Cuando el tiempo lo permita, si es que lo permite. El operativo de búsqueda y rescate de los sobrevivientes del naufragio del Argos Georgia frente a las islas Malvinas se suspendió por las malas condiciones climáticas y no se sabe si el jueves la tormenta amainará para retomar las labores. La incertidumbre se mantiene sobre las cuatro personas que siguen desaparecidas: en el mejor de los casos, llevan ya más de 48 horas a la deriva en el mar frío. Mientras tanto, las autoridades de las islas deslizaron cuál es la hipótesis fuerte sobre lo que le pasó al busque pesquero que se hundió 200 millas marítimas al este de las Islas Malvinas.

Las autoridades británicas de las Islas Malvinas se expidieron este miércoles respecto del operativo de búsqueda de la tripulación del FV Argos Georgia, el buque pesquero con bandera de Santa Elena que sufrió una entrada de agua que finalmente lo hundió. Olas de hasta ocho metros de alto y vientos de hasta 70 kilómetros por hora condujeron a la autoridad marítima del archipiélago a suspender el operativo de búsqueda.

De las 27 personas que viajaban a bordo, aún siguen desaparecidas cuatro. Este miércoles a la tarde, en tanto, llegaron a Stanley (Puerto Argentino) 13 de los 14 sobrevivientes, al cabo de una jornada en la que el número de muertos subió a 9.

La explicación de las autoridades isleñas para la suspensión del rescate fue rotunda: se consideraron «todas las circunstancias, incluidas las condiciones climáticas pronosticadas y la seguridad de quienes participan en las operaciones». La autoridad marítima del archipiélago prometió retomar las labores, aunque no pusieron plazos: «Se realizarán nuevos esfuerzos de recuperación para encontrar a quienes aún están en el mar tan pronto como sea posible«.

Cuando la autoridad marítima de las Malvinas se refiere a «circunstancias» quiere decir, además, que las condiciones climáticas y el tiempo ya transcurrido no ayudan ni esperanzan a encontrar con vida a los cuatro tripulantes que aún siguen desaparecidos: dos son españoles, de Galicia, uno ruso y del cuarto aún no se conoce identidad ni nacionalidad.

Durante la mañana del miércoles en Galicia se decretaron asuetos por duelo en algunas comunas y ayuntamientos, e izaron banderas a media asta. Por la tarde en las Islas Malvinas arribaron trece de los catorce supervivientes a bordo del buque patrullero Lilibet. Sobre el final del día, eran atendidos en el Hospital Rey Eduardo VII Memorial por lesiones leves.

Dos busques más, los pesqueros Robin M. Lee (español) y Puerto Toro (chileno), llegarán el jueves a las Malvinas luego de participar en la búsqueda: el buque español desembarcará con el sobreviviente restante y uno de los nueve cuerpos encontrados, mientras que el chileno lo hará con los restantes ocho cadáveres encontrados.

Desde Madrid precisaron que los dos españoles que se encuentran desaparecidos luego del hundimiento del Atlas Georgia son Antonio Barreiro Torea y Juan Antonio García Rey, ambos gallegos. Por su parte, la vocera del Ministerio de Relaciones Exteriores de Rusia, María Zajárova, se pronunció de manera oficial: de los ocho rusos que viajaban a bordo de la nave, cuatro sobrevivieron, tres murieron y uno continúa desaparecido (de ninguno de ellos trascendió la identidad).

De momento, culminado el operativo de búsqueda, la atención se dirigió hacia las posibles causas de la entrada de agua que resultó fatal para el buque pesquero, que se hundió cuando estaba a casi 400 kilómetros de las Islas Malvinas. Clarín informó el martes sobre tres hipótesis que podrían haber desencadenado la filtración. La primera de ellas es la que más fuerzas cobró para los investigadores durante las últimas horas: una colisión con un cuerpo extraño.

En las últimas horas, se conjeturó sobre un posible choque del Argos Georgia con un contenedor que podría haber haber quedado a la deriva por esas aguas, así lo comentó este miércoles el portavoz de la autoridad marítima de Malvinas a Radio España. Fue la primera versión que se sopesó, y también la primera que se descartó: no hubo reportes de otros buques sobre la presencia de un contenedor en la zona.

La otra hipótesis fue la que cobró mayor fuerza: el impacto con un bloque de hielo semisumergido, que comúnmente derivan por esa zona del Atlántico en esta época invernal. Se espera que en los próximos días surjan de la investigación la confirmación oficial y los detalles del incidente .

«No es una buena situación. Está sucediendo al otro lado del mundo, por eso nos sentimos un poco impotentes», dijo este miércoles Stig Ervik, uno de los directores de la armadora del buque, Ervik Havfiske. «Un barco es solo un caso: lo más importante son las vidas humanas», expresó a la radio estatal noruega, según recoge el diario español Faro de Vigo. Cuando fue consultado sobre las posibles causas del desperfecto, prefirió no responder.

Quienes sí podrán aportar información clave son los 14 sobrevivientes. Lo que tengan para decir va a ayudar a esclarecer qué es lo que sucedió para que se formara la «entrada de agua» que hundió el buque, en principio atribuida a «las inclemencias meteorológicas», de acuerdo al reporte de la Armada argentina. Entre los rescatados están el capitán, el primer oficial y el jefe de máquinas, principales autoridades del barco.

El Ministerio de Asuntos Exteriores de España anunció este miércoles que mandará una delegación diplomática a las Malvinas para supervisar la recuperación de los seis españoles sobrevivientes y su posterior repatriación, así como la de los fallecidos.