POLITICA
“¡Quieto o te quemo!”: otro violento ataque de la banda piraña que es el terror de los automovilistas en la Panamericana
Lunes a la noche. Fernando Rossi Sanz, un consultor en sistemas de 48 años, y su esposa, Indiana, regresaban a su casa de Boedo desde Santa Fe, después de haber visitado a unos familiares. Un viaje que el matrimonio hace con frecuencia, pero que esta vez terminó de la peor manera. Una pesadilla. A la altura del kilómetro 80 de la ruta 9, entre Zárate y Campana, cuando circulaba por el carril rápido, el automovilista no pudo esquivar un bloque de hormigón, y el impacto hizo que reventara el neumático delantero derecho. Como pudo, logró llegar a la banquina y detenerse. La pareja pensó que estaba a salvo. Pero lo peor no había sucedido, todavía. Cuando estaban por cambiar la rueda, fueron atacados por una banda de ladrones, tipo pirañas. “¡Quieto o te quemo!” y “¡Si me miras te quemo!”, le gritó a Rossi Sanz uno de los delincuentes. Después lo apuñaló en la pierna izquierda. En menos de 20 segundos, los asaltantes se llevaron todo lo que pudieron del Fiat 500X de las víctimas, hasta el manual de mecánica del auto. Luego escaparon.
El violento ataque, según la denuncia hecha en una comisaría de Campana, ocurrió a las 22.15 del lunes 2 de este mes. No se trata de un hecho aislado. LA NACION había dado cuenta de un robo de similares características el 31 de agosto pasado, donde un matrimonio también fue víctima de la “banda del Hormigón”, ladrones que colocan una viga de cemento en el carril rápido de la Panamericana para que los automovilistas estén obligados a detenerse después de sufrir la rotura de los neumáticos u otro desperfecto en el vehículo y así tener el camino libre para robarle. Anteanoche, según informaron fuentes judiciales, los delincuentes volvieron a actuar.
“Primero pensé que era un pedazo de cartón. Cuando me di cuenta de que era un bloque de hormigón, traté de esquivarlo, pero no pude y el impacto reventó el neumático delantero derecho. Pude maniobrar y volver a la cinta asfáltica y después ir hasta la banquina del lado derecho”, recordó a LA NACION Rossi Sanz.
Tras detener la marcha del automóvil, el matrimonio bajó del auto para ver cómo había quedo. La cubierta delantera derecha estaba destrozada.
“No se veía nada. La zona era una boca de lobos. Pero nos dispusimos a cambiar el neumático. Cuando estaba buscando la rueda de auxilio, escucho que mi esposa me dijo ´cuidado, cuidado´. En ese instante, me agarraron por atrás y me sacaron del auto”, dijo el consultor de sistemas.
No lo sabe con exactitud, pero cree que los delincuentes eran cuatro. La violencia fue en aumento. “Me clavaron un cuchillo en la pierna izquierda, a la altura del muslo, y me tiraron al piso. Me gritaron ‘¡quieto o te quemo!’ y ´si me miras te quemo´”, recordó la víctima del ataque en la ruta 9.
A Indiana, la esposa de Rossi Sanz también la amenazaron con un elemento punzocortante. En menos de 20 segundos, los ladrones se apoderaron de todo lo que pudieron: una notebook marca HP, un iPhone modelo 11 Pro Max, documentos, tarjetas de créditos y hasta el manual de mecánica del Fiat 500X de las víctimas. Una vez con el botín, los ladrones escaparon entre la oscuridad de la noche.
El matrimonio, cuando los delincuentes ya se habían ido, intentaron pedir ayuda. Pero nadie frenaba. Nadie de se detenía. Entonces, la pareja entró en el auto y trabó las puertas. La pierna izquierda del consultor sangraba.
Pocos minutos después, llegó la ayuda que necesitaban las víctimas. Un automóvil con las balizas encendidas detuvo la marcha. “El conductor del vehículo me dijo que había visto el robo. Como era cirujano me hizo las primeras curaciones y me aconsejó que fuera a un lugar para atenderme”, explicó Rossi Sanz.
Al revisar el auto, el matrimonio descubrió que los ladrones no habían robado el teléfono celular del consultor, simplemente porque no lo habían encontrado. Desde el móvil llamaron al número de emergencias 911 para denunciar lo que había sucedido.
Poco después llegó personal policial, que se encargó de colocar la rueda de auxilio en lugar del neumático reventado. El matrimonio fue a una comisaría de Campana para hacer la denuncia.
En la presentación en la seccional policial, Indiana, la esposa de Rossi Sanz, dijo que los ladrones eran delgados y estaban vestidos con camperas tipo inflables, pero que no los pudo ver con claridad porque los tiraron al suelo boca. “Llevaban elementos cortantes, creo que eran cuchillos, pero no los pude ver con claridad por la oscuridad que había y la rapidez con la que ocurrió todo”, sostuvo la mujer, una contadora de 50 años.
Tras hacer la denuncia, el consultor, fue hasta un sanatorio situado en Campana, donde terminaron de hacerle las curaciones que había comenzado el cirujano que lo socorrió en la ruta 9.
El ataque a Rossi Sanz y a su esposa es investigado por el fiscal de Campana Matías Ferreiros, con la colaboración de detectives de la policía bonaerense.
“No quiero que esto quede impune. Algo hay que hacer. Uno paga peajes y la empresa que tiene la concesión de la autopista no te da seguridad”, afirmó el consultor en sistemas, todavía indignado por el violento robo del que fue víctima hace casi un mes.
POLITICA
Señor 8: la sorpresa libertaria y la decisión ir a fondo contra los Macri
-
POLITICA3 días ago
Patricia Bullrich le respondió a Victoria Villarruel tras las críticas por el gendarme detenido en Venezuela
-
POLITICA2 días ago
El descargo de Longobardi tras su salida de Radio Rivadavia: «Me hizo acordar cuando Cristina ejecutó mi despido en Radio 10»
-
POLITICA3 días ago
La Corte Suprema declaró inconstitucional la reelección indefinida en Formosa
-
INTERNACIONAL2 días ago
Atropello múltiple en un mercado de Navidad en Alemania: al menos dos muertos y más de 60 heridos
-
POLITICA2 días ago
Guillermo Castello: «Kicillof está utilizando la caja de la provincia para posicionarse políticamente»
-
POLITICA12 horas ago
Nisman: el Gobierno acepta el pedido del fiscal y levanta el secreto sobre los espías inorgánicos de la SIDE y el Ejército