Las buenas señales que recibe Marcos Galperin, fundador, presidente y director ejecutivo de Mercado Libre, de parte de los funcionarios de la administración de Javier Milei, lo habrían envalentonado para radicar una denuncia ante la Comisión Nacional de Defensa de la Competencia (CNDC) contra 36 entidades bancarias por concentración prohibida, cartelización y prácticas coordinadas destinadas a perjudicar a la industria fintech y sus usuarios. 

Tras atravesar el «desierto de los Fernández» por la gestión del Frente de Todos (2019-2023) que lo obligó, entre otras cosas, a perder beneficios fiscales, a no poder invertir para beneficio de las empresas que dirige saldos de cuentas de sus clientes, el Gobierno del libertario entusiasma al empresario de 52 años, dueño de una de las fortunas más importantes del país estimada en 6.300 millones de dólares, y una de las primeras medidas que adoptó el directorio del Banco Central que preside Santiago Bausili, fue la de habilitar a Mercado Pago a captar los depósitos del público, volcarlos en la entidad financiera que mejor pague o más intereses de y quedarse con ese rendimiento.

Desde la banca tradicional denunciaron, en voz baja, que el Central no le exige cumplir las mismas normas que sí deben cumplir los bancos. O sea, habilitó a la fintech, como se denomina a las empresas que buscan ofrecer soluciones financieras haciendo uso de tecnologías centradas en los usuarios, a realizar intermediación financiera, sin someterse a los rigurosos controles que la ley impone a los bancos. 

Sea como fuere, la polémica entre Mercado Libre y las entidades financieras no ha hecho más que crecer y llega a su máxima exposición con la pelea existente entre las billeteras virtuales Mercado Pago y MODO. Y, la batalla no hace más que escalar, aunque el terreno donde se peleará es bien conocido por Marcos Galperin.

Mercado Libre acusa a MODO de limitar la competencia

Las hostilidades fueron explicadas en un comunicado por la empresa de Galperin. Mercado Libre, una de las principales plataformas de comercio electrónico y servicios financieros en América Latina, argumentó que MODO fue creada con el objetivo de limitar la competencia entre los propios bancos y de obstaculizar el crecimiento de empresas fintech. «Los bancos se concentran ilegalmente en MODO, y nunca notificaron ni solicitaron autorización a la CNDC para operar de forma conjunta».

Desde MODO se defendieron señalando que «la presentación de Mercado Libre es un nuevo intento por limitar la competencia en el sector». «Esta nueva denuncia solo busca desviar la atención de la querella realizada en su contra en el mes de mayo por abuso de posición dominante», resalta en la primera línea la respuesta de los bancos a la empresa de Galperin.

Pero el nerviosismo que se trasluce en la respuesta de las entidades financieras tradicionales se debe a que Galperin acudió a la Comisión Nacional de Defensa de la Competencia (CNDC), un organismo gubernamental que analiza las concentraciones económicas y las conductas anticompetitivas que en el año 2017, durante la gestión de Cambiemos, obligó a 14 bancos a desprenderse de la empresa PRISMA por abuso de posición dominante. 

En 2017, Prisma, a través de las tarjetas de crédito y débito Visa, Banelco, Pago Mis Cuentas, Todo Pago, Monedero y Lapos, concentraba más del 75% de los medios de pago del mercado nacional. El resto lo poseía First Data, controlante de Mastercard.

Precisamente, el principal argumento de Mercado Libre es que los bancos volvieron por la revancha y con la creación de MODO, restablecieron la misma concentración anticompetitiva que había sido desarticulada en el caso de Prisma. «Una vez más, queda claro que su principal motivación es coordinarse para obstaculizar a toda costa a las empresas fintech», afirmaron en el comunicado dado a conocer a la prensa.

Galperin argumenta que los 36 bancos involucrados en MODO están operando como un cartel, una práctica que, de confirmarse, está prohibida bajo la ley de defensa de la competencia. Según Mercado Libre, MODO permite a los bancos coordinar sus estrategias comerciales, lo que les evita competir entre sí en aspectos como promociones, descuentos y servicios. 

Y radicó esa denuncia ante un organismo que conduce un viejo conocido de los representantes de Mercado Libre y de las entidades bancarias que debieron desprenderse de Prisma.

Marcos Galperin lleva su enfrentamiento a terreno de un dirigente de Mauricio Macri

El actual titular de la Comisión de Defensa de la Competencia es Alexis Pirchio que durante el gobierno de Mauricio Macri se desempeñó durante un año, entre octubre de 2017 y octubre de 2018, como director nacional de Conductas Anticompetitivas en la misma CNDC, bajo la gestión de Esteban Greco. Fue Greco y su superior de entonces, el ministro de producción, Francisco Cabrera, los que sugirieron a los bancos desprenderse de PRISMA.

El actual funcionario del gobierno de Milei, Alexis Pirchio, es licenciado en Economía de la Universidad Argentina de la Empresa (UADE) y magíster en esa misma especialidad en la Universidad del Cema. Como presidente de la Comisión tiene rango y jerarquía de subsecretario y lo acompañan en la función, como vocales de la Comisión, el magister en Finanzas Lucas Trevisani, la economista Florencia Bogo y el abogado Eduardo Montamat.

El área que conduce Pirchio se encuentra en el organigrama estatal bajo la órbita de la Secretaría de Comercio y en un contexto donde se producen numerosas derogaciones que apuntan a flexibilizar el comercio interior. 

Este último punto es una de las razones por las que Galperin incluyó en el comunicado de su empresa acerca de la cuestión, que los bancos «se concentran en MODO en lugar de competir entre sí, limitando a los usuarios las posibilidades de elegir libremente dónde operar su dinero y dificultando las transferencias». Una sintonía fina con los funcionarios de Macri- Milei que parece sustentarse en principios ideológicos.