Con múltiples frentes abiertos, tales como el conflicto con las universidades y la tensión generada por los recortes en el sistema público de salud, el gobierno de Javier Milei decidió pisar el acelerador para avanzar en el ajuste al empleo estatal y «mirar con lupa» las empresas que son factibles de privatizar.

«Hay muchas empresas que hoy están en manos del Estado y pueden llegar a privatizarse. Tiraron un número de 59, pero hay que ver. Hay diferentes procesos y etapas, pero vamos a mirar con lupa», subrayó a iProfesional una importante fuente oficial, quien pidió reservar su identidad por el hecho de que «es un tema muy sensible para el Gobierno y hay una caza de brujas».

Despidos y proceso de privatización de las empresas públicas del Gobierno

Desde los pasillos de Balcarce 50 afirmaron que «se puso en marcha la deep motosierra y no va a parar«, ya que la idea del Ejecutivo nacional es «depurar el empleo público, cueste lo que cueste«.

En ese sentido, reconocieron que «lentamente se dejarán de renovar contratos y se va a intimar a aquellos empleados que cumplen con la edad para iniciar su trámite jubilatorio».

Bajo la premisa de «privatizar todo lo que sea susceptible de ser privatizado», el Ejecutivo nacional diseñó una lista prioritaria de empresas a ser privatizadas en el corto plazo, entre las que incluyó Correo Argentino, AySA, ARSAT e Intercargo, además del caso ya conocido de Aerolíneas Argentinas.

«Hay que ver qué se decide en cada caso, porque no todos son iguales. Hay compañías que se pueden dar a concesión, privatizar y otras que se deberán cerrar porque al sector privado no le va a interesar invertir ahí«, reconocieron a este portal fuentes de la Casa Rosada.

Si bien hay diversidad de opiniones respecto de la posibilidad de que la ola privatizadora se transforme en una realidad, las distintas fuentes coinciden en la necesidad de que se concrete «la tarea encomendada por el Presidente», ya que sería una manera de «terminar con la caja y curros de la política«.

«Hubo muchas empresas que solo sirvieron como refugio de militantes. Eso no debería haber pasado, pero sobre todo no puede seguir pasando. Cuando el Presidente dice que ‘no hay plata’ es totalmente real. Por eso, nuestra tarea es cuidar el aporte que hacen los argentinos con sus impuestos«, argumentó una fuente que transita los pasillos de la Casa de Gobierno.

En ese marco, fuentes oficiales reconocieron que el Ejecutivo nacional buscará avanzar con la privatización de los trenes de pasajeros, pero hasta el momento «no existieron reuniones ni hay nada concreto». Lo cierto es que se trata de una tarea que debe realizar el titular de la Agencia de Transformación de Empresas Públicas, Diego Chaher, quien responde al Ministerio de Economía de la Nación.

«La idea de privatizar los trenes de pasajeros está, pero no se avanzó con ninguna empresa en concreto. Hay algunas ideas pensadas, pero aún no están planteadas en el cómo. En las próximas horas van a comenzar las reuniones para coordinar el proceso», reconocieron a iProfesional fuentes oficiales.

El abogado mendocino que puso Javier Milei al frente de las privatizaciones

Lo que había sido una promesa de campaña del libertario comienza a tomar forma de la mano del abogado mendocino Diego Chaher, quien forma parte del círculo de confianza del asesor presidencial Santiago Caputo. «Fue designado para concretar las privatizaciones porque no cree en un Estado empresario. Viene del mismo molde que Milei», apuntó en diálogo con este portal una fuente que conoce la dinámica diaria del funcionario.

A las horas de que el Ejecutivo nacional anunció la privatización de la empresa de trenes Belgrano Cargas, Chaher rompió el silencio para definir a las empresas estatales como «hijas bobas del Estado» que no tienen «visión» ni «propósitos» sino que son «un cúmulo de gente que quedan como capas geológicas».

En declaraciones periodísticas, el abogado mendocino buscó diferenciar la ola de privatizaciones que impulsa la Casa Rosada de las que concretó el gobierno de Carlos Menem. «Por fórmulas, contextos y necesidades actuales, que tal vez no son las mismas que las que vivíamos en los 90. Ha pasado mucha agua bajo el puente«, opinó.

«El caso de Belgrano Cargas es uno de los que se promueve desde el sistema ferroviario, que ya está maduro en cuanto al análisis de cuál es el modelo, en contraste con los que ya pudimos avanzar rápidamente en el Congreso. Hoy, como anuncio oficial, se impulsa porque el modelo ya está homologado. La parte administrativa llevará tiempo y hay que inventariar y tasar», explicó el funcionario sobre el anuncio del Gobierno.

Sin embargo, el que salió a abrir el paraguas fue nada más ni nada menos que el ministro de Desregulación y Transformación del Estado, Federico Sturzenegger, quien consideró que «llevará años» privatizar la empresa de trenes Belgrano Cargas.

A través de sus redes sociales y con la intención de bajar las expectativas que generó el anuncio realizado este miércoles por el portavoz Manuel Adorni, Sturzenegger precisó: «El camino es largo (llevará años), pero hasta el camino más largo algún día empieza. El presidente Javier Milei nos ha puesto a rodar«.

«Hay que ser cautos, porque a veces se anuncian cosas que todavía no están cerradas. No se puede comunicar deseos», planteó a este portal una de las voces oficialistas con mayor capacidad de autocrítica.