El peronismo había tenido en Diputados cierto respiro, pese a la derrota en el intento de insistir con la suba de los haberes jubilatorios, por la cohesión del bloque de Unión por la Patria en contraste con la división y la interna a cielo abierto en el radicalismo. La calma duró poco y al día siguiente volvió a quedar expuesta la confrontación entre La Cámpora y los aliados de Axel Kicillof, en la previa a otra aparición pública de Cristina Kirchner.

La ex presidenta recibirá este viernes un doctorado honoris causa en la Universidad Nacional del Oeste y dará una “clase magistral” con la consigna “Sigue siendo la economía bimonetaria, estúpido”, en línea con la carta en la que apuntó contra la falta de dólares para afrontar los vencimientos de la deuda, el ajuste, el aumento de la desocupación y la represión a los jubilados, lo que generó un dia y vuelta con Javier Milei.

La parte final del texto la dedicó al peronismo, para marcarle que “se torció y se desordenó” con el acuerdo con el FMI, la caída del ingreso de los trabajadores y la falta de registro de las nuevas relaciones laborales, la ineficiencia estatal, el déficit fiscal, la comunicación por redes sociales y los problemas en la educación pública y la seguridad.

En la previa a la presentación en Merlo, la intendenta camporista quilmeña Mayra Mendoza cargó contra Jorge Ferraresi, su par de Avellaneda, el ministro bonaerense Andrés Larroque, y como venía sucediendo los golpes que repiqueteaban cerca de Kicillof ya empezaron a alcanzarlo.

Mendoza los acusó de activar por las redes sociales de manera conjunta (también incluyó a Francisco Echarren, jefe comunal de Castelli) a través de trolls contra un posteo de Julián Alvarez, intendente camporista de Lanús, en el que ambas espadas de la organización liderada por Máximo Kirchner reclamaron una compensación por los camiones que transitan por sus municipios al Puerto de Dock Sud.

“Aflojen muchachos. Hay una provincia que gobernar con sus casi 18 millones de habitantes que cuidar”, advirtió Mendoza, que ya había confrontado en persona con Ferraresi en una actividad encabezada por Kicillof. “Hay un gobierno nacional que está buscando ahogar a los municipios. Hay empresas con ganancias extraordinarias que deben contribuir con la población de algún modo. Vayamos por eso. Nosotrxs (perdonen por ser inclusiva) estamos siempre del mismo lado. ¿Ustedes?”, desafió la intendenta de Quilmes.

“Que un debate político roce lo vinculado a cuestiones de inteligencia es grave”, respondieron en Avellaneda, y relacionaron el embate con el plenario que el sábado encabezará Kicillof en Mar Chiquita, con Ferraresi y otros intendentes como Mario Secco (Ensenada), Fabián Cagliardi (Berisso) y Julio Alak (La Plata), un día después del paso de Cristina Kirchner por Merlo. “El que más se beneficia con la centralidad de ella es Milei, está siendo funcional al adversario”, dispararon desde ese sector.

La disputa quedó planteada y no cederá con la mirada en parte en la pulseada por las autoridades del PJ y principalmente en los tironeos por la lapicera electoral del año próximo. “Tienen que escuchar más a Cristina. No hacerlo fue uno de los errores de Alberto Fernández y el que pueden cometer ahora algunos otros”, deslizaron en el Instituto Patria, con confianza en que otra vez se terminará imponiendo: “Algunos dirigentes propios la maltratan en los años pares y después hacen cola por el dedo y para sacarse fotos en los impares”.

A su vez, dirigentes de la CGT e incluso gremialistas afines al kirchnerismo la habían cuestionado por el tramo de la carta en la que señaló la condición minoritaria de los trabajadores formalizados y sindicalizados. “No es producto del movimiento obrero, sino de la falta de políticas de los gobiernos desde hace bastante tiempo”, aseguró Andrés Rodríguez, titular de UPCN.

Roberto Baradel -secretario general de SUTEBA- le pidió “profundizar” en el análisis y Pablo Moyano criticó los planteos públicos. “Las cartas de la ex presidenta no suman para nada. Llamen a una reunión del PJ y matémonos ahí adentro. Volvemos a las peleas que nos llevaron a que este cachivache sea presidente”, reclamó el referente de Camioneros y uno de los triunviros de la CGT.

“Es un error de los dirigentes sindicales. No hay una crítica a ellos cuando Cristina dice que el mundo del trabajo se ha hecho mucho más complejo, Cristina ya lo ha conversado con varios”, transmitieron en el entorno de la ex mandataria. “Siempre pusieron una distancia que no se entiende, porque en su gobierno es cuando mejor les fue a los trabajadores”, completaron.

La creciente exposición de la ex presidenta coincide con una serie de pulseadas no resueltas en el peronismo. A poco más de un mes del cierre de listas para las elecciones en el PJ nacional, comenzaron a circular posibles candidatos promovidos por el kirchnerismo como alternativa a Ricardo Quintela, el gobernador riojano que expresó su intención de ir por el lugar que dejó vacante el renunciado Alberto Fernández y se mostró el martes en la sede de la calle Matheu, en una charla militantes universitarios.

Las variantes van desde Wado de Pedro a la posibilidad de que al partido por primera vez lo presida una mujer -corrieron los nombres de la diputada Vanesa Siley y las senadoras Lucía Corpacci y Florencia López- e incluso sin descartar a la propia Cristina, más allá de que dirigentes con vínculo directo con la ex mandataria prácticamente lo descartan.