”.

Leé también: Chubut: un hombre baleó la casa de su vecina con un rifle porque un gallo no lo dejaba dormir

Trabajar en el cielo. (Foto: Telenoche).

Trabajar en el cielo. (Foto: Telenoche).

Matías es todo lo contrario a mí. Él disfruta de estar en las alturas. Él era uno de esos chicos que se suben a todo para la pavura de sus padres. Era de esos nenes que se trepan a los árboles y se quedan ahí: para contemplar todo “desde lo más alto”, me contó el propio Matías. Ahora tiene 43 años y desde hace 15 trabaja donde siempre soñó trabajar: en el cielo. En todo ese tiempo apenas tuvo un accidente. Hago esta referencia porque se trata de una actividad muy riesgosa. Pero Matías es metódico, minucioso y prudente, y eso lo mantuvo siempre a salvo.

Trabajar en el cielo. (Foto: Telenoche).

Trabajar en el cielo. (Foto: Telenoche).

Allá arriba hay más viento y hace más frío. En verano si abajo hay una apacible temperatura de 23 grados, en la punta de la antena se pueden registrar menos de 10 grados. Si a eso le sumás el viento, la sensación térmica baja drásticamente. El viento es un temido enemigo del antenista: las torres son cada vez más finitas y se construyen con materiales cada vez más berretas, así que si soplan fuertes vientos, lo mejor es quedarse abajo. Y si llueve, ni les cuento, porque para ahorrar hay antenas que ni siquiera tienen pararrayos. Matías sabe todo esto mejor que nadie y los días de viento o tormentosos prefiere quedarse abajo reparando cosas o proyectando sus próximos trabajos.

Trabajar en el cielo. (Foto: Telenoche).

Trabajar en el cielo. (Foto: Telenoche).

Matías sube a las torres con todo lo que necesita para un día de trabajo. El ascenso es tracción a manos y no es todo lo sencillo que uno imagina viéndolo desde abajo. Así que Matías no contempla la opción de bajar si se olvida una llave pico de loro, eso lo tiene claro. Todo lo lleva arriba con él: las llaves francesas, las cintas, la vulcanizadora, las llaves fijas y todo lo que necesita va con él en un enorme bolso-yunque que pesa más de 15 kilos.

Para ir subiendo Matías confía en un dispositivo conocido entre los afectos a las alturas como “salvamonos”. Se trata de un arnés con un gancho en la espalda y dos más en cada mano para ir siempre pegado a la torre a medida que se avanza. El problema es cuando hay tramos en donde no se puede enganchar el artefacto. Bueno, para eso también hay solución. Matías lleva un “salvacaídas” para esos casos, de manera que si se cae -Dios no lo permita-, quedaría colgado algunos metros abajo. Pero Matías nunca necesitó nada de eso, él en las alturas está cómodo, felíz y seguro. Su lugar en el mundo está en el cielo.



Source link

Continue Reading

LO MAS LEIDO

Tendencias

Copyright © 2023 - NDM Noticias del Momento - #Noticias #Chimentos #Politica #Fútbol #Economia #Sociedad