Para muchos, Juan Esteban Osaba, más conocido como «Juanes», es de esas personas que parece estar siempre en el lugar adecuado en el momento justo. Tras haber trabajado bajo la órbita de Axel Kicillof saltó a un llamativo cargo en el gobierno nacional de Javier Milei. Pero su flamante nombramiento no es fruto del mérito, sino de una vieja amistad con un cuadro del peronismo platense.

Su desembarco en el equipo de Milei tiene nombre propio: Matías De Urraza, un veterano de la política bonaerense que ha trabajado para Francisco de Narváez y luego para Sergio Massa, con quien llegó a convertirse en mano derecha del histórico dirigente peronista, Juan Amondarain. Con un currículum que abarca varios colores políticos, De Urraza se ha establecido como una figura clave dentro del armado libertario en la provincia de Buenos Aires.

El historial de Matías De Urraza.

Actualmente, De Urraza es asesor legislativo del bloque libertario en la Honorable Cámara de Diputados de la provincia de Buenos Aires y máximo responsable del armado de la octava sección electoral de La Libertad Avanza (LLA). Su conexión con Osaba se remonta a la infancia, en épocas en las que compartieron jardín de infantes, y ese lazo ha sido determinante para que el ex empleado del gobierno provincial haya podido posicionarse como coordinador de la populosa tercera sección electoral, por la que aspira a convertirse en legislador provincial sin tener ningún tipo de vínculo legal ni formal con dicho territorio.

El currículum de Osaba es, cuanto menos, curioso. En abril de 2016, durante la intendencia de Julio Garro, fue designado al frente del Ente de Turismo La Plata – EMATUR, donde permaneció hasta abril de 2019, cuando fue desvinculado en circunstancias que aún hoy son motivo de especulaciones. Inmediatamente, logró reinsertarse laboralmente bajo el ala de Axel Kicillof, volviendo al cargo que supo tener en el ministerio de Desarrollo Agrario de la provincia de Buenos Aires, liderado por Javier Rodríguez.

Osaba y De Urraza.

Osaba reportó tareas en el gobierno de Kicillof hasta agosto de este año, cuando fue nombrado por Milei en un cargo que parece ir a contramano de la política de achicamiento del estado. Según la decisión administrativa 825/2024, Osaba fue designado como director nacional de Asistencia al Desarrollo Municipal de la subsecretaría de Relaciones con los Municipios de la secretaría de Provincias y Municipios de la vicejefatura de Gabinete del ministerio del Interior de la jefatura de Gabinete de Ministros. Un puesto con un nombre tan largo como las dudas que genera.

El extraño nombramiento del empleado de Kicillof.

Este nuevo y llamativo puesto asignado al ex empleado de Kicillof no solo contradice el discurso de reducción del estado promovido por Milei, sino que parece más bien un lugar inventado para que Osaba pueda salir a hacer política en el conurbano con algo más que su cuestionable experiencia política. Mientras tanto, su trayectoria sigue siendo un enigma de la política bonaerense, y su ascenso, un claro ejemplo de cómo el pragmatismo político sigue rompiendo barreras ideológicas en la Argentina. (www.REALPOLITIK.com.ar)

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