Connect with us

ECONOMIA

La City duda de que el Gobierno levante rápido el cepo y critica errores no forzados de Caputo

Published

on



«A veces da la impresión de que este gobierno cambió el déficit fiscal por la venta de dólares que no son del Banco Central, son de los ahorristas». La picante frase la soltó un cambista acostumbrado a batallar a diario en la city, que cuestiona el atraso cambiario.

Apunta a un secreto a voces que circula en la plaza financiera. Si las reservas netas son negativas en unos u$s 7.000 millones, de dónde saca el Banco Central resto para seguir interviniendo tan fuerte en la plaza.

Advertisement

El Gobierno contiene el dólar con reservas, mientras espera por el acuerdo con el FMI

La respuesta es obvia. Está utilizando la planta de los encajes que tienen los bancos por los depósitos en dólares, una costumbre poco recomendable para un esquema endeble como el que tiene el país.

El economista Carlos Melconian viene alertando sobre el escaso nivel de reservas y la política de mantener baja la brecha cambiaria a costa de intervenir en el mercado. «El régimen cambiario está en rojo, el Banco Central no puede continuar vendiendo dólares que no son de él», sostuvo.

En las últimas dos semanas, el BCRA vendió casi u$s1.500 millones para mantener a raya la cotización de los dólares financieros, que, aun así, subieron.

Advertisement

Es que, si bien el Gobierno destaca el logro de haber consolidado el equilibrio fiscal, la otra pata de la cuenta no cierra. Se siguen rifando divisas. En el caso del dólar blend, cada mes se pierden unos u$s1.200 millones que podrían robustecer las reservas.

A juicio de algunos referentes del mercado, el gobierno se enamoró de la baja de la inflación porque atrae votantes, pero a cambio descuidó el frente cambiario. Son los «errores no forzados» que se le empiezan a atribuir a Caputo, y cuya mención incomoda a un ministro de Economía que esperaba otro impacto del acuerdo con el FMI.

Advertisement

A esta altura de los acontecimientos, los u$s8.000 millones en dólares frescos que aportaría el organismo comenzaron a tener sabor a poco para los paladares exigentes del mundo del dinero.

Hay un convencimiento en la City de que con esa plata, que encima será destinada a saldar deuda del Tesoro con el Banco Central, no alcanzará para levantar el cepo cambiario a fin de año.

Los operadores consideran que el Gobierno no querrá correr el riesgo de que se produzca una corrida cambiaria de magnitud, y por eso baja la probabilidad de terminar totalmente con las restricciones cambiarias.

Advertisement

¿Qué falta para que Luis Caputo pueda levantar el cepo?

Importantes banqueros sostienen que para levantar el cepo lo que falta acomodar es el stock de dólares. Lo dicen Alejandro Butti, CEO del Banco Santander Argentina; y Fabián Kon, gerente general del Grupo Financiero Galicia. 

Para Kon, «lo más importante es ir viendo que todas las semanas parcialmente se va levantando el cepo. Semana de por medio tenemos alguna regulación que flexibiliza algunas cosas. No nos olvidemos que hace un año no se podían pagar ni siquiera las importaciones. Hoy el flujo ya está prácticamente acomodado. Lo que queda por acomodar es el stock y para poder acomodar eso hace falta un ingreso de dólares, que en teoría debería venir con el acuerdo con el Fondo Monetario».

Butti, por su parte, sostuvo que «el problema del cepo no es estructural de largo plazo. Porque a largo plazo Argentina es un país que puede generar no solo una balanza comercial positiva, sino un flujo de dólares, una balanza de pago positiva. Con lo cual es más un tema de stock que de flujos. Los flujos están asegurados, siempre manteniendo la conducta fiscal. El tema del cepo es de stocks. Va a haber que buscar soluciones a los stocks, como se hizo al principio del Gobierno con la deuda comercial de importaciones».

Advertisement

En tanto, el economista Gabriel Caamaño señaló que el acuerdo con el FMI es clave para «planificar la salida del cepo y definir el nuevo régimen monetario y cambiario». Sobre la promesa del Gobierno de levantar el cepo cambiario, el economista señaló que «hasta ahora se ha hablado de unificar el tipo de cambio con el paralelo convergiendo al oficial, sin una devaluación adicional». Sin embargo, consideró que la falta de detalles sobre el nuevo esquema monetario y cambiario genera incertidumbre en el mercado, lo que presiona a los dólares financieros y obliga al Banco Central a intervenir con intensidad.

Caamaño explicó que la economía necesita un aporte exógeno de liquidez, es decir, financiamiento externo, para evitar que la salida del cepo se retrase demasiado. «El propio Gobierno lo reconoce cuando dice que necesita fondos del FMI para recapitalizar el Banco Central», afirmó. Y detalló que, si no se consigue ese financiamiento, el proceso podría ser más costoso, requiriendo una corrección cambiaria mayor y un uso más agresivo de la tasa de interés, lo que podría afectar el ritmo de desinflación y la actividad económica.

El presidente Javier Milei promete salir del cepo cambiario para fin de año. Y varias veces expresó que no debe cometerse el error del pasado: no hacerlo bien y tener que volver a implantar los controles cambiarios ante una corrida que no se pueda manejar adecuadamente.

Advertisement

La sangría de reservas del primer trimestre refleja lo difícil que es consolidar el balance del Central. Solo en esta primera parte del año, el stock bajó a cerca de u$s 26.000 millones, tras haber arrancado el año arriba de los u$s 32.000 millones. 

Parece difícil que una liberación del tipo de cambio confluya a los valores del dólar oficial. La buena noticia es que hoy el mercado ve poco probable un salto mucho más allá de los niveles del dólar financiero, es decir, 1.300 pesos. Sin embargo, algunos creen que con un resultado electoral favorable y la salida del cepo, el tipo de cambio podría seguir apreciándose.

Falta saber, y eso es lo que puso nervioso a los inversores, qué pedirá el FMI a cambio. Esta vez no es un parche a un programa vigente, sino que es un Acuerdo de Facilidades Extendidas nuevo.

Advertisement

El mercado, a la espera de un nuevo esquema cambiario

La falta de definiciones sobre posibles nuevas reglas cambiarias es lo que más inquieta. Especialmente la evasiva de Luis Caputo al ser consultado sobre la continuidad del crawling peg del 1% para el tipo de cambio oficial. Al FMI claramente no le gusta que haya múltiples tipos de cambio y presionará para que todo desemboque en una unificación, posiblemente después de las elecciones.

Para los inversores también pasó a ser un tema crucial si finalmente se levantará o no el cepo y cuáles serán las nuevas reglas de juego.

El cepo vigente en este gobierno comprueba lo que ya todo el mundo sabe: con restricciones cambiarias, a la larga el Central se queda sin reservas. Y esto es un problema, incluso con un gobierno pro mercado y que hizo del superávit fiscal un culto.

Advertisement

El cepo y el futuro del régimen cambiario desvela a los inversores y es la pregunta que se repite una y otra vez en las reuniones con funcionarios del equipo económico y analistas locales.

La salida del cepo no es ya una opción, sino una obligación para el Gobierno. Se trata de la única manera de acelerar la baja del riesgo país y recuperar el acceso a los mercados crediticios. Seguir pagando los vencimientos de deuda en efectivo es factible en el corto plazo, pero se volverá mucho más complicado a partir del año próximo.

Por eso, todavía sigue sobrevolando el fantasma del default. Con reservas netas que siguen en terreno negativo y sin posibilidad de acceder a los mercados, la única opción posible es normalizar el esquema cambiario.

Advertisement

Sin embargo, el dilema de flotar o no flotar continúa sin resolverse. Y por ahora todo queda en el terreno de las especulaciones. La posibilidad de ir a un esquema de bandas cambiarias no parece el más adecuado, porque los inversores rápidamente buscan «testear» el techo, tal como lo pasó al gobierno de Macri con la «zona de no intervención» en 2019.

Ir a un esquema de flotación, si es que finalmente se va por ese camino, requerirá pasos intermedios. El más razonable es que gradualmente se vaya abandonando el «dólar blend», es decir, que los exportadores ya no puedan seguir liquidando un 20% a través del CCL para contener la cotización de los dólares financieros. También hay dudas sobre la continuidad del ajuste del oficial al 1% mensual.

Por eso, a pesar de que hace dos semanas el Ministerio de Economía filtró extraoficialmente que el aporte del FMI será suficiente para eliminar restricciones cambiarias en los próximos meses, las dudas crecen entre los operadores.

Advertisement

Y eso representa un dolor de cabeza para el Gobierno, especialmente en el año electoral.

iprofesional, diario, noticias, periodismo, argentina, buenos aires, economía, finanzas,
impuestos, legales, negocios, tecnología, comex, management, marketing, empleos, autos, vinos, life and style,
campus, real estate, newspaper, news, breaking, argentine, politics, economy, finance, taxation, legal, business,
technology, ads, media,dolar,fmi,reservas,cepo

Advertisement

ECONOMIA

«Busca evitar distorsiones»: la explicación del equipo de Caputo sobre la nueva restricción al dólar

Published

on


Federico Furiase, director del BCRA, publicó un mensaje en redes explicando los motivos de la decisión adoptada por la entidad este viernes

26/09/2025 – 16:01hs

Advertisement

La nueva restricción cambiaria anunciada por el Banco Central este viernes generó revuelo y malestar en el mercado, que interpretó que se vuelve a aplicar una norma del cepo que el mismo Gobierno había levantado.

La autoridad monetaria comunicó las personas que deseen comprar divisas en el mercado oficial de cambios (MLC) deberán firmar una declaración jurada comprometiéndose a no operar en el dólar MEP y el CCL por 90 días.

Esta «restricción cruzada» había sido levantada con la flexibilización del cepo de abril, pero hace apenas unos días volvió a reinstaurarse para directivos y gerentes de empresas.

Advertisement

La decisión generó críticas de parte de economistas y, por eso, Federico Furiase publicó un mensaje en X en el que explicó los motivos de la medida.

image placeholder

El mensaje en redes de Federico Furiase, director del BCRA

«La medida del BCRA no impide que las personas humanas compren dólares para ahorrar en el MLC. Pueden comprar los que su situación patrimonial les permita. Lo que no permite es que con esos dólares abastezcan el mercado de dólares financieros. La decisión busca evitar distorsiones en el mercado de cambios«, señaló el director del BCRA y mano derecha del ministro de Economía Luis Caputo.

Advertisement

Reacciones del mercado por el «nuevo cepo»

La medida generó críticas y cautela en la city financiera, donde la restricción cruzada es vista como un regreso parcial del cepo cambiario que se había flexibilizado en otros momentos. Desde CGR Consulting señalaron en redes sociales: «Se acabó el rulo» y advirtieron que «el mercado reaccionó ampliando la brecha entre dólar oficial y dólares financieros, volando el MEP».

Gustavo Neffa, director de Research for Traders, señaló: «La brecha cambiaria era cero antes de las elecciones de la provincia de Buenos Aires, subió a 5% después, y con el anuncio del paquete de asistencia del Tesoro de EE.UU. había quedado en 2%. Con esta medida ya no se podrá comprar dólares oficiales y hacer MEP durante 90 días».

Gabriel Caamaño, economista de Outlier, resumió el impacto: «Volvió la cruzada para todos. El cepo. Esto se pone cada vez más feo».

Advertisement

Por su parte, Christian Buteler, analista financiero, comentó: «Increíble, en vez de seguir desarmando el cepo, lo vuelven a armar. ¿La próxima medida será limitar a u$s200 por mes para personas físicas?».

Federico Machado, economista de Economía Open, agregó: «Al reincorporar la restricción cruzada, se limita el arbitraje entre oficial y MEP, con lo cual vuelve la brecha cambiaria y todos los principales efectos nocivos del cepo».

Por su parte, el economista Carlos Rodríguez, exasesor de Javier Milei, cargó duro contra el Gobierno: «Siguen con problemas para llegar tranquilos a las elecciones. Vuelve el cepo. Nos sale caro este Plan Llegar Libertario«.

Advertisement

Con esta decisión, el Gobierno refuerza un control que ya estaba vigente para empresas, pero que ahora alcanza a todos los actores del mercado cambiario, generando expectativas de mayor volatilidad y debate sobre su impacto en la economía y en la confianza del sector financiero.

Cómo funcionan los dólares financieros y el «rulo»

El dólar MEP permite comprar divisas a través de la bolsa: se adquieren bonos en pesos que cotizan también en dólares, para luego venderlos y obtener la divisa, evitando el mercado oficial. El contado con liquidación (CCL) funciona de manera similar, aunque la liquidación se realiza en el exterior, requiriendo una cuenta bancaria fuera del país.

El «rulo» consiste precisamente en aprovechar estas diferencias de precios: se compra la divisa donde resulta más barata y se vende donde cotiza más cara. En las últimas semanas, la fuerte volatilidad cambiaria hizo que la cotización oficial se separara de los precios financieros, reactivando este tipo de operaciones. Para el BCRA, el problema es que estas maniobras pueden generar una presión adicional sobre las reservas internacionales, especialmente en días de alta tensión cambiaria.

Advertisement



iprofesional, diario, noticias, periodismo, argentina, buenos aires, economía, finanzas,
impuestos, legales, negocios, tecnología, comex, management, marketing, empleos, autos, vinos, life and style,
campus, real estate, newspaper, news, breaking, argentine, politics, economy, finance, taxation, legal, business,
technology, ads, media,dolar,banco central,

Advertisement
Continue Reading

ECONOMIA

Qué significa la restricción al dólar que anunció el BCRA y cómo impacta en el mercado

Published

on


El Banco Central volvió a aplicar un cepo para evitar el «rulo » que puede hacerse entre la cotización del oficial y las de los financieros

El Banco Central restableció este viernes una restricción en el mercado de cambios que impone un plazo de 90 días en los que los compradores de dólar oficial no pueden operar con contado con liquidación o MEP y viceversa. Es para frenar maniobras de arbitraje ante la incipiente brecha cambiaria que se había formado entre los diversos mercados donde se transa la divisa.

Pasado el mediodía las cotizaciones bursátiles del dólar -implícitas en el precio de activos que son operados en simultáneo en la plaza local en pesos, y en dólares en el exterior- trepaban un 3% o casi 40 pesos, debido a que la medida que ya estuvo vigente durante el “cepo” restringe ahora buena parte del volumen de negocios en este segmento.

Advertisement

El dólar MEP mediante el Bonar 2030 (AL30) en contado inmediato era pactado a $1.415 (+2,9%), mientras que el “contado con liqui” alcanzaba los $1.410 (+3%). El MEP es ahora el dólar más caro de todos, con una brecha de 65 pesos o 4,8% respecto del dólar al público en el Banco Nación, que opera a 1.350 pesos.

El Banco Central está necesitado de acumular reservas para defender el tipo de cambio, que a lo largo de la semana se consiguió estabilizar por debajo del techo de las bandas, al tiempo que se necesitan dólares en las arcas oficiales para cumplir con los próximos vencimientos de deuda.

La entidad monetaria publicó este viernes la Comunicación “A” 8336 que modifica las normas cambiarias. Con esta restricción para impedir por 90 días operaciones cruzadas entre dólar ahorro y el MEP -que ya estuvo vigente durante los controles de cambio- el Banco Central pone una barrera para que los dólares de las reservas drenen para alimentar los negocios con los dólares financieros, pues esta operatoria hasta ahora se podía efectuar de manera irrestricta para ganar la brecha de precios entre un dólar minorista hoy casi 5% más barato que los bursátiles.

Advertisement

Los operadores del mercado la conocen como “restricción cruzada”, y lo que hace es impedir a las personas que compran dólares en el mercado oficial volcar esas divisas en las plazas financieras del dólar MEP y el dólar contado con liquidación durante 90 días.

La restricción se aplica también a la inversa: quienes compran MEP quedarán inhabilitados para recurrir al mercado cambiario oficial por tres meses. Este impedimento ya pesaba para personas jurídicas, empresas. Ahora se aplica también a las personas humanas.

El dólar MEP se disparó 3% y creció la brecha con la nueva restricción que impuso el Banco Central

Federico Furiase, uno de los directores del Banco Central, explicó que “la medida del BCRA no impide que las personas humanas compren dólares para ahorrar en el MLC. Pueden comprar los que su situación patrimonial les permita. Lo que no permite es que con esos dólares abastezcan el mercado de dólares financieros. La decisión busca evitar distorsiones en el mercado de cambios”.

Advertisement

El analista financiero Christian Buteler afirmó que “uno esperaba que el cepo se fuera sacando. Se puede esperar que no lo quieran hacer ahora por el estrés cambiario que estamos viviendo, pero de ahí a poner más cepo no se entiende. Con la crisis que se había desatado las últimas semanas -gran parte por las idas y vueltas del Gobierno con distintas regulaciones y demás, perdiendo total credibilidad- , que se había aprendido del error y que no se iba a volver a cometer un error similar. Y esto es cometerlo, volver atrás y volver a instaurar un poco más de cepo. Creo que lo único que genera es desconfianza, incertidumbre en el mercado y me parece que la reacción no va a ser buena”.

Buteler interpretó que desde el Gobierno “quieren evitar le saques dólares en el oficial para venderlos en los financieros, generando una mayor demanda en el oficial que pueda desestabilizar el mercado”.

Amílcar Collante, economista de Profit Consultores, estimó que “si vuelve la restricción cruzada es para evitar compras en el mercado oficial y que se vendan en MEP -armando el ‘rulo’ financiero-. Entiendo que permiten comprar en el oficial y MEP, pero no así comprar oficial y vender en MEP. Ya había brecha y esto se empiezo a potenciar en los últimos días. Está claro que en la transición hasta que se diseñe e instrumente la ayuda del Tesoro de los EEUU más el FMI, el Gobierno recalibre el programa y más aún por la previa electoral. Veremos medidas de corto plazo que permitan evitar más volatilidad o dificulten la acumulación de reservas por parte del Tesoro” argentino.

Advertisement

Ariel Sbdar, CEO de Cocos Capital resumió que “el Banco Central incorpora para todas las personas físicas una nueva norma que simplemente dice que si accedes a dar oficial -acá no hay cambios- después por 90 días no podés vender dólares MEP y ni contado con liquidación”.

“La reimplementación de parte del cepo cambiario llega en un contexto de creciente volatilidad en los mercados financieros, en la antesala de las elecciones de medio término, sobre las cuales los inversores se han mostrado crecientemente nerviosos en las últimas semanas”, informó Bloomberg.

Un informe de la gerencia de Estudios Económicos del Banco Provincia precisó que “en los últimos doce meses, la cuenta corriente acumuló un superávit de USD 1.600 millones, en tanto que la compra de dólar para ahorro sumó USD 12.600 millones. Así, arrojaron un neto de USD 11.000 millones entre ambos. En este marco, el Gobierno debería elegir entre un dólar más caro para 2026-2027 que permita ‘calzar’ el saldo de las exportaciones netas de bienes y servicios con la compra de dólares para atesoramiento, o la reimposición de algunos controles para la compra de divisas”.

Advertisement

“Si asumimos que va a ser difícil conseguir financiamiento para ambas cuentas, el gobierno podría enfrentar un dilema desagradable: un dólar más caro de manera permanente que impulse la cuenta corriente y modere la compra para ahorro o reinstalar algunas restricciones. Para dimensionar, entre mayo de 2018 y septiembre de 2019, el tipo de cambio promedió 1.500 pesos actuales, de modo que debería ser incluso mayor que en esa época para garantizar los flujos necesarios”, observó este análisis.

Advertisement
Continue Reading

ECONOMIA

Los dólares financieros suben $35 tras la medida del cepo que afecta a ahorristas

Published

on



El dólar minorista se vende este viernes 26 de septiembre con una caída de cinco pesos, en $1.350, en la pizarra del Banco Nación. En el segmento mayorista, la divisa se negocia con tendencia bajista, a $1.331. En el segmento informal, el dólar sube cinco pesos y se vende a $1.415.

Como contrapartida, los dólares financieros operan al alza: el contado con liquidación sube a $1.410 mientras que el MEP asciende a $1.415. Esta suba se dio tras el mediodía del viernes, cuando el Banco Central (BCRA) reinstauró la restricción que impone un plazo de 90 días durante el cual los compradores de dólar oficial no podrán operar con contado con liquidación o MEP y viceversa. ¿Qué implica esto? Que quienes operen con dólar MEP y contado con liqui también quedarán inhabilitados para recurrir al mercado cambiario oficial por el mismo período de 3 meses.

Advertisement

Esta medida se suma a la informada una semana atrás, a través de la cual el BCRA había endurecido el cepo al dólar para gerentes y accionistas de financieras y sus familiares, quienes también deberán esperar 90 días para comprar dólares financieros si operaron previamente en el mercado cambiario oficial.

La medida ya estaba vigente para empresas, pero ahora también para «personas humanas», es decir, para todos los ahorristas, lo cual en los hechos refleja un claro endurecimiento del cepo cambiario.

Con estas medidas se busca ponerle trabas a las operaciones con Dólar MEP y Contado con Liqui (CCL). El Dólar MEP es una forma de comprar dólares en la bolsa: se adquieren bonos en pesos que también cotizan en moneda extranjera y se obtiene la divisa sin recurrir al mercado oficial. Por su parte, el contado con liqui es un mecanismo similar, pero en este caso los bonos o acciones se liquidan en el exterior, o sea que es necesario tener cuenta bancaria fuera del país.

Advertisement

El escenario financiero argentino viene de atravesar una etapa de marcada complejidad, donde las decisiones políticas locales se entrelazan con señales externas que reconfiguran el panorama. La volatilidad cambiaria y la dinámica del riesgo país se ven condicionadas tanto por las acciones del Gobierno como por los movimientos del Tesoro de Estados Unidos, que ha comenzado a jugar un rol más activo en el sostén de la economía nacional. Las expectativas, en este marco, se transformaron en un insumo tan valioso como los propios dólares, ya que la percepción de los inversores sobre el rumbo económico tiene efectos inmediatos en los precios de los activos, en la estabilidad del tipo de cambio y en la confianza generalizada hacia el país.

En las últimas jornadas, las tensiones en el mercado cambiario pusieron a prueba la capacidad de las autoridades argentinas para contener la demanda de divisas. Los anuncios oficiales buscaron transmitir firmeza frente a la dolarización de carteras, pero el mercado exigió más que palabras: demandó señales concretas que no siempre resultaron sostenibles. Mientras tanto, el respaldo de Estados Unidos abrió una nueva etapa en la que la condicionalidad política y económica comienza a marcar los márgenes de maniobra de la Argentina.

El debate se centra en cómo gestionar las expectativas y en qué medida los actores locales pueden construir credibilidad suficiente para modificar conductas de mercado sin agotar recursos fiscales o reservas. Lo que quedó claro es que los inversores ya no se conforman con declaraciones: esperan consistencia y confianza en cada medida. Y es en ese terreno donde el poder de fuego de Washington y la experiencia de organismos internacionales marcan una diferencia sustancial respecto de la capacidad local.

Advertisement

El giro de Estados Unidos y sus implicancias cambiarias

El economista Pablo Moldován, director de la consultora C-P, señaló que el anuncio del Tesoro norteamericano sobre el fin de la exención impositiva a los productores que liquidan divisas implica un cambio de reglas significativo. A su entender, la medida tiene una doble lectura. Por un lado, evita una baja excesiva del tipo de cambio en medio de un ingreso extraordinario de dólares, situación que podría contradecir los compromisos asumidos con el Fondo Monetario Internacional. Por otro, refleja un interés comercial vinculado a la protección de los productores estadounidenses frente a la competencia argentina.

Para Moldován, esta decisión deja en evidencia que el apoyo externo no es incondicional, sino que está sujeto a condicionalidades concretas. En este caso, el objetivo es que la Argentina mantenga un tipo de cambio más competitivo, acumule reservas y no deteriore sus cuentas fiscales con beneficios que, en la práctica, resultan difíciles de sostener. El economista advirtió que, tanto por motivos macroeconómicos como por intereses geopolíticos, Estados Unidos empieza a condicionar de manera directa la política cambiaria local.

El especialista explicó en su cuenta de la red social X que esta etapa marca una limitación a la capacidad del país de diseñar incentivos autónomos a sectores exportadores. Ahora, cualquier medida que choque con los intereses de Washington o del FMI puede ser revisada. La Argentina, de este modo, enfrenta un esquema en el que su margen de maniobra es cada vez más estrecho y depende en gran medida de la voluntad externa.

Advertisement

Moldován subrayó que la condicionalidad no es nueva en la historia argentina, pero la novedad es que el Tesoro norteamericano ya no solo financia, sino que también interviene en la dinámica de expectativas de manera directa, configurando un escenario de mayor dependencia.

Expectativas, credibilidad y costo fiscal

A su turno, Christian Buteler, analista financiero, apuntó que el manejo de expectativas es una de las herramientas más poderosas de la política económica. Desde su visión, las declaraciones del ministro de Economía de que estaba dispuesto a vender hasta el último dólar buscaban alterar la conducta de los inversores. Sin embargo, la falta de credibilidad hizo que el mensaje no surtiera efecto y obligara al Banco Central a desprenderse de 678 millones de dólares para respaldar lo dicho.

Para Buteler, el problema radica en que sin confianza previa las palabras pierden valor. El mercado exige señales tangibles, y eso multiplica los costos fiscales cuando los anuncios no resultan creíbles. El especialista destacó que la baja de retenciones fue otro intento de inducir liquidaciones de divisas, aunque esta medida también significó un sacrificio importante de recursos.

Advertisement

El experto analizó -en su cuenta de la red social X- el accionar del Tesoro norteamericano, que con apenas dos posteos en redes sociales se logró modificar la dinámica de los bonos argentinos. La diferencia, según explicó, está en el poder de fuego y en la credibilidad: mientras Estados Unidos puede influir sin desembolsar fondos, Argentina se ve forzada a ejecutar medidas de alto costo para lograr un impacto similar.

Buteler señaló que el alivio actual en el mercado es evidente, con una baja significativa del riesgo país, pero subrayó que los problemas estructurales permanecen. En su visión, se trata de tiempo ganado para encarar reformas, y no de una solución definitiva a las debilidades de la economía real.

El efecto sobre el riesgo país y la deuda

Moldován indicó que el respaldo de Estados Unidos abre canales de impacto inéditos en el mercado financiero argentino. Según explicó, Washington no solo estaría dispuesto a otorgar préstamos, sino también a comprar bonos en el mercado secundario, estableciendo un piso para las cotizaciones y un techo para el riesgo país. Además, podría participar en licitaciones de deuda, resolviendo problemas de refinanciamiento de corto plazo.

Advertisement

El economista resaltó que esta diferencia es central respecto de los programas tradicionales del FMI, que se limitaron a brindar financiamiento precautorio sin incidir de manera directa en la dinámica del mercado. La eventual intervención estadounidense, incluso en forma de amenaza, ya se muestra más poderosa para reducir la percepción de riesgo que los acuerdos previos.

Moldován comparó este esquema con la estrategia aplicada por el Banco Central Europeo en la crisis de deuda de la periferia, donde la combinación de financiamiento e intervenciones directas resultó mucho más efectiva que los programas de asistencia multilaterales. A su entender, esa referencia es clave para entender la magnitud del cambio que enfrenta la Argentina.

De concretarse este esquema, el país podría acceder a una herramienta inédita en su historia reciente: la posibilidad de estabilizar su deuda a través de la acción directa de un socio estratégico con capacidad de influir sobre la curva de bonos. 

Advertisement

iprofesional, diario, noticias, periodismo, argentina, buenos aires, economía, finanzas,
impuestos, legales, negocios, tecnología, comex, management, marketing, empleos, autos, vinos, life and style,
campus, real estate, newspaper, news, breaking, argentine, politics, economy, finance, taxation, legal, business,
technology, ads, media,dólar,dólar blue

Advertisement
Continue Reading

Tendencias