Connect with us

ECONOMIA

Opciones para invertir en el presente y resguardarse en el futuro más allá de la jubilación

Published

on


Desde hace más de una década, el sistema previsional argentino atraviesa una crisis profunda que combina fragilidad financiera, pérdida constante del poder adquisitivo y una arquitectura legal inestable. Las modificaciones legislativas y administrativas han sido tantas (al menos nueve, entre 2008 y 2025) que no sólo han diluido su previsibilidad, sino también la confianza ciudadana en que el Estado pueda garantizar una vejez digna. Con un régimen de reparto cada vez más tensionado por la informalidad y la proliferación de regímenes de excepción, los jubilados enfrentan haberes que apenas alcanzan para cubrir sus necesidades básicas.

A pesar de la urgencia, el panorama político anticipa que no habrá una reforma estructural del sistema previsional al menos hasta 2026. La fórmula actual, que indexa los haberes según la inflación, funciona como un parche, pero no como una solución de fondo. En ese escenario, cada vez más argentinos se preguntan si es viable pensar en una alternativa.

Advertisement

La evolución del haber jubilatorio mínimo en nuestro país muestra con crudeza el deterioro de su valor, medido en dólares, a lo largo de los últimos 15 años. Este fenómeno no solo refleja el impacto de la inflación interna y la devaluación, sino también el carácter errático de las políticas previsionales, muchas veces compensadas con bonos discrecionales que no modifican la base estructural del ingreso de los jubilados.

La pérdida de poder de compra de la jubilación mínima

El gráfico a continuación muestra la trayectoria de la jubilación mínima (con bono) tanto en pesos corrientes como a valor del dólar paralelo promedio de cada período. El pico más alto de la serie se registra en septiembre de 2017, cuando el haber mínimo alcanzó los u$s403,78, sin bono extraordinario ese mes. En contraste, en junio de 2025, la jubilación se ubica en u$s259,39 sin bono y u$s318,96 con bono, es decir, casi u$s100 por debajo del máximo histórico, aún con el refuerzo adicional. El punto más bajo se dio en octubre de 2020, en pleno contexto de pandemia, cuando el haber mínimo cayó a apenas u$s106,26, también sin bono.

Advertisement

El pico más alto de la serie se registró en septiembre de 2017

Este recorrido pone en evidencia la pérdida de poder de compra de los haberes previsionales, incluso en momentos de estabilidad macroeconómica relativa. La ausencia de una política de largo plazo y la continua utilización de bonos como atajo transitorio para compensar la caída real del ingreso han generado una dependencia estructural de medidas discrecionales.

El siguiente gráfico ilustra con claridad cómo, desde diciembre de 2019, la política previsional argentina profundizó una lógica paliativa, extendiendo el uso de bonos como herramienta central, en una lógica de corto plazo que no abordan los desequilibrios de fondo.

Advertisement
al dólar paralelo

Desde diciembre de 2019, la política previsional argentina profundizó una lógica paliativa

Un sistema con «bono dependencia» 

La diferencia entre ambas curvas pone en evidencia la «bono-dependencia» del sistema previsional argentino, donde buena parte del ingreso del jubilado no está asegurado por ley ni es estructural, sino que depende de decisiones discrecionales del Ejecutivo de turno.

Para entender el verdadero deterioro del poder adquisitivo de los jubilados, es necesario ponerla en relación con el costo real de vida de una persona mayor. La Defensoría de la Tercera Edad elabora una Canasta Básica de Jubilados, que incluye no solo alimentos y medicamentos, sino también rubros claves como vivienda, servicios, transporte y recreación.

Advertisement

Según la última actualización de abril de 2025, esta canasta asciende a $1.200.523 mensuales. De ese total, el 23% corresponde a alimentos, el 22% a medicamentos y el 20% a vivienda, tres rubros que concentran el 65% del gasto mensual y que, además, suelen mostrar aumentos por encima del promedio general.

La canasta

Tres rubros que concentran el 65% del gasto mensual de la canasta básica de un jubilado

En comparación, la jubilación mínima más bono en junio de 2025 se ubica en $374.783, lo que alcanza para cubrir apenas el 31% de una canasta básica. Es decir, un jubilado que percibe el haber mínimo con refuerzo estatal no puede cubrir ni un tercio de los gastos esenciales estimados para una vejez digna.

Advertisement

El siguiente gráfico ilustra cómo ha evolucionado, desde 2010 hasta hoy, la relación entre la jubilación mínima (con bono) y el valor de esta canasta. El resultado es contundente: en los últimos 15 años, nunca un haber mínimo logró cubrir el 100% del costo estimado de vida de un adulto mayor, y la tendencia general ha sido a la baja, con breves repuntes transitorios.

canasta

En los últimos 15 años, nunca un haber mínimo logró cubrir el 100% del costo estimado de vida de un adulto mayor

Para junio de 2025, por ejemplo, se necesitan más de tres jubilaciones mínimas completas para cubrir una sola canasta básica. El fenómeno refleja una creciente brecha entre el ingreso garantizado por el sistema previsional y el nivel de gastos necesario para una vida mínimamente autónoma y digna.

Advertisement

Este dato resume con claridad una realidad que viven millones de personas mayores en Argentina: la jubilación, aún con refuerzos extraordinarios, no garantiza las condiciones mínimas de bienestar.

El 2017 marcó el último pico en poder adquisitivo de la jubilación mínima. Desde entonces, el haber mínimo nominal creció año tras año, pero muy por debajo del ritmo al que lo hizo la Canasta Básica del Jubilado, que refleja el costo real de vida para un adulto mayor. El gráfico compara dos líneas: por un lado, la evolución del haber mínimo jubilatorio sin bonos para evitar la distorsión y, por el otro, el valor que debería haber alcanzado esa jubilación para mantener el mismo poder adquisitivo que tenía en enero de 2017.

poder adquisitivo

La jubilación, aún con refuerzos extraordinarios, no garantiza las condiciones mínimas de bienestar

Advertisement

El resultado es claro: salvo contadas excepciones, el haber mínimo se mantuvo sistemáticamente por debajo del nivel necesario para cubrir la canasta. En 2017 una jubilación mínima cubría el 40% y para 2025 apenas alcanza el 25%. En otras palabras, si en 2017 se necesitaban 1,5 jubilaciones mínimas para cubrir la canasta, en 2025 hacen falta 4. A pesar de los aumentos, los jubilados perdieron más de 40 puntos porcentuales de capacidad de compra en apenas ocho años. Este deterioro no se corrige con bonos compensatorios.

En comparación a los países latinoamericanos, la Argentina sigue ubicándose en la mitad baja del ranking regional cuando se compara el haber jubilatorio mínimo en dólares. El ingreso mensual de un jubilado argentino apenas supera los u$s250, lo que lo deja por debajo de países como Brasil, Colombia, México, Costa Rica o Uruguay.

Países de la región

La Argentina sigue ubicándose en la mitad baja del ranking regional

Advertisement

Esto ocurre a pesar de que Argentina tiene una economía más grande y un nivel de gasto previsional históricamente elevado en relación al PBI. Sin embargo, la inestabilidad macroeconómica, la alta inflación y la licuación sostenida de ingresos hicieron que el haber mínimo pierda valor real y relativo, incluso en comparación con países de menor desarrollo económico.

Hoy un jubilado argentino cobra solo poco más de la mitad que uno uruguayo, y menos que uno colombiano o mexicano, a pesar de que esos países no cuentan con sistemas previsionales universales tan amplios como el argentino.

Inversión «anti-jubilación»: opciones para resguardarse

El sistema previsional argentino desde hace tiempo atraviesa una crisis estructural. Existe un fuerte deterioro en la relación entre aportantes y beneficiarios: cada vez hay menos trabajadores formales realizando aportes y más personas que acceden a una jubilación sin haber contribuido el mínimo necesario, a través de moratorias.

Advertisement

Este desbalance compromete la sostenibilidad del sistema de reparto, que se basa en la solidaridad intergeneracional: los aportes de los activos de hoy financian las jubilaciones de los pasivos actuales. Sin embargo, el envejecimiento de la población y el avance de la informalidad generan una tensión que hace cada vez más difícil sostenerlo.

En contraste, los sistemas de capitalización individual, como los seguros de vida con ahorro o los seguros de retiro, funcionan con una lógica diferente. Allí, cada aporte va a una cuenta personal que genera rendimientos con el tiempo. Ese capital se acumula y, llegado el momento, puede utilizarse para complementar la jubilación o ser retirado total o parcialmente. Además, esos fondos son heredables en caso de fallecimiento, y en muchos casos se integran con seguros de vida o invalidez, ofreciendo una cobertura adicional.

Por ejemplo, de acuerdo a Sancor Seguros con un seguro de retiro una persona de 35 años que aporta $50.000 por mes durante 30 años, con una tasa de rendimiento real proyectada del 4% anual, podría acumular un fondo de $30.754.000. Eso permitiría generar una renta vitalicia mensual estimada en $205.320 a valor de hoy.

Advertisement

Este tipo de instrumentos fomenta el ahorro disciplinado a largo plazo, algo difícil de lograr de forma autónoma. Además, ofrecen previsibilidad y una sensación de control sobre el propio futuro financiero.

La realidad es que el sistema jubilatorio argentino hace décadas que muestra signos de agotamiento. La sostenibilidad del sistema es una de las más precarias del mundo. Frente a esta situación, cada vez más personas optan por no dejar su futuro librado al azar y comienzan a construir una solución paralela. Invertir hoy en una alternativa previsional, una inversión «Anti-jubilación», no es solo una decisión financiera: es una forma de protegerse frente a la incertidumbre y empezar a garantizar una vejez más digna.

Advertisement



iprofesional, diario, noticias, periodismo, argentina, buenos aires, economía, finanzas,
impuestos, legales, negocios, tecnología, comex, management, marketing, empleos, autos, vinos, life and style,
campus, real estate, newspaper, news, breaking, argentine, politics, economy, finance, taxation, legal, business,
technology, ads, media,jubilacion,jubilados,haberes,inflacion

ECONOMIA

Dólar: el rango de precios que prevé el mercado para julio, con efecto aguinaldo y menor empuje del agro

Published

on



Desde el inicio del nuevo esquema cambiario de bandas de flotación, a mediados de abril, el tipo de cambio mayorista, que es la referencia del mercado, tuvo una suba inicial hasta los $1.198 y luego operó con cierta volatilidad en los últimos dos meses y medio. De cara al mes de julio, el mercado prevé que la cotización se ubique por arriba de los $1.200.

«Hasta ahora, la liberalización parcial del cepo ha sido exitosa: el tipo de cambio mostró cierta volatilidad durante los primeros días, pero luego se estabilizó, la brecha con los paralelos desapareció, y no hubo un rebrote inflacionario (de hecho, el IPC Nacional evidenció en mayo la menor suba mensual desde 2017, excluyendo abril 2020)», señaló en un informe la consultora Invecq.

Advertisement

Tras cerrar en mayo a $1.188, lo que implicó una baja mensual de $18, el dólar oficial mayorista durante junio bajó hasta llegar a $1.142,5 el 19/06 y desde entonces comenzó una tendencia alcista hasta los $1.191,5.

Leo Anzalone, economista y director del Centro de Estudios Políticos y Económicos (Cepec), sostuvo respecto a la baja observada en el dólar durante algunas semanas de junio: «El movimiento se explicó por una fuerte liquidación del agro, por el pico de la cosecha gruesa, y por el ingreso de capitales financieros tras el levantamiento del cepo. A eso se sumó un contexto de inflación en baja y mayor estabilidad, que redujo la demanda de cobertura cambiaria».

En ese sentido, según Ciara-CEC, en los primeros cinco meses del año, el sector agroindustrial aportó u$s11.700 millones, lo que implicó un aumento del 29% respecto al mismo periodo de 2024.

Advertisement

Dólar: qué precio espera el mercado para julio y por qué

Ahora bien, en julio podría haber ciertos factores estacionales que pondrían presión al tipo de cambio y el mercado espera una pequeña suba, aunque lejos de que roce el hecho de la banda de flotación, pero asentaría arriba del los $1.200, entre ese valor y unos $1.250/70. Pero aún lejos del techo de la banda.

«Considero que en julio podríamos tener una leve suba en el mes, dado el cobro de aguinaldo, una potencial demanda estacional, sumado a alguna inicial dolarización de carteras preelectoral. Creo que, sin embargo, seguirá cerca del medio de banda, aunque es probable que rompa y se asiente arriba de los $1.200», comentó Federico Glustein, economista.

Y agregó: «La liquidación del agro se podría reducir por la reposición de las retenciones todavía no compensadas por la generación de recursos de Vaca Muerta».

Advertisement

Por su parte, Claudio Caprarulo, economista de la consultora Analytica, resaltó que en el séptimo mes del año suele haber una menor oferta de dólares del agro, ya que la cosecha gruesa finaliza en junio y ya sin mayores incentivos por la vuelta de las retenciones (que fueron reducidas temporalmente), lo que provocó una adelanto en la liquidación del campo.

A su vez, crecerá la demanda de la divisa norteamericana debido al cobro del aguinaldo, el cual puede ser utilizado adquirir dólares por parte las familias para ahorro, ahora sin cepo para las personas físicas, o bien para usarlos para pagar los consumos en el exterior de la tarjeta, ya que se prevé una alta demanda vía turismo por vacaciones de invierno de argentinos en el exterior por el atraso cambiario; sumado al creciente incremento de las importaciones.

Así, «la cotización se ubicará arriba de $1.200, entre $1.200 y $1.250/70. La caída de los últimos meses no es sostenible, vuelve a subir, no muy fuerte, dentro de la banda, pero con tendencia alcista», remarcó Caprarulo.

Advertisement

A pesar de la estacionalidad que impondría una pequeña tendencia alcista para el séptimo mes del año, los analistas sostienen que la variación del tipo de cambio, aunque con cierta volatilidad propia del esquema de flotación, se encuentre con cierta estabilidad y no muy lejos del medio de la banda de flotación.

Andrés Reschini, analista financiero y consultor de F2 Soluciones Financieras, expresó: «El Gobierno pasó de hablar de un dólar más yendo hacia la banda inferior a hablar de estabilidad y por ahora no encuentro demasiados argumentos como para pensar que en julio no vaya a ser así, más allá de algunos momentos de volatilidad que pudiesen darse. Con inflación cayendo, tasas positivas en pesos y la colocación de bonos hard peso, entre otras cuestiones, el Gobierno parece haberle encontrado la vuelta para transitar con cierta estabilidad hasta octubre».

«Julio trae menor liquidación del agro, ya que se termina la gruesa y aparece el efecto aguinaldo, que puede generar algo más de circulación de pesos y cierta dolarización. Pero el impacto más fuerte por cobertura electoral probablemente se vea hacia el último trimestre. En este esquema con bandas cambiarias y sin cepo, lo esperable sería que, aunque con fluctuaciones, el dólar siempre tienda al medio de la banda, hoy en torno a los $1.200″, añadió Anzanlone.

Advertisement

El desafiante segundo semestre que afrontará el Gobierno

Para lo que resta del segundo semestre, el Gobierno apuesta a estabilizar el tipo de cambio y no generar mayores ruidos y eso provoque un traslado a precios en medio de las elecciones legislativas de octubre, donde el oficialismo se juega un pleno a la baja de la inflación para poder ganar en las urnas.

Pero la segunda mitad del año es un período estacionalmente en el que el campo liquida menos. Tras los más de u$s11.000 millones aportados por el agro en lo que va del año, se espera que la cifra baje considerablemente en los próximos meses a diciembre. «Hay otras exportaciones, pero es cierto que la gran estacionalidad es abril-junio. Para peor, se adelantó mucho por la baja temporaria de las retenciones, así que el bajón va a ser grande para el segundo semestre», dijo Martín Burgos, economista de la consultora Lado B.

A su vez, en abril se fueron por turismo u$s863 millones por incremento del turismo emisivo, aunque los analistas prevén que este último guarismo se vea incrementado por las vacaciones de invierno y el atraso cambiario.

Advertisement

También, los argentinos demandarán más dólares para dolarizarse, en un contexto de año electoral y sin cepo. En el cuarto mes del año, los ahorristas compraron u$s2.048 millones. Según la consultora Audemus en 2017, un año electoral de medio término también y sin cepo, los datos de lo que se vendía y compraba para dólar ahorro fue de u$s20.000 millones, como para tener un parámetro de una futura posible demanda dolarizadora de carteras de ahorristas.

Todo esto generará presión sobre la cotización de tipo de cambio. «En términos estructurales, siempre el segundo semestre del año es en donde desacumulás divisas. Pareciera que no va a haber muchos más ingresos de dólares que la cuenta financiera. Entonces, teniendo en cuenta la demanda de divisas que enfrenta tradicionalmente la economía argentina en el segundo semestre, evidentemente aparece algún tipo de dificultad para sostener la paridad cambiaria», advirtió Haroldo Montagú, economista jefe de Vectorial.

Ahora bien, el Gobierno apuesta al Bonte 2023, con el cual ya adquirió u$s1.500 millones, para sumar unos mil millones de dólares mensuales hasta fin de año, y con el stock recibido por parte del FMI (u$s12.000 millones) y el REPO con los bancos (u$s3.000 millones en total), esperan robustecer las arcas del Banco Central y tener poder de fuego para sostener a raya el tipo de cambio oficial. Quedará por verse qué tanto le alcanza al equipo económico, sobre todo con nulos resultados del plan «dólar colchón».

Advertisement

Incluso, esta semana se dio a conocer que el Central intervino en el dólar futuro, para anclar las expectativas cambiarias sin la necesidad de sacrificar reservas internacionales. De acuerdo a datos oficiales, el BCRA alcanzó una posición neta vendedora de u$s1.946 millones a fines del mes pasado. El guarismo implica un incremento sustancial frente a abril, cuando el monto era de apenas u$s409 millones. En términos netos, la máxima entidad monetaria cerró contratos por u$s1.537 millones en 30 días.

iprofesional, diario, noticias, periodismo, argentina, buenos aires, economía, finanzas,
impuestos, legales, negocios, tecnología, comex, management, marketing, empleos, autos, vinos, life and style,
campus, real estate, newspaper, news, breaking, argentine, politics, economy, finance, taxation, legal, business,
technology, ads, media,dolar,aguinaldo,gobierno,javier milei

Advertisement
Continue Reading

ECONOMIA

Wall Street recomienda resolver de manera urgente un problema con el dólar en Argentina

Published

on



La difusión este miércoles de los datos de balanza de pagos, que confirman una aceleración en la salida de divisas, se produjo en paralelo a las críticas que empiezan a acumularse desde Wall Street.

Es que desde la bolsa estadounidense se advierte que el país no debería repetir los errores del pasado, ya sea con la Plata Dulce de la tablita de Martínez de Hoz —una suerte de antesala al carry trade—, o la tozuda defensa, en la segunda mitad de los 90, de una convertibilidad que terminó dejando un tendal de desocupados, al no advertirse que el mundo empezaba cambiar, primero con el Efecto Tequila a fines de 1994 y, luego, con la devaluación del real brasileño en 1999.

Advertisement

Wall Street advierte a Luis Caputo: ¿su plan necesita un service?

Los principales bancos y calificadoras de Estados Unidos llamaron la atención sobre el fenómeno de «monedas fuertes» que se está produciendo en distintos países latinoamericanos, sin que haya muchos fundamentos para esa tendencia.

Para analistas del JPMorgan Private Bank, la apreciación cambiaria es «un reflejo de la debilidad del dólar, y no una fortaleza de las monedas locales» en América Latina.

Sostienen que no hay razones para que este año las monedas cierren con los niveles que se han dado durante el primer semestre.

Advertisement

En la misma línea, la calificadora Moody’s advirtió que la apreciación del tipo de cambio tiene un impacto «negativo» en las empresas, por mayores costos en dólares y la caída de precios internacionales.

«La apreciación cambiaria derivó en un incremento de los costos operativos en moneda local, con un impacto negativo en la rentabilidad de las compañías que presentan una porción considerable de sus costos en pesos, y cuyos flujos de fondos están denominados principalmente en dólares», dijo esa agencia de rating.

Los datos del déficit en la balanza de pagos se conocieron en una jornada en la que la demanda de dólares dio un salto, e hizo subir $17 la cotización del spot mayorista, hasta los $1.191,50.

Advertisement

En la city porteña se comentaban los datos difundidos por el INDEC correspondientes al primer trimestre del año, que confirmaron un déficit en la balanza de pagos que se habría agudizado entre abril y junio. Salen muchos más dólares de los que entran.

En ese reporte, se indicó que el turismo al exterior subió casi 46% en mayo, y a su vez cayó 14% el ingreso de visitantes del extranjero. Si se suman linealmente los porcentajes, el saldo negativo sería del 60%.

Este comportamiento explica en parte la salida sostenida de dólares, que el Gobierno viene intentando financiar con endeudamiento, de la mano del expertise de la dupla Luis Caputo-Pablo Quirno.

Advertisement

La cuenta corriente de la balanza de pagos —uno de los datos malditos de la historia económica argentina— arrojó su primer desequilibrio en lo que va del gobierno de Milei, luego de irse deteriorando en forma paulatina.

La balanza refleja la entrada y salida de dólares de la economía por comercio exterior de bienes, turismo y pagos de intereses de la deuda.

El déficit fue de u$s5.191 millones en el primer trimestre, en especial por la cuenta servicios, que tuvo un rojo de u$s4.502 millones (turismo, courier y streaming, entre otros).

Advertisement

Algunos analistas, como los de Cohen Aliados Financieros, señalaron que estos números constituyen «escenas de atraso cambiario explícito».

Y remarcaron que, en el primer trimestre del año, el déficit de la cuenta de servicios fue casi tan alto como el de todo 2023.

Uno de los factores claves que explicaron esos datos fue el turismo, que generó una salida de divisas de u$s3.464 millones en el primer trimestre.

Advertisement

Hubo coincidencia que la salida de dólares por viajes mostró un nivel récord. Pero más parece preocupar que el Gobierno no dé señales de estar advirtiendo el problema. O al menos disimula su preocupación.

Incluso, Milei dijo semanas atrás que no se podía negar el derecho de los argentinos a viajar, lo cual indicaría que el Gobierno poco y nada prevé hacer para frenar esta tendencia. 

Para el director de Planificación Productiva de Fundar, Daniel Schteingart, esta tendencia no puede ser sostenible. Y alertó sobre un punto clave: el superávit en bienes no compensa la disparada del déficit en servicios. La razón hay que encontrarla, en buena medida, en la explosión del turismo emisivo.

Advertisement

La presencia de miles de hinchas argentinos en el Mundial de Clubes le pone un manto colorido a un problema que parece ser cada vez más serio: a Caputo se le agotan los dólares, claves, por ejemplo, para afrontar el pago de importaciones.

«Y eso que el INDEC aún no contó los dólares que se están dejando los argentinos en Miami por el Mundial de Clubes. No quiero pensar lo que puede ocurrir si Lionel Messi llega a la final», ironizó un economista que no le pierde pisada a estos datos, y tampoco al fútbol, y que suele publicar sus reflexiones en distintos medios.

Además, el experto llama la atención sobre lo que representa un desequilibrio creciente en la balanza de pagos: «Estás aumentando el endeudamiento con el resto del mundo», asegura.

Advertisement

A su vez, Moody’s alertó sobre una elevada volatilidad en el precio de los commodities, como la soja y el petróleo, lo cual presiona sobre la rentabilidad del sector agropecuario y de extracción de hidrocarburos, agravada por el dólar barato. Si a eso se le suma atraso cambiario, la ecuación no cierra, le faltó agregar.

En ese sentido, Moody’s advirtió que «el sector de producción de hidrocarburos convencional y el industrial ven erosionados sus niveles de rentabilidad por la apreciación cambiaria y el mayor grado de apertura de la economía».

La estrategia de endeudamiento que implementa el ministro Caputo genera cuestionamientos entre los especialistas. Tal vez el más fuerte, entre los economistas que no pueden ser tildados de kirchneristas o peronistas, lo hizo Juan Carlos de Pablo: «A los argentinos no les podés decir que hagan esfuerzo fiscal solo para pagar intereses de deuda», advirtió.

Advertisement

A este escenario se suma el deterioro de la balanza comercial, por el fuerte salto en importaciones.

Un renombrado economista de la UBA suma otro dato: en el segundo trimestre el déficit de cuenta corriente se habría profundizado. La razón: las importaciones van cada vez más rápido por el ascensor, mientras las exportaciones apenas arrastran los pies por la escalera.

Advertisement

iprofesional, diario, noticias, periodismo, argentina, buenos aires, economía, finanzas,
impuestos, legales, negocios, tecnología, comex, management, marketing, empleos, autos, vinos, life and style,
campus, real estate, newspaper, news, breaking, argentine, politics, economy, finance, taxation, legal, business,
technology, ads, media,dolar,fmi,deficit,turismo

Continue Reading

ECONOMIA

Las sanciones por conducir tapando la patente en 2025: no solo es multa, sino que acarrea otros castigos

Published

on



En un intento por esquivar radares o cámaras de control, muchos conductores apelan a una práctica tan común como riesgosa: tapar, doblar o adulterar la chapa patente del vehículo. Lejos de ser una travesura o una picardía criolla, esta conducta constituye una infracción gravísima en distintas jurisdicciones del país, lo que no solo acarrea fuertes multas

En la Ciudad de Buenos Aires, por ejemplo, puede implicar una multa que supere el millón de pesos y la pérdida de 10 puntos en el sistema de scoring. En la Provincia de Buenos Aires, la sanción puede superar el millón cuatrocientos mil pesos, e incluso derivar en la retención de la licencia y procesos judiciales.

Advertisement

El endurecimiento de estas sanciones refleja un cambio de enfoque: ya no se trata solo de multar, sino de combatir maniobras que atentan contra la seguridad vial y la trazabilidad de los vehículos en la vía pública.

Aunque la inflación muestra una tendencia a la baja, los valores aún elevados han llevado a muchas provincias argentinas a actualizar el costo de las infracciones de tránsito. En la Ciudad de Buenos Aires (CABA) y la provincia de Buenos Aires (PBA), los montos más altos pueden superar el millón y medio de pesos, mientras que en distritos como Jujuy o San Juan los valores son notablemente menores.

Multas de tránsito por conducir tapando la patente

Provincia de Buenos Aires: el litro de nafta fija el precio de las infracciones

En la provincia de Buenos Aires,  la Subsecretaría de Política y Seguridad Vial del Ministerio de Transporte bonaerense. Cada sanción se encuentra expresada en «UF’s» (unidades fijas equivalentes a 1 (un) litro de nafta de mayor octanaje informado por el Automóvil Club Argentino sede Ciudad de La Plata).

Advertisement

En este sentido, el Automóvil Club Argentino, sede ciudad de La Plata, fijó el precio de la nafta en $1.506 por mes. Cada multa depende del grado de gravedad de la infracción cometida y queda establecido por los jueces de Falta de cada jurisdicción.

El valor de cada Unidad Fija (UF) -el criterio para calcular las multas- se estableció en $1.506, equivalente al precio de un litro de nafta premium según el Automóvil Club Argentino en La Plata.

Entre las multas más frecuentes y costosas en territorio bonaerense se encuentran:

Advertisement
  • Exceso de velocidad: de 150 a 1.000 UF —entre $225.900 y $1.506.000
  • Alcohol al volante o consumo de drogas: hasta 1.000 UF ($1.506.000)
  • Circular en contramano o por banquina: desde $301.200
  • Licencia vencida o mal estacionamiento: entre $75.300 y $150.600
  • Falta de VTV, seguro o cédula: desde $75.300

También se destacan penalidades elevadas por no usar cinturón, negarse a presentar documentación, transportar más personas que las permitidas o cruzar semáforos en rojo.

CABA: multas de tránsito que superan los dos millones de pesos

En la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, los valores se calculan de forma distinta, y algunas infracciones pueden alcanzar sumas muy superiores. A principios de este año, las multas por infracciones de tránsito en la Ciudad de Buenos Aires aumentaron un 4,6%. Esto se aplica sobre el valor de la Unidad Fija (UF), que sería la base para calcular multas. Actualmente, esta tiene un valor de $1.398, por lo que conducir tapando la patente puede llegar a $1.398.000, ya que equivale a 1000 unidades fijas. También hay pérdidas de puntos en el scoring.

Por ejemplo, otras multas llegan a:

  • Circular a más de 140 km/h: hasta $2.520.800
  • Conducir alcoholizado (más de 1 g/l): hasta $1.260.400
  • Pasar una barrera baja: desde $252.080
  • Tapar o adulterar la patente: $630.200 y pérdida de 10 puntos en el sistema de scoring
  • Cruzar un semáforo en rojo: hasta $945.300
  • Enviar mensajes mientras se conduce: $126.040
  • Circular sin VTV o sin cinturón: $63.020
  • Licencia vencida: $31.510

Además, la obstrucción de rampas para personas con discapacidad, los carriles exclusivos y el uso del celular al volante también implican importantes sanciones.

Tipos de infracciones de tránsito

Como se mencionó, la Ley de Tránsito clasifica las infracciones en dos categorías principales:

Advertisement

Faltas graves:

  • No presentar la documentación requerida.
  • Circular sin patente o seguro vigente.
  • Negarse a proporcionar información cuando se le solicita.
  • Pasar un semáforo en rojo.

Faltas leves:

  • Estacionar en doble fila.
  • Usar la bocina sin necesidad.
  • Exceder hasta un 10% el límite de velocidad permitido.

Conocer la naturaleza de la infracción es fundamental para determinar cuándo prescribe y si hay acciones que puedan interrumpir ese período. Si ha transcurrido el tiempo sin ninguna acción que interrumpa el proceso, es posible evitar el pago de la multa.

Plazos de prescripción de multas de tránsito, provincia por provincia

Los plazos de prescripción para multas de tránsito varían significativamente entre provincias. A continuación, un breve resumen:

  • Buenos Aires: 2 años (leves), 5 años (graves)
  • Ciudad Autónoma de Buenos Aires: 5 años (todas las faltas)
  • Mendoza: 2 años (leves), 3 años (graves), 4 años (gravísimas)
  • Chaco: 2 años (leves), 5 años (graves)
  • Chubut: 6 meses (sin iniciar procedimiento), 1 año (con procedimiento iniciado), 2 años (sentencia firme)
  • Formosa: 1 año (leves), 2 años (graves)
  • Corrientes, San Juan y Tierra del Fuego: 2 años
  • Neuquén y Córdoba: 3 años (todas las faltas)
  • Entre Ríos, Jujuy, La Pampa, La Rioja, Misiones, Río Negro, Salta y San Luis: 5 años
  • Santa Cruz, Santa Fe, Santiago del Estero y Tucumán: siguen el criterio nacional.

Es crucial recordar que las multas pueden extinguirse si el acreedor no reclama su pago dentro del plazo establecido.

Aunque no se pueden eliminar automáticamente del registro, cada jurisdicción tiene la facultad de establecer sus criterios para su gestión.

Sin embargo, estas regulaciones no pueden vulnerar el derecho a ser juzgado en un tiempo razonable.

Advertisement

iprofesional, diario, noticias, periodismo, argentina, buenos aires, economía, finanzas,
impuestos, legales, negocios, tecnología, comex, management, marketing, empleos, autos, vinos, life and style,
campus, real estate, newspaper, news, breaking, argentine, politics, economy, finance, taxation, legal, business,
technology, ads, media,multas,transito,patente

Continue Reading

LO MAS LEIDO

Tendencias

Copyright © 2025 NDM - Noticias del Momento | #Noticias #Chimentos #Política #Fútbol #Economía #Sociedad