“Llegamos al final del año agotados, como si hubiéramos corrido una maratón emocional. Pero el agotamiento no es exclusivo de esta etapa; se acumula por cómo gestionamos nuestras emociones y actividades durante todo el año”, explicó la psicóloga Analía Tarasiewicz.

La psicóloga enfatizó la importancia de detenerse a reflexionar sobre el estado integral del individuo: “Es esencial revisar cómo está nuestro cuerpo, nuestra mente y nuestras relaciones. Cada aspecto de nuestra vida requiere cuidado y atención específica. Es como ordenar las piezas del rompecabezas que conforman nuestro yo central”.

El impacto del estrés en el cuerpo y la mente

Tarasiewicz advirtió sobre los efectos físicos y emocionales que surgen al ignorar los síntomas de estrés y ansiedad. “El cuerpo siempre pasa factura. Desde un simple malestar hasta enfermedades crónicas, el agotamiento puede manifestarse de diversas formas. Reconocer estas señales y abordarlas a tiempo es clave para evitar mayores complicaciones”, señaló.

Estrategias para afrontar el estrés y la ansiedad

Entre las recomendaciones que compartió, destacó la necesidad de prepararse de antemano para los picos de estrés: “Es importante planificar cómo vamos a enfrentar estos momentos. Desde decidir qué actividades priorizar hasta cuidar nuestros hábitos básicos, como el sueño y la alimentación. A veces, con pequeños pasos podemos sentirnos mejor”.

Sin embargo, aclaró que las soluciones no siempre son simples ni aplicables a todos por igual. “No es lo mismo alguien que tiene una leve ansiedad que alguien con problemas más profundos. En esos casos, buscar ayuda profesional es fundamental. Las respuestas mágicas no existen, y cada caso es único”, afirmó.

Para Tarasiewicz, el fin de año puede ser una oportunidad para la introspección y el autocuidado. “En lugar de dejarnos llevar por la vorágine de actividades, deberíamos tomarnos un momento para preguntarnos: ¿cómo llegué hasta aquí y qué necesito para sentirme mejor?”. (www.REALPOLITIK.com.ar) 

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