ECONOMIA
¿Comprar un 0 km con un plan de ahorro?: cuáles son los 5 autos con cuotas más bajas del mercado en noviembre

El regreso del crédito a tasas más accesibles será el impulso que el mercado automotor argentino esperaba para levantar las ventas en un mes clave del año, noviembre, el último en el que las operaciones tienen un ritmo relativamente normal antes de llegar al mes de peores operaciones históricas de fin de año.
La caída progresiva de las ventas de agosto, septiembre y octubre en relación a la curva ascendente que traía el mercado había puesto en duda si se podrían superar las 630.000 unidades en 2025, pero con una macroeconomía nuevamente estable tras los dos meses en los que las elecciones legislativas generaron incertidumbre y un freno en la actividad comercial, noviembre será clave en los números definitivos del año.
Las dos formas que tienen los argentinos de comprar un auto 0km con financiación son los créditos prendarios de las propias marcas o de algunos bancos. Las primeras requieren un aporte de parte del capital y una financiación de hasta 2 años (24 cuotas) por el saldo restante, mientras que la segunda tiene tasas altas que todavía no son tan atractivas para el mercado, aunque han empezado a bajar en las últimas dos semanas.

La otra manera de alcanzar el 0 km es el plan de ahorro previo que ofrecen todas las marcas nacionales. La ventaja de esta modalidad es un monto mucho mas bajo de las cuotas y los plazos de pago notoriamente más largos, que ya llegan a los 120 meses. La desventaja es la disponibilidad del vehículo porque cada mes se venden dos autos por grupo, uno por sorteo y otro por licitación, lo que implica que si no se dispone de un capital para licitar, hay que esperar a la suerte.
Sin embargo, aunque tienen una cuota más accesible, los planes de ahorro tienen un costo adicional que es el de entrega de las unidades, y que equivale aproximadamente a un 10% del valor del auto, pero además tienen también que tener pagadas, o pagar si no se cumple esa condición, una cantidad mínima de cuotas para poder retirar el vehículo.
Otra característica que tiene este método de compra es que hay seis formatos distintos de adquisición, que son los 60/40, 70/30, 75/25, 80/20, 90/10 y 100%. Estos porcentajes están referidos a la parte del auto que se financia y a la que se debe integrar de contado.
“Incluso los Planes 100% financiados requieren tener canceladas varias cuotas para poder retirar el auto, ya que cuentan con integración mínima de capital que equivale aproximadamente al 30% del valor del vehículo. Además, siempre es importante recordar que al momento de adjudicar se deberán aprobar requisitos crediticios similares a cualquier otra financiación prendaria, y abonar los gastos de retiro, que oscilan entre el 8 y el 10%”, explicó Pablo Piñeiro, especialista en planes de ahorro del mercado automotor argentino.
Esto significa que aún pagando la cuota más baja del mercado, al momento de sacar el auto de la concesionaria, se tiene que tener saldado cerca de un 40% promedio del precio de lista del vehículo. Hay algunas excepciones, pero son las que van a entregar el auto contra una presentación de ingresos que cuatripliquen el valor de la cuota y un codeudor o garantía.

Precio de lista: $25.610.000
Adjudica por Sorteo o Licitación
Plan 100% de 120 cuotas
Valor de la cuota pura: $213.416

Precio de lista: $26.213.000
Adjudicación Asegurada Cuota 6 con 40% de integración de capital.
Plan 80/20 de 84 cuotas
Valor de la cuota pura: $249.647

Precio de lista: $28.832.000
Adjudicación Asegurada Cuota 4 con 40% de integración de capital.
Plan 70/30 de 84 cuotas
Valor de la cuota pura: $240.266

Precio de lista: $29.293.000
Adjudicación especial en cuota 2 con 30% de integración de capital
Plan 70/30 en 84 cuotas
Valor de la cuota pura: $244.108

Precio de lista: $30.300.000
Adjudicación especial en cuota 2 con 20% de integración de capital.
Plan 100% en 120 cuotas
Valor de la cuota pura: $252.500
Es importante explicar que la referencia se toma del valor de la cuota y no de la cuota mensual efectiva que se paga por dos razones. La primera es que las cuotas mensuales varían a lo largo del plan porque tienen costos asociados como gastos administrativos, impuestos y seguro de vida que perdura a lo largo de todo el plan. El seguro del vehículo se sumará a la cuota mensual desde su efectiva entrega al usuario y su puesta en la calle.
La segunda es que la cuota pura es la que se utiliza para licitar y/o adelantar cuotas. Esa es la referencia real para comparar valores de cuota, porque además existen planes que tienen esa cuota o varias de las primeras, con un valor alterado por un diferimiento, que de todos modos en algún momento se cobrará en cuotas futuras. El valor promedio de la cuota mensual es aproximadamente un 30% del valor de la cuota pura.
adult,auto,automobile,beard,beautiful,blonde,business,buy,buyer,buying,car,caucasian,cheerful,client,customer,dealer,dealership,dress,driver,female,girl,happy,indoors,jacket,key,looking,male,man,new,people,person,purchase,rent,rental,retail,sale,salon,service,shirt,shop,showing,showroom,smiling,suit,transport,transportation,two,vehicle,woman,young
ECONOMIA
Efecto Whirlpool: ya hay despidos y cierres entre sus pymes proveedoras del Parque Industrial de Pilar

REUTERS/Anindito Mukherjee/File Photo
El cierre de la fábrica de lavarropas Whirlpool desencadenó un efecto dominó en Parque Industrial de Pilar, donde empresas proveedoras vinculadas a su cadena de valor comenzaron a cesar sus actividades y a despedir personal.
La firma logística Translog anunció el cierre de sus operaciones y desvinculó a casi todo su personal. La noticia se suma a los despidos en Novax, proveedor de piezas plásticas para los lavarropas que fabricaba Whirlpool. En este caso, la empresa reconoció que por lo menos 38 puestos de trabajo están en riesgo, según informó Pilar a diario.
La logística Translog despidió a 17 de sus 20 empleados y reubicó a los 3 restantes en otra filial de la empresa. Había iniciado sus actividades en Pilar en octubre de 2022, coincidiendo con la apertura de la planta de Whirlpool en la localidad de Fátima. Su centro de distribución, de 15.000 metros cuadrados, se instaló específicamente para gestionar los productos de la multinacional, incluyendo lavarropas y otros electrodomésticos de línea blanca.
Según fuentes consultadas por Pilar a Diario, en los momentos de mayor actividad se movilizaban hasta 80.000 piezas diarias y se trabajaba durante toda la semana. El flujo de productos seguía un circuito definido: desde la fábrica de Fátima, los lavarropas se trasladaban al depósito de Translog en la calle Frondizi y, desde allí, a cadenas de electrodomésticos e hipermercados.
La situación comenzó a deteriorarse a mediados de este año, cuando se comunicó a los trabajadores de Translog que las operaciones con Whirlpool tenían fecha de finalización. A fines de agosto, se despacharon los últimos lavarropas, mientras la multinacional avanzaba con la construcción de un centro de distribución propio de 45.000 metros cuadrados en Fátima, frente a la planta que cerraría. Translog intentó sostener su actividad mediante contratos transitorios con otras empresas, pero estos acuerdos concluyeron recientemente. El viernes pasado, 17 empleados recibieron la notificación formal de su despido y se prevé que las indemnizaciones se depositen en los próximos días.

En el último tramo de la crisis de Whirlpool, el presidente de Novax, Máximo Donzino, expresó al medio local su intención de limitar los despidos, aunque reconoció: “Es claro que nos sobra mucha gente”. Novax, dedicada a la fabricación de piezas plásticas para los lavarropas de Whirlpool, enfrenta la posible pérdida de 38 empleos tras el cierre de una de sus líneas de producción. A estos casos se suman los 220 despidos ya concretados en Whirlpool y la expectativa de que otras compañías de transporte y comercios locales sufran consecuencias indirectas por la caída del consumo de los trabajadores afectados.
Los casos de Translog y Novax se suman a una cadena de proveedores y prestadores logísticos que, al perder a su principal cliente, ven amenazada su continuidad. El fenómeno podría ampliarse a empresas de transporte y, de manera más difusa, a comercios y servicios locales, afectados por el contexto.
La decisión de la multinacional Whirlpool de cerrar su planta de lavarropas ubicada en el Parque Industrial Pilar fue sorpresiva pero no tanto. Hacía tiempo ya que la compañía no andaba bien, que los números no le cerraban y que no había podido alcanzar el objetivo del proyecto original, que era producir 300.000 unidades por año y exportar el 70 por ciento.
¿Cómo fue que la compañía pasó de inaugurar una planta último modelo para producir lavarropas de carga frontal de última generación y exportar a decidir cerrarla en apenas tres años (se inauguró en octubre de 2022)? En el sector recuerdan que no es la primera vez que la compañía de origen norteamericano toma esta decisión en la Argentina. Ya lo había hecho en 2003, cuando decidió cerrar su planta de heladeras que tenía en San Luis y dedicarse a importar. Ahora pasó lo mismo: el negocio no anduvo y la decisión, liderada desde la filial de Brasil de la cual depende, fue abandonar la producción local, despedir a sus 220 trabajadores, y dedicarse a la importación.
Tras la noticia, fuentes de la empresa dialogaron con Infobae y explicaron que fueron dos los motivos por los cuales se optó por este camino: por un lado, los altos costos argentinos que hacían inviable exportar a un precio competitivo -de hecho, estaban mandando muchos menos lavarropas al exterior que el plan original- y, por otro, la apertura total de la economía, que hizo que se desplomaran los precios de los electrodomésticos por la mayor competencia de productos importados. En el caso de los lavarropas, en octubre se vendieron 20% más baratos que el mismo mes del año pasado, según datos de la consultora NielsenIQ.
ECONOMIA
Netflix compró Warner Bros. Discovery por USD 82.700 millones: incluye sus estudios de cine y televisión, HBO Max y HBO

Netflix anunció la compra de Warner Bros. Discovery por 82.700 millones de dólares, una operación que transformará de manera profunda el panorama de la industria del entretenimiento y los medios. Este movimiento, que se produce tras una serie de ofertas mejoradas por parte de los principales actores del sector, plantea interrogantes sobre el futuro modelo de negocio de Netflix y el impacto regulatorio que podría acarrear la operación, especialmente por el alcance global de la plataforma.
La adquisición representa una de las mayores operaciones en la historia del entretenimiento, con un valor total de empresa de aproximadamente USD 82.700 millones (valor de capital de USD 72.000 millones). El acuerdo, que se concretará tras la escisión previamente anunciada de la división Global Networks de Warner Bros. Discovery —Discovery Global— en una nueva compañía cotizada, está previsto para el tercer trimestre de 2026. Esta fusión promete redefinir el panorama audiovisual global al unir el alcance internacional de Netflix con el legado centenario de Warner Bros.
Según detalló David Zaslav, presidente y CEO de Warner Bros. Discovery, la integración de ambas compañías permitirá que las historias más influyentes lleguen a nuevas audiencias: “El anuncio de hoy une a dos de las mayores empresas de narración del mundo para llevar a más personas el entretenimiento que más disfrutan ver”, afirmó Zaslav.
Destacó que Warner Bros. ha cautivado al público y moldeado la cultura durante más de cien años, y que la alianza con Netflix garantizará que las historias más emblemáticas sigan presentes en la vida de las próximas generaciones.El acuerdo, valorado en USD 27,75 por acción de Warner Bros. Discovery (sujeto a ajustes según lo estipulado en el contrato), permitirá que franquicias y títulos emblemáticos como The Big Bang Theory, The Sopranos, Game of Thrones, El mago de Oz y el Universo DC se sumen al catálogo de Netflix, que ya incluye éxitos como Wednesday, La casa de papel, Bridgerton, Adolescence y Extraction.
Esta combinación ampliará la oferta de contenidos para los suscriptores y consolidará la posición de Netflix como líder en el sector del streaming.Ted Sarandos, codirector ejecutivo de Netflix, subrayó la magnitud de la operación: “Nuestra misión siempre ha sido entretener al mundo. Al combinar la increíble biblioteca de Warner Bros.—desde clásicos atemporales como Casablanca y El ciudadano Kane hasta favoritos modernos como Harry Potter y Friends—con nuestros títulos que definen la cultura como Stranger Things, KPop Demon Hunters y El juego del calamar, podremos hacerlo aún mejor. Juntos, podemos ofrecer al público más de lo que ama y ayudar a definir el próximo siglo de narración”, declaró Sarandos.

Por su parte, Greg Peters, también codirector ejecutivo de Netflix, remarcó el impacto a largo plazo de la adquisición: “Esta adquisición mejorará nuestra oferta y acelerará nuestro negocio durante décadas. Warner Bros. ha contribuido a definir el entretenimiento durante más de un siglo y lo sigue haciendo gracias a sus extraordinarios ejecutivos creativos y capacidades de producción. Con nuestro alcance global y modelo de negocio probado, podemos presentar a una audiencia más amplia los mundos que crean, ofreciendo a nuestros miembros más opciones, atrayendo a más fanáticos a nuestro servicio de streaming de primer nivel, fortaleciendo toda la industria del entretenimiento y generando más valor para los accionistas”.
En el tramo final de las negociaciones, Paramount expresó su descontento con el proceso, señalando en una carta dirigida al director ejecutivo de Warner Bros. Discovery, David Zaslav, que la compañía había “iniciado un proceso miope con un resultado predeterminado que favorece a un solo postor”, en referencia a Netflix. Además, Paramount advirtió en una comunicación previa a los abogados de Warner Bros. Discovery que una venta al gigante del streaming probablemente “nunca se concretaría” debido a los posibles obstáculos regulatorios tanto en Estados Unidos como en el extranjero, dada la posición dominante de Netflix en el mercado global.
La decisión de Warner Bros. Discovery de entablar conversaciones exclusivas con Netflix se produce después de recibir propuestas de compra de varias compañías. Paramount había manifestado su interés en adquirir la totalidad de la empresa, incluyendo las cadenas de cable como CNN, TNT y TBS, mientras que Comcast buscaba hacerse únicamente con los estudios y el negocio de streaming HBO Max. Según las fuentes citadas por The Wall Street Journal, las tres empresas presentaron ofertas mejoradas esta semana, pero fue Netflix quien avanzó con una propuesta mayoritariamente en efectivo.
De acuerdo con Bloomberg, la operación se enmarca en la estrategia de Warner Bros. Discovery de dividirse en dos entidades: una que agruparía los activos de estudios y streaming, y otra que concentraría las operaciones globales de cable, antes de cerrar el acuerdo con Netflix.
La integración de los activos de Warner Bros. Discovery en Netflix ha generado inquietudes entre legisladores y autoridades de Estados Unidos, quienes temen que la adquisición de HBO Max otorgue a Netflix un poder excesivo en el mercado del streaming, según reportó The Wall Street Journal. Analistas del sector han señalado que la fusión plantea dudas sobre la evolución del modelo de negocio de Netflix, ya que Warner Bros. Discovery suele estrenar sus películas en salas de cine mucho antes de llevarlas a plataformas digitales, mientras que Netflix produce principalmente para nutrir su propio servicio de suscripción.
Actualmente, el estudio de televisión de Warner Bros. vende sus programas a diversas cadenas y servicios de streaming, incluidos competidores tanto de HBO Max como de Netflix. Por su parte, Netflix ha mantenido históricamente sus producciones dentro de su propia plataforma, lo que podría cambiar si se concreta la adquisición.La exclusividad de las negociaciones representa un revés para las aspiraciones del director ejecutivo de Paramount, David Ellison, quien asumió el control de la compañía a principios de este año y buscaba fusionar dos marcas emblemáticas del entretenimiento.
Corporate Events,Arts / Culture / Entertainment,North America
ECONOMIA
De cara a la reforma, los expedientes por juicios laborales casi llegan a 640.000

Además de la reforma laboral que enviara el Gobierno durante las sesiones extraordinarias, la discusión sobre la legislación y sus impactos en la economía tomaron nuevo impulso en las últimas semanas con un caso particular. Cuando un juzgado dictó una indemnización de $250 millones en favor de un mozo con 26 años de antigüedad vinculado a un restaurante. El caso abrió el debate sobre la sustentabilidad del régimen de indemnizaciones y sus efectos sobre empresas y aseguradoras.
Pare el origen del conflicto reside en la forma en que la normativa laboral operó durante la emergencia sanitaria. La prohibición de despidos en el período de pandemia multiplicó el valor de las indemnizaciones en los juicios, al combinarse con el criterio judicial que consideró las propinas como parte del salario para el cálculo final. Ese enfoque arrojó, para el caso mencionado, un valor de $9,4 millones en 2020. A ese monto, el tribunal aplicó la actualización por Índice de Precios al Consumidor (IPC) más 3% anual, una fórmula definida por el entonces Gobierno de Alberto Fernández, que resultó en la cifra actual de $250 millones.
Este fallo reciente encendió alarmas en sectores empresariales y en el sistema de aseguradoras, al proyectar un posible efecto multiplicador sobre futuras sentencias. El fenómeno no resulta exclusivo de los despidos individuales. Operadores del sector destacaron que un proceso similar afecta a las Aseguradoras de Riesgos del Trabajo (ART), como lo evidencia la inhibición impuesta por la Superintendencia de Seguros de la Nación a una de las compañías de mayor peso en ese mercado. En esa oportunidad, el disparador fue la presión financiera de los juicios acumulados y sus actualizaciones, que absorbieron una porción significativa de los ingresos y complicaron la operatoria habitual de la aseguradora.
Un informe del Instituto para el Desarrollo Social Argentino (Idesa) con base en datos aportados por la Superintendencia de Riesgos del Trabajo, expuso que el universo de litigios laborales incluye un volumen extraordinario de expedientes. El stock de juicios por riesgos del trabajo alcanza los 308.082 casos actualmente en trámite. El segmento de despidos, la otra gran fuente de litigiosidad, suma 329.248 expedientes adicionales. Considerados de manera conjunta, el total de causas en curso por ambas vías judiciales trepa a 637.330 procesos pendientes de resolución.

La magnitud cobra otra dimensión al relacionar el stock de juicios con los asalariados registrados en el sector privado, que suman alrededor de 6,3 millones. La relación indica que los litigios pendientes representan cerca del 10% del empleo formal, proporción que inquieta a especialistas y destaca el peso del pasivo pendiente sobre las cuentas empresariales y el sistema judicial.
La legislación laboral vigente habilita mecanismos de actualización que, en el contexto inflacionario y con las reformas implementadas durante la emergencia sanitaria, transformaron el universo de pasivos judiciales en cifras de difícil cobertura. Las propias reglas utilizadas por la justicia en distintas jurisdicciones, incluyendo la capitalización de intereses y la indexación por inflación, generan montos “históricos” que comprometen la sostenibilidad de las empresas afectadas.
Desde la óptica de quienes siguen la evolución de estos expedientes, la dimensión del stock de juicios amenaza el funcionamiento normal del sector asegurador y de múltiples empresas de servicios y comercio. Al respecto, se señalan que los sistemas de actualización aprobados o sugeridos en las normas actuales convierten en una deuda impagable la suma de pasivos judiciales acumulados.
La preocupación oficial y privada coincide en que la única forma de controlar hacia adelante esta problemática consiste en eliminar o acotar los elementos que potencian la litigiosidad, aunque ese enfoque solo impactaría en los casos futuros. Resta resolver cómo enfrentar el pasivo ya generado con las reglas que tensionan financieramente a los distintos actores.
“El Código Civil y Comercial de la Nación, en su artículo 768, habilita al Banco Central a fijar una tasa de intereses moratorios de referencia para uso de los tribunales en la actualización de deudas. Extremar la prudencia en la definición de esta tasa de interés es la única manera de hacer viable el pago de los juicios acumulados”, destacaron en el informe de Idesa.
En respuesta a este escenario, el Banco Central abrió una consulta pública sobre la nueva Tasa de Intereses Moratorios (TIM). La propuesta contempla calcular la tasa como un promedio ponderado entre la tasa pasiva de depósitos y la tasa activa de préstamos, estableciendo un rango entre un piso y un techo definidos por CER más 3% anual. El planteo busca preservar el valor real de los créditos judiciales, evitando “arbitrariedades” y escaladas mayores o pérdidas severas en los montos finales. El esquema se considera razonable para el futuro, siempre y cuando se logren cambios en los factores que generan una litigiosidad incompatible con el desarrollo normal del mercado.
No obstante, ese modelo choca con el objetivo de aliviar el pasivo asociado a los millones de juicios que esperan sentencia. Analistas proponen para ese universo aplicar hasta el 31 de diciembre de 2025 la metodología de la Comunicación BCRA 14.290, que combina los rendimientos de caja de ahorro y plazos fijos, y luego, a partir de enero de 2026, empalmar ese índice con la fórmula incorporada por el Decreto 70/2023 (IPC + 3% anual).
La Comunicación BCRA 14.290 nació en 1991 para enfrentar los saldos judiciales surgidos de la hiperinflación de 1989 y 1990. Voceros apuntan que el mismo recurso resulta útil en el presente, al enfrentar las consecuencias de la inflación de los años recientes y la acumulación de litigios laborales. No disponer de un mecanismo de emergencia adecuado para estas circunstancias pondrá en riesgo la viabilidad de innumerables empresas e impactará sobre el empleo en el sector formal.
El debate permanece abierto sobre cuál será el índice de actualización definitivo que los tribunales aplicarán para los juicios actuales. Tanto las empresas como las cámaras empresariales y las aseguradoras de riesgos laborales aguardan definiciones normativas que aporten previsibilidad a los pagos y permitan dimensionar el tamaño real del pasivo. Mientras tanto, el stock de juicios laborales sigue creciendo y compite por el centro de la agenda en la definición de la próxima reforma laboral.
POLITICA1 día agoEl curioso sticker pegado en uno de los aviones F-16 y la explicación oficial: “En honor al Presidente”
CHIMENTOS3 días agoSabrina Rojas dijo lo peor de Pampita al aire por error y murió de vergüenza: “Está muy…”
POLITICA15 horas agoEl gobierno porteño cerró 40 “comedores fantasmas” y detectó un desvío de 5.000 raciones diarias por $20 millones


















