El mejor delineado para ojos pequeños es el delgado, que se caracteriza por trazar una línea fina a lo largo del párpado superior, lo más pegada posible a la línea de las pestañas.

La razón por la que es tan efectivo es que evita que el ojo se vea más chico, algo que puede suceder si se usa un delineado muy grueso. Además, da la ilusión de unas pestañas más densas y hace que la mirada se vea más abierta y definida.

Paso a paso:

1- Aplicá una base o primer específico para ojos para garantizar que el delineado se mantenga intacto durante todo el día.

2- Comenzá trazando una línea delgada desde el centro del párpado superior hacia el exterior, que esté lo más pegada posible a la línea de las pestañas.

3- Para un efecto más amplio, podés alargar ligeramente el delineado hacia el exterior en una pequeña “colita” o ala. Esto dará la ilusión de unos ojos más grandes y alargados.

4- Evitá delinear la línea de agua inferior, ya que puede hacer que los ojos se vean más pequeños. Si lo deseás, podés delinearla con un lápiz de color nude para un efecto de ojos más abiertos.

5- Rizá tus pestañas y aplicá una capa de máscara para realzar aún más la mirada.

Cuando se trata de elegir el color de delineador para ojos pequeños, el marrón es una excelente opción. Este tono es menos intenso que el negro, lo que suaviza la mirada sin perder definición. También ayuda a crear un efecto de mayor profundidad y amplitud, haciéndolos parecer más grandes y naturales. Es un color versátil que funciona para el día y para la noche, adaptándose a diferentes tonos de piel y estilos de maquillaje.

Fuente: Ser Zen