La zona del puerto de Mar del Plata vivió una mañana de jueves totalmente inusual. El tanque de un camión atmosférico se rompió y quedó a la deriva en una loma en bajada: arrasó con una gran cantidad de motos que estaban estacionadas y terminó incrustándose contra la entrada de una empresa pesquera. La destrozó.

Tras el brutal impacto, el tanque que transportaba 50 toneladas de líquido, perdió las válvulas de seguridad y vació toda su carga en pleno asfalto. Afortunadamente no había gente en la vereda y no hubo que lamentar víctimas. Por estas horas, Policía Ecológica trabaja en la zona por temor al impacto ambiental. Hay preocupación.

La secuencia del accidente quedó registrada gracias a una de las cámaras de seguridad que hay en la entrada de Congelados Ártico, la empresa que procesa pescado y que terminó con todo el frente hecho escombros, totalmente destruido.

El siniestro tuvo lugar sobre la loma de la calle Guanahani en dirección a la avenida Edison. Por causas que se tratan de establecer, el tanque atmosférico de la empresa La Lujanera se desprendió cuando el camión iba subiendo la loma. Fue minutos antes de las 10 de la mañana, con la planta de pescado trabajando a tope.

Lo que sucedió después es lo que captó la cámara de seguridad de la pesquera. El pesado tanque descendiendo a gran velocidad a la deriva por la loma, sin ningún tipo de control, y arrasando con casi una decena de motos que estaban estacionadas en la puerta de la empresa que procesa pescado.

Impactó de lleno contra el frente de la planta y se volcó sobre el asfalto. Con el impacto y vuelvo, las válvulas de seguridad cedieron y dieron paso a la liberación del líquido que estaba dentro del cisterna. Se vació por completo.

“Fue un accidente, realmente fue un accidente. Subiendo la loma me quedé sin frenos y se me cortó el palier y no podía frenarlo. Atrás mío había una cola de autos terrible. Me desesperé porque ya no podía controlarlo y les empecé a gritar», contó Juan, el chofer del camión que sufrió la avería.

En diálogo con Canal 8, el transportista relató el desesperante momento: «Empecé a gritarles. Que se corran, que vayan para atrás. No había otra opción, intenté bajarme un segundo para poner una piedra o algo, para trabarlo pero estaba lleno y se me iba. Entonces más o menos le calculé donde lo podía llegar a parar. Si seguía para abajo, hacía un desastre, me llevaba puesto 10 autos“, explicó.

Tras denunciarse el siniestro, policía de Mar del Plata, cuerpo de Bomberos y representantes de Defensa Civil se hicieron presente en el lugar. Luego, viendo el desastre del camión cisterna vacío, debieron llamar a Policía Ecológica por temor al impacto ambiental: se derramaron 50 toneladas de líquido.