POLITICA
Victoria Villarruel busca consenso para congelar los sueldos en el Senado, pero falta el apoyo del kirchnerismo
El Senado enfrenta una controversia por el inminente aumento de las dietas de los legisladores a más de 9 millones de pesos brutos. Este incremento ocurriría automáticamente en enero si no se prorroga la resolución de congelamiento aprobada en agosto. Victoria Villarruel, presidenta de la Cámara, exigió consenso de todas las bancadas para firmar una nueva resolución administrativa que frene el aumento, pero hasta ahora los bloques no lograron acordar.
El origen del problema radica en que la resolución vigente, que fijaba las dietas en 2.500 módulos más adicionales por gastos de representación y desarraigo, pierde vigencia el 31 de diciembre. Al no renovarse, las dietas comenzarían a calcularse con los valores actualizados por las paritarias de 2024, lo que generaría un incremento significativo. Aunque las autoridades del Senado aseguran que tienen tiempo hasta mediados de enero para resolver el asunto, la falta de consenso amenaza con desatar una crisis política.
Sin consenso en el Congreso, el Gobierno prorrogó nuevamente el Presupuesto 2023 para 2025
Luis Juez, jefe del bloque del PRO, tomó la iniciativa el viernes enviando una carta a Villarruel en la que solicitó extender el congelamiento de las dietas hasta marzo de 2025. “Nuestro país requiere de quienes hemos sido honrados con la representación de nuestros compatriotas una actitud responsable y ejemplar”, escribió Juez. Los bloques de la UCR y La Libertad Avanza se sumaron al pedido, aunque sin fijar plazos específicos. Sin embargo, el Frente de Todos y Unión Ciudadana no enviaron ninguna comunicación oficial al respecto.
Villarruel advirtió sobre la necesidad de consenso total para evitar problemas de legitimidad. Según señaló, no puede decretar la prórroga unilateralmente, ya que debería votarse en una sesión. Sin embargo, los senadores se resistieron a sesionar, temiendo que el kirchnerismo pueda utilizar la ocasión para bloquear otros temas, como el DNU de la deuda de Javier Milei. Esto deja a la vicepresidenta en una posición delicada, presionada tanto por la oposición como por miembros del oficialismo.
La situación evidencia tensiones entre el Ejecutivo y el Senado, con acusaciones cruzadas y reclamos de responsabilidad. Patricia Bullrich, ministra de Seguridad, criticó públicamente a Villarruel: “La ciudadanía está haciendo un esfuerzo heroico para superar la crisis heredada y no merece financiar dietas de 9,5 millones para ningún legislador”. Mientras tanto, la falta de acción podría derivar en un aumento automático de los sueldos.
POLITICA
El extraño motivo por el cual para Liam Hemsworth fue incómodo besar a Jennifer Lawrence
Hay besos de ficción que marcaron para siempre la historia del cine. Si alguien hace una lista de sus favoritos, probablemente incluya el de Noah [Ryan Gosling] y Allie [Rachel McAdams] en Diario de una pasión (The Notebook), el de Rick [Humphrey Bogart] e Ilsa [Ingrid Bergman] en Casablanca, el de Ennis [Heath Ledger] y Jack [Jake Gyllenhaal] en Secreto en la montaña (Brokeback Mountain) y también el de Peter Parker [Tobey Maguire] y Mary Jane [Kirsten Dunst] en El hombre araña (Spider-Man). Y como olvidarse el de Golfo y Reina en La dama y el vagabundo (Lady and the tramp), ¿cierto? Sin embargo, aunque la escena romántica entre los protagonistas de la historia se haya vuelto icónica, eso no significa que, a la hora de grabarla, sus actores hayan estado muy felices. Justamente hace un par de años, Liam Hemsworth admitió que besar a Jennifer Lawrence en Los juegos del hambre fue una de sus experiencias más incómodas y repugnantes.
Corría marzo de 2012 cuando se estrenó en la pantalla grande Los juegos del hambre (The Hunger Games), basada en la novela homónima de Suzanne Collins. Además de la presentación de un futuro distópico en el que Katniss Everdeen [Jennifer Lawrence] tuvo que luchar por sobrevivir a los juegos mientras desafiaba al Capitolio, hubo un tema en particular que encantó a los fans: el triángulo amoroso que conformó con Gale Hawthorne [Liam Hemsworth] y Peeta Mellark [Josh Hutcherson]. El primero era su mejor amigo, su mayor aliado y el segundo su compañero de lucha y el que la admiraba en secreto.
Esta “dicotomía amorosa” se extendió a lo largo de las otras tres películas de la saga: Los juegos del hambre: en llamas (The Hunger Games: Catching Fire) que se estrenó en 2013, Los juegos del hambre: Sinsajo – Parte 1 (The Hunger Games: Mockingjay – Part 1) y Los juegos del hambre: Sinsajo – Parte 2 (The Hunger Games: Mockingjay – Part 2) que se estrenaron en 2014 y 2015 respectivamente. En esos años, los fanáticos eligieron un “bando”: algunos apostaban por el amor de Katniss y Peeta y otros anhelaban que la protagonista de la historia se quedara con su mejor amigo, Gale.
En una de las primeras escenas de la segunda película de la saga se dio el tan esperado beso entre Katness y Gale. Si bien fue el primero de varios y se convirtió en uno de los momentos más importantes de la historia, para Liam Hemsworth no fue precisamente su momento favorito de filmar. En 2014, el protagonista de Una aventura en Marruecos (Lonely Planet) estuvo en The Tonight Show (NBC) con Jimmy Fallon y, entre otras cosas, respondió a algunas preguntas que le dejaron los fans y una de ellas era cuál fue su escena más incómoda de filmar.
“Cada vez que tenía que besar a Jennifer [Lawrence] era bastante incómodo”, admitió el australiano y la cara de sorpresa del conductor no pasó inadvertida. Al advertir el desconcierto que se generó por su respuesta, Hemsworth explicó: “Cuando lo mirás desde afuera, parece una gran imagen. Ella es una de mis mejores amigas. La amo”.
Sin embargo, hubo un tema en particular que hizo que la experiencia no fuera del todo cómoda. “Cuando teníamos una escena de besos, ella se aseguraba de comer ajo o atún o cualquier otra cosa que fuera repugnante. Y justo antes de grabar la escena me decía ‘comí atún, comí ajo y no me lavé los dientes’”, comentó el actor hace una década. “‘Fantástico, no puedo esperar para testearlo’”, ironizó.
El comentario del actor de La última canción (The Last Song) fue difícil de olvidar. Tan es así que, nueve años después, cuando Jennifer Lawrence fue invitada al pódcast Hot Ones, le preguntaron por las declaraciones de su coprotagonista. Ella reconoció que efectivamente comió esos alimentos antes de grabar las escenas, pero explicó su punto de vista. “No fue intencional. Era solo lo que estaba comiendo y después nos besábamos. Él debería, simplemente, superarlo”, dijo la ganadora del Oscar en 2023.
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