A pesar de que muchas sartenes están cubiertas por teflón antiadherente, que ayuda a que los alimentos no se peguen, al ser uno de los utensilios más requeridos y utilizados a diario, llegan a rayarse o desgastarse con facilidad.

No obstante, esto no quiere decir que tus herramientas de cocina no puedan salvarse, ya que existen consejos para evitar que se rayen y dejen de servir. Estos son cuatro consejos para que no se rayen cuando las estás lavando.

1. Lavarlas cuando no estén calientes: no importa que tu utensilio sea el más caro, por lo regular cuando están calientes y los manipulás a la hora de lavarlos, pueden correr el riego de deformarse y que si se rayan, las marcas sean irreparables. Así que, espera a que estén completamente fríos.

2. No refregar cuando tengan grandes cantidades de suciedad o de comida pegada: cuando tenga gran cantidad de comida pegada, si fregás fuerte para retirar los residuos, esto empeora las cosas. Lo recomendable es crear alguna solución para que se despegue, por ejemplo, podés poner en agua caliente un poco de vinagre, dejarlo sobre el recipiente y esperar a que se remoje, cuando el agua se enfríe y con ayuda de una esponja será más fácil remover los restos de alimentos.

3. Conocé tu sartén: saber de que material está hecho ayuda a que puedas tomar las medidas permitentes y así saber cuál es la forma correcta de usarlo, pues no es lo mismo uno antiadherente que uno hecho de acero inoxidable.

4. Otros utensilios: por no querer quemarte, puede que optes por cualquier otra herramienta para freír, como las que están hechos de materiales como el metal, los cuales provocan que se rayen. Lo recomendable es usar aquellos que están hechos de materiales como de silicona o madera.

Fuente: Gastrolab