El tropezón de esos dos ciclos trajo sus consecuencias en una inesperada trifulca entre sus dos conductoras, Mariana Fabbiani y Karina Mazzoco, que también envuelve a sus colaboradores. En realidad, el apuntado es DDM, ciclo que continúa en la programación a Intrusos y que antecede a A la Tarde. En ese «sánguche», acusan, es cuando América sufra la fuga de televidentes.

LA INESPERADA GUERRA ENTRE KARINA MAZZOCCO Y MARIANA FABBIANI QUE SACUDE A AMERICA

La gente de A la tarde no tiene dudas en cuanto a la responsabilidad de sus «vecinos» en la dura batalla que libran todos los días. Para ellos, «el número que deja Intrusos no es malo y no tiene nada que ver con el que recibimos nosotros, que tenemos que remar todos los días contra la corriente para volver a subirlo y dejarle una cifra decente al noticiero» se escucha cada vez más fuerte en las oficinas de Palermo. «Reciben tres y entregan uno y eso nos complica mucho a nosotros», se lamentan. No son los mejores días de Fabbiani, precisamente: esta semana trascendió que atraviesa una seria crisis de pareja.

Cabe recordar que los chispazos entre las dos producciones -y por ende, entre las dos conductoras- nacieron incluso un poco antes, cuando DDM desembarcó con toda la pompa en las tardes de América de la mano de Marcelo Tinelli, por entonces flamante gerente de programación de la emisora. En ese entonces la discusión era mas «periodística», si se quiere, ya que se acusaban de «pisarse» los temas, de repetir entrevistados y de «robarse y esconderse» información. Evidentemente, nunca se quisieron allí.