El Día Internacional del Braille se conmemora cada 4 de enero, en honor al natalicio de su creador, Louis Braille. Esta herramienta se convirtió en un medio de comunicación para las personas ciegas y con deficiencia visual. De esta manera, esta jornada celebra este invento que ayudó a garantizar los derechos de todos los individuos por igual.

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Esta fecha fue declarada en el año 2018 por la Organización de las Naciones Unidas, bajo la Resolución A/RES/73/161. Su principal objetivo es concientizar sobre la importancia de incluir el braille en el ámbito social, académico, laboral, entre otros espacios. La Organización Panamericana de la Salud (PAHO) estima que al menos 1300 millones de personas viven con algún tipo de deficiencia visual y 36 millones son ciegas.

¿Por qué se celebra hoy?

Este día fue establecido en honor al nacimiento de Louis Braille, el 4 de enero de 1809 en Francia, quien fue el inventor de este método de escritura y lectura táctil. Cuándo era pequeño, sufrió un grave accidente que le provocó ceguera.

De esa manera, con tan solo 20 años se inspiró en un sistema inventado por el militar Charles Barbier de la Serre, para poder comunicarse mejor. Es así que decidió crear una matriz de ocho puntos que determinan cada letra. Luego modificó el patrón con un esquema de seis referencias, para simplificar su uso.

Con el fin de difundir su invención, creó el libro Método para escribir palabras, música y canciones sencillas mediante puntos, para uso de ciegos y especialmente diseñado para ellos. Junto a su amigo, Pierre Foucault, quien también había perdido la visión a temprana edad, fabricaron una máquina para facilitar el método de impresión de esta obra.

¿Cómo se lee el braille?

Para interpretar este sistema de comunicación es importante conocer su funcionamiento. Se trata de un sistema alfabético en relieve, que representa letras, números, signos de puntuación, símbolos matemáticos, música y grafía científica. De esta manera, es posible leer el braille a través del tacto, con el uso de las yemas de los dedos. Para leerlo, es necesario desplazar los dedos de izquierda a derecha, trazando cada uno de los patrones de puntos y reconociendo su significado.

Se compone de una matriz de seis puntos que se encuentran distribuidos en dos columnas verticales con tres de cada lado. Estos se distribuyen en celdas y cada una de estas puede contener hasta 63 combinaciones distintas. Este es el punto clave para distinguir cada letra o símbolo y así poder interpretar el texto. Es posible que algunos puntos se encuentren ausentes, ya que esto es lo que crea las múltiples codificaciones posibles que significarán algo en particular.

Asimismo, existen contracciones que representan una palabra o combinaciones de letras, las cuales simplifican la lectura, ahorrando tiempo y espacio. Si bien puede parecer complejo, leer el braille es una habilidad que puede adoptarse a través de una práctica sencilla y constante. Quienes dominen esta aptitud, suelen mover sus manos rápidamente por las matrices de puntos, comprendiendo de manera inmediata de qué se trata.

En el Día Mundial del Braille, se invita a todas las personas en el mundo a acercarse a esta herramienta de comunicación, que a que más personas accedan a sus derechos.

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