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El Sol es la fuente vital del Zodíaco, y está transitando por Virgo desde el pasado 22 de agosto hasta su salida, el 22 de septiembre. En términos colectivos, esto implica que hay energía virginiana disponible para sintonizar porque, cuando este astro recorre un signo, su energía configura el clima astrológico del mes.

Para aprovechar esta temporada, es importante comprender qué significa Virgo en la secuencia del Zodíaco. En este despliegue, es el sexto signo, viene después de Leo—momento de consciencia de la identidad y de expresión personal—. Después del momento leonino, este signo de Tierra comprende que el individuo forma parte de un sistema que es más grande.

En la astrología, Virgo se asocia a la organización, la eficiencia, la limpieza y la salud. En ese sentido, esta temporada nos invita a honrar nuestros hábitos saludables, a discriminar qué sirve y qué ya no nos resulta útil. La energía acompaña para depurar y mejorar nuestros métodos, para que el manejo de nuestra energía sea más eficiente.

Más allá de “ser de Virgo” y tener o no en nuestra carta natal esta vibración, puede ser interesante conocer qué información trae para cada signo y ascendente esta propuesta del mes zodiacal y aprovecharla.

Para el Sol en Aries, esta temporada trae energía de organización mental y cotidiana. Es buen momento para reordenar hábitos.

Para el ascendente sucede algo parecido porque se activa la zona de la carta natal asociada a la rutina. Esto ayuda a evaluar si es necesario optimizar la gestión del tiempo y puede ser buen momento para volver a usar una agenda física.

Para el Sol en Tauro, esta temporada es afín por su cualidad de signo de Tierra, y activa una faceta perseverante y determinada para concretar objetivos. Es más, ayudará a calcular el manejo del tiempo más eficientemente.

Para el ascendente se ilumina la zona de la carta natal asociada a la identidad y esto puede ser interesante para detectar qué alimenta vitalmente el ánimo, como puede ser la actividad física y una buena nutrición.

Para el Sol en Géminis, la temporada de Virgo es muy afín por su energía mercurial y eso puede ayudar a sistematizar el método de trabajo sin dispersión.

Para el ascendente se ilumina la zona de la carta natal asociada al hogar. Es buen momento para avanzar con arreglos y/o tareas domésticas pendientes que favorecen un día a día más funcional.

Para el Sol en Cáncer, esta temporada pone el foco en la relación con los hermanos y la comunicación. Puede ser buen momento para tener una conversación con estrategia y negociación.

Para el ascendente sucede algo parecido, puesto que se ilumina la zona de la carta natal asociada a la comunicación. La energía acompaña para pensar cómo analizar lo que pasa con una perspectiva más objetiva, sin tomarse las cosas de forma tan personal.

Para el Sol en Leo, la temporada virginiana trae energía de austeridad, que funciona como un sabio principio de realidad para poner el foco en aquello que se valora y que resulta necesario para el día a día.

Para el ascendente, también es una oportunidad para optimizar los recursos con que se cuenta, y seleccionar con mejor criterio dónde se invierte la energía, además de qué se valora.

Para el Sol en Virgo, este período renueva su vitalidad, trae mucha energía disponible y, sobre todo, realza el talento innato de laboriosidad, capacidad de método y orden para potenciar el eficiente funcionamiento de las cosas. Eso sí: cuidado con la faceta hipercrítica.

Para el ascendente, es buen momento para hacer un detox físico, pero también emocional. Por ejemplo, puede recapitular y discriminar entre los temas que potencian su neurosis y aquello que hace bien.

Para el Sol en Libra, esta temporada trae energía de cierre al preparar el terreno en el plano inconsciente para el nuevo ciclo solar venidero. Es bueno saberlo porque, si bien la temporada de Virgo trae energía racional, para las personas con este signo solar toca trabajar el orden interno a partir de la introspección y la reflexión, sin buscar explicaciones ni lógicas de funcionamiento.

Para el ascendente sucede algo parecido, ya que se ilumina la zona de la carta natal asociada a los finales y esto exhibe la importancia de entregarse a un orden mayor, circular y misterioso que nos excede.

Para el Sol en Escorpio, esta época ayuda a digerir la gran información mental que recibimos día a día. De esa forma podrá descartar lo que no es útil, además de depurar y mejorar nuestros métodos de orden.

Para el ascendente, se ilumina la zona de la carta natal asociada a lo colectivo y los proyectos grupales. Puede ser una oportunidad para afianzar redes de trabajo y ver qué detalles ajustar para ayudar a su expansión.

Para el Sol en Sagitario, esta temporada trae mucho trabajo, y una sensación de exigencia que puede ser tanto interna como externa. Es bueno saber que energéticamente es un momento de balance y de evaluación y, en consecuencia, vale la pena concentrarse para cumplir con los objetivos pactados.

Para el ascendente se activa la zona de la carta natal asociada a la profesión y el trabajo con energía de resolución y concreción. Es una buena oportunidad para hacer balance y ver si el año está orientado y alineado con tus objetivos.

Para el Sol en Capricornio, la temporada de Virgo es afín por su cualidad de signo de Tierra, y eso trae una fluidez extra que incentiva el entusiasmo para avanzar a paso firme en proyectos expansivos.

Para el ascendente se ilumina la zona de la carta natal asociada al extranjero y puede ser buen momento para planificar a largo plazo un viaje, gestionar una alianza internacional que potencia un emprendimiento personal y/o laboral, e incluso empezar a pensar en un cambio en el lugar geográfico que se habita.

Para el Sol en Acuario es un momento óptimo para emprender una purificación energética y física. Virgo se asocia a la salud y la sanación, y para quienes tienen este signo solar puede ser una buena oportunidad para sintonizar con estos temas que suelen resultar tediosos y ajenos.

Para el ascendente, se ilumina la zona de la carta natal asociada a lo íntimo y puede ayudar a llevar consciencia para hacer orden interno en la introspección. También permitirá clarificar ideas y sensaciones para desenredar el espiral.

Para el Sol en Piscis, la temporada en Virgo pone el foco en temáticas de relaciones: pareja, alianzas y socios. Puede ser un buen momento para pensar cómo funciona la trama vincular. Es decir, evaluar qué importancia se le da al tiempo y espacio propio y cuánta atención se le da a la pareja.

Para el ascendente sucede algo parecido porque se activa la zona de la carta natal asociada a la pareja. Es un momento ideal para dimensionar cómo funciona el vínculo para intentar armar planes nuevos y encontrar una rutina amorosa y divertida.