Connect with us

ECONOMIA

Las reservas del BCRA superaron los u$s40.000 millones, el nivel más alto en dos años y medio

Published

on



Las reservas brutas del Banco Central subieron u$s1.839 millones este viernes, por el impacto del REPO con bancos internacionales. De esta manera, alcanzaron los u$s40.461 millones, el monto más alto en dos años y medio: no se veía un número similar desde febrero del 2023.

Esta semana, justamente, el BCRA anunció su estrategia para acumular reservas y comenzó a llevarla a cabo: además del REPO, también confirmó que todos los meses volverá a licitar BONTE, para captar dólares de inversores extranjeros.

Advertisement

Reservas «alquiladas»: el plan de Luis Caputo

La idea del Gobierno se mantiene en que no habrá compras del BCRA en el mercado cambiario. Al menos por ahora. A pesar de que la liquidación del agro podría alcanzar los u$s4.000 millones durante este mes de junio.

Lo que sucede es que, a partir de julio-agosto- esa inmensa oferta del complejo agroexportador tiende a desaparecer. Y el Gobierno va a necesitar que el equilibrio del mercado cambiario lo asegure la oferta del sector financiero, básicamente. Y las inversiones que ocasionalmente lleguen para el rubro energético.

A esta altura, nadie puede suponer seriamente que el «Plan Colchón» sea el que ofrezca la cantidad suficientes de divisas para que el tipo de cambio no se mueva demasiado.

Advertisement

Por eso mismo, Luis Caputo ideó la estrategia de emisiones sucesivas de bonos en pesos, que se suscriben en dólares, por un total de u$s7.000 millones de acá hasta fin de año.

Y los u$s2.000 millones que acercaron bancos internacionales a través del «repo» ya anunciado, que tendrá un costo en dólares del 8,25% anual.

Está claro que el Gobierno necesita que los inversores financieros sean los que promuevan el ingreso de capitales para evitar alteraciones.

Advertisement

Con una cuenta corriente deficitaria -por ahora de manera incipiente- y un superávit comercial que se achica, ese ingreso resulta clave.

En bancos locales no descartan una alternativa que sirva para sumar divisas al BCRA: que Economía convoque a inversores locales para una colocación de títulos de deuda en dólares, con el objetivo de captar billetes verdes en las cajas de seguridad. Una especie de ensanchamiento del «plan colchón». Desde el equipo económico no hacen comentarios al respecto ante una consulta de iProfesional.

Con este plan, además, Caputo apostaría a llegar con el dólar estable hasta las elecciones de octubre: si así sucede, el BCRA no debería intervenir ya que el tipo de cambio no traspasará los límites de la banda de flotación.

Advertisement

Vencimientos de deuda: cuántos dólares deberá pagar el Gobierno

El mercado descuenta que el Gobierno logrará cubrir los vencimientos de la deuda que caen desde acá hasta fin de año. No depende de que baje el «riesgo país»; para eso están los dólares que adelantó el FMI.

El tema es qué sucederá el año que viene. Para ese entonces, el Gobierno nacional debe reunir u$s17.592 millones, a los que deberían añadirse u$s2.270 millones de deuda del BCRA (repo). Son casi u$s20.000 millones.

Imposible llegar a refinanciar ese monto si no baja el riesgo país hasta un escalón lo suficientemente bajo para que los inversores acepten postergar los plazos y, en todo caso, cobrarse los intereses devengados.

Advertisement

De acuerdo a un documento preparado por la consultora Eco Go, durante el año 2026 se deben pagar la friolera de u$s8.860 millones de intereses de la deuda.

A esta altura, en el mercado observan con preocupación que Caputo no haya adquirido ni un solo dólar de la cosecha gruesa. La dejó pasar. Durante junio, se trata de u$s200 millones promedio que el BCRA no compra y son adquiridos por los inversores privados. Y ni así, el tipo de cambio se acerca al piso de la banca cambiaria y se mantiene en torno de $1.200.

Advertisement

iprofesional, diario, noticias, periodismo, argentina, buenos aires, economía, finanzas,
impuestos, legales, negocios, tecnología, comex, management, marketing, empleos, autos, vinos, life and style,
campus, real estate, newspaper, news, breaking, argentine, politics, economy, finance, taxation, legal, business,
technology, ads, media,dolar,reservas,banco central

ECONOMIA

Balanza comercial: en 9 meses el sector energético aportó el 90% del superávit

Published

on


El superávit energético de u$s5.368 millones entre enero y septiembre significó el 89% del saldo comercial total. Crudo e hidrocarburos impulsan las ventas

05/11/2025 – 07:38hs

Advertisement

La balanza comercial energética se consolidó como el pilar fundamental del saldo positivo de la economía argentina en los primeros nueve meses del año. Su superávit de US$ 5.368 millones entre enero y septiembre representó casi el 90% (un 89% exacto) del superávit comercial acumulado de toda la economía, que totalizó u$s6.030 millones.

Esta performance se explica por un fuerte incremento en las exportaciones de combustibles y energía del 13% interanual y una marcada caída del 21% en las importaciones del sector, de acuerdo al informe de la consultora especializada Economía y Energía.

El sector energético no solo lideró el aporte al superávit comercial, sino que lo hizo en un contexto de caída general del saldo. El superávit acumulado superior a los u$s6.000 millones fue un 60% inferior al registrado en el mismo período del año anterior (enero-septiembre de 2024).

Advertisement

Mientras que las exportaciones totales de la la Argentina crecieron un 7,5% y las importaciones aumentaron un 30,6% en el período de nueve meses, el saldo positivo en combustibles y energía se elevó un 45% interanual, demostrando la resiliencia y el creciente peso específico del sector.

La energía salva el superávit comercial

El desempeño energético estuvo impulsado principalmente por el crudo, cuyas exportaciones crecieron un 21,2% gracias a un robusto aumento del 41% en las cantidades colocadas en el exterior.

En septiembre, la tendencia se mantuvo. El superávit comercial de la la Argentina fue de US$921 millones, un 6% inferior al de septiembre de 2024. No obstante, el saldo energético se ubicó en US$ 775 millones, lo que significó el 84% del superávit comercial total del mes.

Advertisement

Este saldo positivo se alcanzó gracias a un aumento interanual del 25% en las exportaciones de energía, mientras que las importaciones del sector solo crecieron un 4%.

A nivel general, las exportaciones de septiembre se incrementaron un 17% interanual. El motor de estas ventas externas fueron los productos primarios, con un aumento del 43% interanual. Este crecimiento fue impulsado tanto por la recuperación de los precios internacionales como por la eliminación transitoria de las retenciones a las exportaciones, lo que generó un aumento en los volúmenes exportados.

Advertisement



iprofesional, diario, noticias, periodismo, argentina, buenos aires, economía, finanzas,
impuestos, legales, negocios, tecnología, comex, management, marketing, empleos, autos, vinos, life and style,
campus, real estate, newspaper, news, breaking, argentine, politics, economy, finance, taxation, legal, business,
technology, ads, media,balanza energética,superávit

Continue Reading

ECONOMIA

Tras las elecciones, las tasas en pesos cayeron más de 20 puntos y el Gobierno busca reactivar el crédito

Published

on


En la última licitación de deuda en pesos, el Tesoro redujo el rendimiento promedio y extendió los plazos (Imagen Ilustrativa Infobae)

Desde el viernes previo a las elecciones hasta hoy, las principales tasas en pesos que releva el Banco Central registraron una marcada caída. Tanto la TAMAR como la BADLAR mostraron descensos consecutivos que reflejan la nueva orientación de la política monetaria y el intento del Gobierno de abaratar el crédito en pesos.

En el caso de la TAMAR, que corresponde a los depósitos a plazo fijo mayoristas de más de mil millones de pesos en bancos privados, la tasa nominal anual pasó de 58,5% el 24 de octubre a 36,7% el 3 de noviembre, lo que implica un retroceso de 21,8 puntos porcentuales en menos de dos semanas. La tasa efectiva anual acompañó la tendencia, al caer de 76,9% a 43,5%.

Advertisement

La BADLAR, que mide el rendimiento promedio que pagan los bancos por depósitos superiores a un millón de pesos, mostró un comportamiento similar: bajó de 49,4% a 34,7% nominal anual entre las mismas fechas. En términos efectivos, se redujo de 62,2% a 40,8%.

El descenso fue constante durante la semana posterior a los comicios. Las tasas se estabilizaron en niveles que no se veían desde comienzos del año y reflejan un proceso de normalización del mercado financiero luego de la volatilidad electoral. Para las entidades bancarias, este movimiento significa un menor costo de fondeo y, eventualmente, podría trasladarse a las tasas de los créditos al sector privado.

La baja también se sintió en el mercado bursátil. Las tasas de cauciones, que son préstamos garantizados a muy corto plazo entre inversores, operaron en torno a 18% nominal anual para los plazos de un día y dentro de una franja de 20% a 30% para períodos de hasta una semana.

Advertisement

Se trata de valores históricamente bajos para este tipo de operaciones, que se consideran un termómetro de la liquidez del sistema financiero. La caída coincide con un contexto de mayor disponibilidad de pesos y con la decisión del Banco Central de permitir a las entidades un manejo más flexible de sus encajes, lo que redujo la presión sobre las tasas interbancarias.

El descenso de las cauciones también responde a la menor demanda de cobertura en moneda local, producto de la estabilidad cambiaria de las últimas semanas y de la expectativa de que la política monetaria continúe orientada hacia la reducción del costo del crédito.

Para los analistas financieros, esta convergencia entre la baja de las tasas bancarias y las cauciones marca un cambio de etapa. Mientras durante los meses previos al proceso electoral las tasas altas servían para contener la presión sobre el dólar, ahora el foco se desplazó hacia la reactivación del crédito y la normalización del mercado de pesos.

Advertisement

La última licitación de deuda en moneda local reforzó esa tendencia. El Ministerio de Economía adjudicó 6,87 billones de pesos, lo que representó una renovación del 57,2% sobre vencimientos por casi 12 billones, dejando libre una importante porción de liquidez en el mercado.

Las cauciones operan con tasas
Las cauciones operan con tasas de entre 18% y 30%, los valores más bajos del año (Imagen Ilustrativa Infobae)

El dato más relevante fue la baja de tasas efectivas. En el tramo corto, la tasa mensual promedio fue de 2,87%, mientras que en los títulos con vencimiento más largo la tasa fue de 2,55%. En términos anuales, esos valores equivalen a rendimientos muy inferiores a los observados en licitaciones previas.

El Gobierno priorizó la señal de reducción del costo financiero antes que la renovación total de vencimientos, con el objetivo de consolidar la baja de tasas en todo el espectro de instrumentos en pesos. Según la interpretación predominante en el mercado, se buscó reforzar la expectativa de que las tasas se mantendrán dentro de un rango de 30% a 40% nominal anual, siempre que no se altere el equilibrio cambiario.

Además, el Banco Central modificó el cálculo de los encajes bancarios, que pasarán de computarse de forma diaria a promediarse en el mes con un piso del 95%. Esa medida otorga mayor previsibilidad a las entidades financieras y reduce la necesidad de retener liquidez en los tramos más cortos, lo que también colabora con la baja de las tasas activas y pasivas.

Advertisement

En paralelo, se destacó una mayor demanda de títulos a tasa fija y plazos más largos, algo que no se observaba desde principios del año. Este cambio en la composición de las colocaciones fue interpretado como un signo de recuperación de la confianza en la deuda en pesos, aunque todavía en una etapa incipiente.

Advertisement
Continue Reading

ECONOMIA

Dólar tras las legislativas: las claves que busca el Gobierno para sostener la calma cambiaria

Published

on



El dólar oficial opera este martes 4 de noviembre con una caída de cinco pesos, a $1.495, en la pizarra del Banco Nación. En el segmento mayorista, la divisa se negocia a $1.468, y se aleja de del límite superior de la banda cambiaria. En cuanto a los dólares financieros, el contado con liquidación se vende $1.517 (-0,5%), y el MEP se ubica a $1.497 (00%). Por último, en el segmento informal, el blue se negocia a con una suba de diez pesos, en $1455.

El resultado de las elecciones legislativas reconfiguró por completo el tablero financiero argentino. La señal política redujo una parte importante de la incertidumbre y empujó a los activos locales a un rally que sorprendió por su magnitud. En paralelo, la discusión de fondo volvió a la agenda: con el riesgo país en baja y las tasas locales aún muy elevadas, el foco del mercado se corrió hacia el tipo de cambio y el ritmo de la normalización monetaria. La pregunta es directa: ¿puede consolidarse un dólar estable con tasas descendiendo y un contexto internacional más benigno?

Advertisement

En el muy corto plazo, la atención de los operadores y empresas pasa por el flujo. La oferta y demanda de divisas siguen condicionadas por la intervención pública, la liquidación del agro adelantada en las semanas previas y los eventuales movimientos de actores externos. En ese marco, cualquier gesto de coordinación entre política monetaria y frentes cambiarios tiende a amplificarse en precios. Si el financiamiento en pesos baja de costo sin perder anclaje, las coberturas en dólares deberían moderarse y, con ello, la presión sobre el mercado cambiario.

A la vez, el mediano plazo vuelve a depender de dos variables: acceso a crédito y acumulación de reservas. Si el país logra sostener una compresión del riesgo soberano y reanudar el vínculo con los mercados, el dólar financiero tenderá a estabilizarse por la entrada de capitales y por una menor necesidad de cobertura. De lo contrario, la inercia cambiaria podría reactivarse, especialmente si se diluye la oferta transitoria de divisas.

El telón de fondo incluye señales desde Estados Unidos. Una Reserva Federal más laxa suaviza la tasa global y mejora el apetito por riesgo emergente, pero el mercado local mira con lupa el eventual accionar del Tesoro norteamericano en el mercado local de cambios. La estabilidad del dólar argentino, por tanto, no solo depende de la agenda doméstica: también descansa en el flujo externo y en la consistencia de las próximas decisiones de política.

Advertisement

Dos llaves para bajar el riesgo y calmar el dólar

La reacción de precios post-electoral fue categórica: los activos argentinos saltaron cuando se despejó el «riesgo político» y se desplomaron cuando reapareció. El día posterior a los comicios, el Merval registró su mayor suba diaria en dólares en al menos tres décadas, un hito que refleja el cambio de expectativas y el potencial de compresión del riesgo si se confirma una agenda promercado.

El próximo paso para recortar el riesgo país y suavizar el tipo de cambio pasa por normalizar la política monetaria para bajar la volatilidad de tasas. El régimen actual, con metas de agregados poco transparentes y picos intradiarios y quincenales, tiene costos sobre la actividad y sobre el fisco. Un ajuste operativo —tasas más claras en el corto plazo y comunicación más previsible— podría ayudar a anclar expectativas y reducir la demanda de cobertura en dólares.

La segunda llave es la acumulación sistemática de reservas. Pese a una mejora reciente, el stock sigue por debajo de pares emergentes y de la trayectoria pactada con el FMI. Además, la baja monetización de la economía habilita compras oficiales sin encender presiones, aunque siempre importará el precio de esa acumulación en términos de tipo de cambio.

Advertisement

Si el riesgo país quebrara los mínimos de enero y el acceso a los mercados se recompone, la curva en dólares tiene margen para seguir normalizando. Ese cuadro ayudaría a estabilizar el dólar financiero por la vía del flujo y de la menor demanda precautoria. En paralelo, persisten dudas sobre la compatibilidad del esquema de bandas con compras de divisas «en escala», mientras los pagos al FMI y al BCRA siguen marcando el pulso de la caja en dólares.

Normalizar la política monetaria para aflojar las coberturas

Tras las elecciones, el principal desafío doméstico es reducir la volatilidad y el nivel de tasas observado entre agosto y octubre. Tanto el Banco Central como el Tesoro comenzaron a dar señales de normalización: una baja incipiente de encajes, un menor costo de financiamiento en pesos y la ausencia de demanda por instrumentos dollar-linked en el primer test de deuda post-electoral apuntan a un giro gradual hacia condiciones más previsibles.

La primera licitación posterior a las legislativas dejó una tasa promedio de LECAP de 2,87% mensual, alineada con el mercado secundario. El Tesoro adjudicó 6,9 billones de pesos frente a vencimientos por 11 billones, con una inyección de liquidez reforzada por recompras. En un contexto de tasas extraordinariamente altas —84% TNA en adelantos y 67% en interbancarias—, el 100% de la colocación fue a tasa fija, con vencimientos extendidos hasta 2026 y 2027, mostrando una mayor confianza del mercado.

Advertisement

El Banco Central volvió al cómputo mensual de encajes (95% al cierre del día), luego del esquema diario vigente desde agosto. Aunque el nivel de exigencia sigue en máximos desde 1993 y las tasas reales continúan elevadas, algunas referencias ya aflojaron: la caución cerró en torno al 20% y el repo en 30%. Falta que el resto de las tasas converja hacia niveles más razonables para que la actividad económica, estancada desde febrero, empiece a reactivarse.

Una política monetaria más predecible y flexible tiende a moderar la demanda de cobertura cambiaria. Si el descenso de tasas se consolida sin desanclar expectativas, el costo de oportunidad de dolarizar carteras sube y la presión sobre el tipo de cambio se atenúa. Menos estrés financiero, más pesos retenidos en instrumentos locales y un dólar financiero menos exigido: esa es la secuencia esperada.

Flujos externos: Tesoro de EE. UU., Fed y el canal al dólar

Hacia adelante, será clave monitorear el accionar del Tesoro de Estados Unidos. Si vuelve a vender dólares en el mercado local, aumentará la oferta en el MULC y contribuirá a la estabilidad cambiaria; si, en cambio, se retira, podría elevar la demanda de divisas y reavivar presiones de corto plazo. Es un factor táctico decisivo para la trayectoria del dólar.

Advertisement

El contexto externo también juega a favor. La Reserva Federal mantiene un sesgo más laxo, lo que mejora las condiciones financieras internacionales y el apetito por riesgo emergente. Ese viento de cola global favorece que el país retome gradualmente el acceso a financiamiento en los próximos meses, siempre y cuando el riesgo país siga cayendo hacia la zona de 400–500 puntos básicos.

El mercado cambiario seguirá sensible al balance entre cobertura y oferta genuina. Con la liquidación del agro anticipada antes de las elecciones, la oferta podría ser menor que la habitual, por lo que los flujos oficiales y del sector externo serán determinantes para sostener la calma. Cada decisión desde Washington o el regulador local puede alterar la brújula del dólar.

La secuencia ideal combina tasas en baja, un flujo de dólares estable y un acceso renovado a los mercados internacionales. Si esos tres factores convergen, la demanda precautoria de divisas debería disminuir y el tipo de cambio encontrar un nuevo equilibrio sin sobresaltos.

Advertisement

Reservas, bandas y el puente al financiamiento

La acumulación de reservas en forma sostenida es condición necesaria para darle credibilidad al régimen cambiario y anclar expectativas sobre el dólar. La baja monetización del PBI ofrece margen para compras oficiales sin presiones, pero aún existe incertidumbre sobre la compatibilidad entre el esquema de bandas y las compras masivas de divisas. Ese dilema será central para el sendero del tipo de cambio.

Aunque las reservas mejoraron frente a los peores momentos, todavía se ubican por debajo de los emergentes comparables y del compromiso con el FMI. Los próximos pagos de intereses y capital exigen una coordinación fina entre Tesoro y Banco Central, ya que la administración de esos flujos incide directamente sobre la oferta de dólares y la estabilidad del mercado cambiario.

Si el riesgo país continúa cediendo y el acceso a financiamiento externo se reabre, la presión sobre el tipo de cambio disminuirá. La compresión de spreads observada tras los comicios respalda esa lectura: una Argentina con menor prima de riesgo tiende a estabilizar su dólar financiero mediante confianza y flujo de capitales.

Advertisement

La hoja de ruta conecta cuatro piezas: tasas menos volátiles, reservas en aumento, riesgo país en baja y mercados abiertos. Si el Gobierno logra encadenar esos hitos, el dólar debería moverse en un corredor más previsible; si alguno falla, la cobertura volverá. La coherencia de señales económicas será decisiva en la próxima etapa.

Señal de precios y próximos pasos: cómo se ancla el tipo de cambio

El éxito del ancla cambiaria depende de que la flexibilización monetaria avance a un ritmo controlado, evitando desbordes de expectativas. Tasas a la baja, menos ruido y más previsibilidad son condiciones para que la cobertura cambiaria pierda fuerza y el mercado conviva con un dólar estable.

La credibilidad del esquema mejora si el Banco Central logra comprar reservas sin dañar la dinámica de precios y si el riesgo país perfora los mínimos recientes. Con financiamiento externo disponible y menor volatilidad de tasas, el dólar financiero tendería a estabilizarse tanto por los flujos como por las expectativas.

Advertisement

El corto plazo dependerá del equilibrio entre oferta y cobertura, con el Tesoro de EE. UU. como factor táctico y del ritmo al que baje el «costo peso». La victoria oficialista ordenó el mapa; ahora la consistencia de las decisiones será la que determine si el dólar entra o no en una etapa de estabilidad sostenida.

En suma, el escenario base combina normalización monetaria, reducción de spreads y mayor acumulación de reservas. Si ese combo se concreta, el dólar tendrá menos razones para sobresaltos y más chances de moverse dentro de un corredor previsible y estable.

Advertisement

iprofesional, diario, noticias, periodismo, argentina, buenos aires, economía, finanzas,
impuestos, legales, negocios, tecnología, comex, management, marketing, empleos, autos, vinos, life and style,
campus, real estate, newspaper, news, breaking, argentine, politics, economy, finance, taxation, legal, business,
technology, ads, media,dólar,dólar blue

Continue Reading

Tendencias