El dirigente piquetero Juan Grabois, junto a referentes sociales de todo el mundo, participarán de un encuentro con el papa Francisco en Roma, para celebrar los 10 años del primer Encuentro Mundial de Movimientos Populares, una iniciativa lanzada por el pontífice argentino casi al comienzo de su papado.

El simposio tendrá lugar el viernes 20 de septiembre y durará cerca de tres horas. Grabois fue invitado por ser uno de los miembros del Dicasterio para el Servicio del Desarrollo Humano Integral, uno de los organismos vaticanos encargados de la organización.

Los encuentros de Francisco con los movimientos populares ya tuvieron lugar en Bolivia en 2015 y en Roma (2016). Durante la pandemia se realizaron de manera virtual y Grabois estuvo presente en la organización.

Según consignó La Nación, el piquetero fue invitado junto con la dirigente social Xaro Castelló, del Movimiento Mundial de Trabajadores Cristianos, y el economista brasileño Joao Pedro Stedile, otros miembros grupo fundador de la iniciativa.

“Este aniversario es una buena ocasión para reflexionar sobre el recorrido que hemos hecho en este tiempo con compañeros y compañeras de todo el mundo, plantando la bandera de la paz en nuestra Casa Común”, sostiene la invitación al encuentro que reunirá dirigentes sociales de todo el mundo, entre aquellos que se acerquen a Roma o los que se conecten de manera virtual.

Grabois había participado de ese encuentro inaugural de 2014, en los albores del papado de Francisco en Roma. En aquella ocasión había planteado que “todo trabajador, esté o no esté en el sistema formal del trabajo asalariado, tiene derecho a una remuneración digna, a la seguridad social y a una cobertura jubilatoria”.

Francisco participará del encuentro días después de llegar de una mega gira por Asia Pacífico, donde planea recorrer más de 32 mil kilómetros. La misma incluye Indonesia, Papúa Nueva Guinea, Timor Oriental y Singapur.

El viaje se realiza a partir de la convicción del papa respecto a reforzar la presencia en Asia para el futuro de la Iglesia y su insistencia en “ir a los márgenes”, a la periferia del catolicismo. En aquel lugar volvió a repetir su prédica respecto al cambio climático.

El periplo dura diez días y estará de regreso el viernes 13. Si todo va bien, en el horizonte estará su viaje apostólico a la Argentina y Uruguay, que Jorge Bergoglio desea porque en sus 11 años de pontificado nunca volvió a su país natal.