ECONOMIA
Celebra Caputo: masiva caída del dólar futuro alineó las tasas de interés y cortó sangría de reservas

Por fin un respiro. Tras la seguidilla de jornadas en las que el Banco Central se vio obligado a vender dólares -u$s1.796 en dos semanas-, el inicio de abril quebró la tendencia con una compra de u$s53 millones. Y para los expertos del mercado no fue casualidad que esto haya ocurrido al mismo tiempo que se produjo una caída masiva en las cotizaciones del mercado de futuros.
La clave es que, al bajar estas cotizaciones, también cae la tasa implícita. Hablando en criollo, ya no es negocio apostar contra el peso porque la tasa que se obtiene deja de ser más alta que la que ofrecen los títulos emitidos por el Tesoro.
Esto devuelve a Toto Caputo la esperanza de rearmar el carry trade y sostener su esquema cambiario de crawling peg al 1% sin que le implique una sangría de reservas. Claro, primero hay que verificar si lo ocurrido el martes implica realmente un cambio de tendencia o si sólo se trato de un movimiento momentáneo por el cambio de mes.
Puesto en números, la posición a fines de abril cerró en $1.115, lo que implica un desplome respecto del precio de $1.129 al que había cerrado el lunes -y ni qué decir respecto del pico de $1.174 que había tocado en medio del pánico del lunes por la mañana, con todos los mercados desplomándose-.
A diferencia de lo que había pasado el lunes, no solamente cayeron las posiciones más cortas, sino que toda la curva se aplanó. Es decir, cayeron las cotizaciones de todos los meses, incluyendo los posteriores a las elecciones legislativas de octubre.
Si se compara el contrato a abril, el precio se ubica un 2,8% por encima del tipo de cambio que prevé la «tablita» de Caputo. Esa diferencia coincide con las tasas mensuales que se pagaron por las Lecap en la licitación de la semana pasada.
Para mayo, la cotización de futuro cayó a $1.156, un 5,47% más que el tipo de cambio oficial de la «tablita». Llevado a rendimiento mensual, implica un 2,7%. Y así sucesivamente. El contrato de fines de octubre -es decir, el primero posterior a las elecciones legislativas– cerró en $1.341,50, un sobreprecio de 16% respecto de lo que indica el cronograma oficial -y que implica una tasa mensualizada de 2,3%.
Un bajón masivo de cotizaciones
¿Qué fue lo que pasó? ¿De golpe el escepticismo y el temor a una devaluación se borraron del mercado por la confirmación de Kristalina Georgieva sobre el desembolso de u$s8.000 millones? ¿Los mismos inversores que llevaron el índice de riesgo país en 823 puntos se convencieron de que el programa de Caputo es sostenible?
Los expertos del mercado prefieren una explicación más terrenal y menos idealista: se presume que hubo una intervención masiva por parte del gobierno. Como las operaciones en futuros son anónimas, no es posible saber si operó directamente el Banco Central, otra agencia estatal o alguna «mano amiga».
Pero las sospechas ya habían aparecido el lunes, cuando tras un arranque furibundo y con subas récord, se produjo una ola de contratos vendedores en las posiciones más cortas de la curva, con lo que se desplomaron los futuros para abril y mayo. Y lo mismo se replicó al día siguiente para toda la curva de futuros.
Por más que en cada cambio de mes son corrientes los desarmes de posiciones de empresas que buscaban cobertura, a los analistas les parece raro que el volumen de lo ocurrido pueda ser explicado solamente por operaciones normales del mercado.
Y no es que todos sean reproches entre los expertos. De hecho, hay economistas que venían reclamando desde hacía tiempo que el BCRA interviniera en futuros como una forma de desinflar las expectativas devaluatorias -y, además, sin que esa operatoria implicara un sacrificio de reservas, dado que el mercado de futuros opera en pesos-.
Los efectos positivos de la intervención
El argumento de los economistas pro-intervención es que solamente al alinear las tasas de los futuros con las que pagan los títulos del Tesoro se termina la corrida contra el dólar y se puede volver a un escenario de estabilidad.
De hecho, esto era fue lo que ocurrió desde octubre del año pasado hasta febrero. Claro que en ese momento no había necesidad de una intervención oficial, porque el ingreso de divisas que dejó el blanqueo de capitales permitió al Banco Central una masiva compra que calmó las expectativas.
Y, de esa manera, los inversores ganaban con la llamada «tasa sintética». Se trata de una combinación que permite cubrirse simultáneamente de la inflación y de la devaluación, y era muy buscada, sobre todo, por exportadores e importadores.
La operatoria consiste en vender dólares y colocarse en pesos para aprovechar la tasa de las Lecap -que hace seis meses rondaban el 4% mensual-, y en simultáneo comprar un contrato de dólar futuro. Como se habían atenuado las expectativas devaluatorias, las cotizaciones del Rofex están bajas. En otras palabras, lo que se ganaba por comprar Lecap era mucho más que lo que cuesta ese «seguro» contra la devaluación.
Y para el gobierno, esa situación era la panacea, porque los importadores que tomaban deuda en dólares, resultaba más conveniente quedarse en pesos para conseguir esa ganancia financiera, en vez de reclamarle los dólares inmediatamente al Banco Central.
Esa situación se revirtió cuando el mercado empezó a sospechar que el acuerdo con el Fondo Monetario Internacional supondría el fin del crawling peg al 1%. Así, muchos quisieron cubrirse contra una posible devaluación y las tasas implícitas de los futuros quedaron por encima de las que pagaban los bonos.
Caputo intentó revertir esa situación al ofrecer bonos «dólar linked» en la última licitación del Tesoro pero, aunque se colocó $1 billón. la estrategia no resultó efectiva -y la prueba de ello es que no bajaban las tasas implícitas en la curva de futuros-.
Una herramienta polémica
Es así que se llegó a este momento en el que todos presumen que se dejaron de lado los pruritos para invervenir en el mercado de futuros
En realidad, no es que haya una prohibición para que el BCRA ponga contratos en ese mercado, pero muchos analistas creen que ese instrumento quedó «quemado» tras los juicios que se le hicieron a Alejandro Vanoli y a Axel Kicillof, respectivamente ex titular del BCRA y ex ministro de economía en 2015 -además de la propia Cristina Kirchner- cuando se llegó a un nivel récord de posturas que, cuando finalmente se devaluó, tuvieron un costo de u$s5.400 millones para el Estado.
Aunque finalmente la sentencia dictaminó la inocencia de los imputados, por entender que no se había incurrido en una conducta que deliberadamente dañara el patrimonio del BCRA y que esa intervención en futuros era una decisión que está dentro de las potestades de los funcionarios, igualmente quedó un manto de sospecha cada vez que se recurre a la intervención.
En caso de que, efectivamente, ocurra una devaluación, el BCRA tendrá que pagarles a quienes compraron contratos, y ante esas situaciones aparecen las acusaciones de índole político.
¿Un cambio de tendencia?
El gran interrogante es si lo que ocurrió será un cambio de tendencia y, finalmente, Toto Caputo conseguirá su objetivo de rearmar el carry trade. En otras palabras, de que el público deje de demandar dólares y el BCRA pueda volver a comprar.
Ahí el debate entre los economistas pasa por determinar si lo que importa es el volumen del desembolso -los famosos u$s8.000 iniciales que parecen asegurados para mediados de abril- o si, más bien, lo importante será convencer al mercado de que se revertirá el flujo negativo de capitales.
Los datos oficiales acaban de confirmar lo que todos suponían: en febrero se dio el noveno déficit consecutivo de cuenta corriente -y el segundo más alto de la gestión Milei-. Y nada indica que eso pueda revertirse en el corto plazo. De hecho, las consultoras están revisando sus pronósticos y algunas ya ubican el rojo en 1,5% del PBI.
Es por eso que las lupas están sobre el comportamiento del comercio exterior. Por una cuestión estacional, abril debería ser un mes de fuertes ingresos de divisas del agro, pero nadie se anima a asegurar que la incertidumbre política no acentúe la retracción de los productores.
Por otra parte, hay también inquietud respecto de los movimientos en los depósitos bancarios. Los de dólares están cayendo aceleradamente y ya se ubican en u$s29.484, después de haber alcanzado un pico de u$s34.600 a fines de octubre. De hecho, corren rumores sobre pedidos de billetes verdes por parte de los bancos al BCRA para cubrirse de retiros en los próximos días.
Pero el mayor temor está en un eventual desarme de plazos fijos en pesos que puedan transformar la corrida cambiaria en una corrida bancaria. Es algo que todavía no se registró -hasta hace un mes, los depósitos aumentaban un 11% mensual real-, pero que podría ocurrir ante un deterioro de las expectativas.
iprofesional, diario, noticias, periodismo, argentina, buenos aires, economía, finanzas,
impuestos, legales, negocios, tecnología, comex, management, marketing, empleos, autos, vinos, life and style,
campus, real estate, newspaper, news, breaking, argentine, politics, economy, finance, taxation, legal, business,
technology, ads, media,dólar,dólar futuro,banco central,tasas,bonos,carry trade,devaluación,fmi,luis caputo
ECONOMIA
Vencen más de $9 billones: Caputo definió qué le ofrecerá al mercado para no dejar pesos «sueltos»

El Gobierno se prepara para un nuevo desafío esta semana: el miércoles, enfrentará una nueva licitación con el objetivo de absorber $9 billones que vencen y evitar que los pesos sumen presión al dólar.
En ese escenario, este lunes el secretario de Finanzas Pablo Quirno anunció cómo estará compuesta la canasta de títulos que ofrecerá: se incluyen Lecaps, títulos dólar linked y bonos con tasa TAMAR.
La licitación será el próximo miércoles 27 de agosto. A continuación, los títulos ofrecidos por el Gobierno:
LECAP a:
- 30/09/25 (S30S5)
- 16/01/26 (S16E6)
- 27/02/26 (S27F6)
Dólar Linked a:
- 30/09/25 (D30S5)
- 16/01/26 (D16E6)
TAMAR a:
- 16/01/26 (M16E6)
- 27/02/26 (M27F6)
Vencimiento de deuda: un nuevo desafío para Luis Caputo
En otras circunstancias, la licitación para renovar de deuda del Tesoro no pasaría de una situación rutinaria que solo interesaría a los bancos y operadores del mercado. Pero en este momento, en cambio, es un tema políticamente sensible.
El clima previo a esa licitación ya se enrareció por la híper volatilidad de las tasas de interés de las últimas semanas y, sobre todo, por la demostración de Caputo en el sentido de que si los bancos no quieren aceptar la oferta del gobierno «por las buenas», entonces serán forzados a entregar sus pesos de todas formas.
El antecedente más cercano ocurrió hace una semana cuando, al fracasar en su intento de «rollear» $14,9 billones, tomó una medida extrema: subir 10 puntos los encajes bancarios y llamar a una licitación de emergencia para que las entidades compraran títulos con los cuales cumplir esa nueva normativa. El resultado: se logró absorber $3,8 billones de los $5,8 billones que habían quedado «sueltos» en la licitación anterior.
Esa medida fue en sí misma un mensaje político para el sistema bancario, las empresas y el público en general: el gobierno está dispuesto a hacer todo lo que sea necesario con tal de evitar que haya pesos sobrantes que puedan presionar a la cotización del dólar.
Qué harán los bancos
Del otro lado del mostrador, no se percibe entusiasmo por renovar deuda en la próxima licitación, pero tampoco hay voluntad de chocar contra el gobierno y exponerse a un costo financiero adicional.
Así lo sintetiza un ejecutivo de una de las tres mayores entidades privadas: «Sigue habiendo bancos que tienen que buscar fondos al cierre del día. La situación de liquidez y su manejo técnico usual, está muy lejos de ser ‘normal’. Pero bueno, todos sabemos que lo que no entre por las buenas, habrá que llevarlo por las ‘no tan buenas’».
Es por eso que la sensación generalizada es que el porcentaje de renovación debería ser alto. Todos admiten que Caputo no tolerará otro «rolleo» de 60%, lo cual supondría una inyección de liquidez de $3,2 billones, justo en un momento en el que la prioridad absoluta del gobierno es secar la plaza.
En el programa de streaming del Gordo Dan, donde el equipo económico da su versión sobre la situación del programa económico, Caputo defendió su política y rechazó las críticas sobre el desarme de las LEFIs, el evento a partir del cual se produjo la disparada de las tasas.
Para el ministro, es preferible convivir con la volatilidad antes que «en un país en el que vencían 16 billones de pesos todos los días, lo cual era una situación mucho más frágil».
En ese marco de incertidumbre hasta las elecciones, lo máximo que el gobierno está dispuesto a flexibilizar son algunos detalles en su normativa monetaria que llevó al actual «torniquete monetario». Por caso, se habilitó la vuelta de pases y se negocia una revisión en la forma de contabilizar los encajes.
El miedo al ruido político
Aun cuando los bancos se quejan por la falta de liquidez, en el equipo económico existe la convicción de que el ruido político pre-electoral hace que todo excedente monetario termine inevitablemente en maniobras especulativas y no en el crédito productivo.
Es decir, ya no considera que una licitación sin «rollover» sea un síntoma de la remonetización por crecimiento de la economía. El presidente del Banco Central, Santiago Bausili, fue quien dio la explicación en el programa de streaming oficialista. Dijo que en momentos de tensión política, la demanda de liquidez no responde a una necesidad genuina de inversión o transacciones sino al deseo de cobertura.
Hasta ahora, a nadie le ha quedado claro cuál es el indicador o herramienta técnica que permite diferenciar cuándo hay un aumento genuino en la demanda de dinero o cuándo hay un ánimo especulativo. Lo cierto es que el gobierno dio un giro radical en su visión del famoso «Punto Anker».
Ese giro, que ya es visible desde hace varias semanas, se intensificó en los últimos días con la ofensiva opositora en el Congreso, que dejó la incertidumbre sobre si sigue siendo cumplible el objetivo de un superávit fiscal primario de 1,6% del PBI para fin de año.
iprofesional, diario, noticias, periodismo, argentina, buenos aires, economía, finanzas,
impuestos, legales, negocios, tecnología, comex, management, marketing, empleos, autos, vinos, life and style,
campus, real estate, newspaper, news, breaking, argentine, politics, economy, finance, taxation, legal, business,
technology, ads, media,luis caputo,licitacion,tasas
ECONOMIA
El dólar se recalentó por la tensión política y la City debate hasta dónde puede subir

El precio del dólar escaló hasta los $1.370, y las acciones y los bonos argentinos se desplomaron hasta 8% este lunes, tras la tensión política desatada por las acusaciones de corrupción a varios de los principales funcionarios del Gobierno, en un clima que ya venía tenso desde lo económico en los últimos días, por las altas tasas de interés que se están convalidando en el sistema.
En consecuencia, analistas de mercado relevados por iProfesional detallan cuál será el impacto en el tipo de cambio en los próximos días.
En concreto, el precio del dólar escaló 2,6% este lunes, por lo que avanzó unos 35 pesos, y se ubicó muy cerca del valor histórico más alto alcanzado por el billete oficial, que fue el pasado 31 de julio, cuando tocó los $1.380.
Por eso, la incertidumbre desatada en la City no termina con lo ocurrido en el inicio de la semana, sino que la pregunta que ronda es cuál será el techo que tendrá el billete estadounidense. Hecho que, por cierto, depende de las señales de tranquilidad política y económica que brinde el Gobierno.
Al respecto, la escalada del tipo de cambio se trasladó también a la cotización contemplada en las operaciones del mercado de opciones y futuros del Matba-Rofex, en que se contempló para fin de agosto un valor mayorista de $1.360, muy cerca de los $1.356 actuales de lo que cerró este lunes en la plaza spot.
En resumen, se acerca «peligrosamente» al techo de la banda de flotación cambiaria establecida por el Gobierno, a mediados de abril pasado, en un rango entre $1.000 a $1.400, que se actualiza a razón del 1% mensual, y que ahora se ubica su techo en torno a los $1.460.
En tanto, para fin de diciembre, se negoció a la divisa estadounidense en el mercado de futuros a una cifra de $1.553.5. Es decir, 14,6% más que ahora (cerca de 200 pesos más).
Por ende, para todo el 2025, se está proyectando una devaluación de 50%, un porcentaje que es superior a la inflación pronosticada por más de 40 economistas en el informe mundial de FocusEconomics, donde el consenso estipula que el índice de precios al consumidor (IPC) será de 42,3% este año.
Y esta cifra negociada para fin de año se equipara al precio de dólar mayorista más alto estimado para fin de año por los distintos economistas relevados por dicho informe, donde encabezan la lista Empiria Consultores, con $1.559. Y luego se ubican Eco Go ($1.544), Analytica Consultores ($1.507), Oxford Economics ($1.504) y FIEL, con un estimado de 1.503 pesos.
Dólar en escalada, opinan economistas
En cuanto a la escalada del precio del dólar de este lunes, los analistas del mercado consultados por iProfesional coinciden que se trata de la tensión política generada tras la difusión de las escuchas telefónicas de funcionarios vinculados al Gobierno, donde sostienen que existieron maniobras de corrupción.
A ello se le suma la incertidumbre sobre cómo este aspecto incidirá en las elecciones de medio término a desarrollarse dentro de dos meses y en el futuro de la gestión de Javier Milei.
Por el lado económico, también inquietan las tasas de intereses en niveles cercanos al 60% de tasa nominal anual (TNA) para la referencia mayorista, donde los plazos fijos ya brindan alrededor de 50% de TNA, es decir, 4,1% mensual. Una cifra muy elevada si se toma en cuenta que la inflación mensual se ubica en torno al 2%.
«Todo este ascenso de la jornada parece responder a un enrarecimiento político, que desata estímulos de cobertura», explica Gustavo Quintana, analista de PR Cambios, a iProfesional.
Sebastián Centurión, economista y analista de mercados cambiarios, coincide: «Me parece que esta alza cambiaria que es todo cobertura en base a todo el ruido político que hay actualmente».
En tanto, Fernando Baer, economista de la consultora Quantum, indica: «En principio, el movimiento del precio de este lunes estuvo muy asociado a la incertidumbre política, ahora emparentada con posibles sobornos al máximo nivel. Una noticia como esa, a pocas semanas de las elecciones, agrega ruido. La corrección que vemos en el tipo de cambio, en bonos y acciones está asociado a eso».
Ante ello, Esteban Castro, economista y CEO de Inv.est, reflexiona: «El mercado reaccionó con cautela frente al escándalo por posibles coimas en la ANDIS, reflejando que el ´ruido político´ volvió a dominar la escena en plena cuenta regresiva, hacia las elecciones legislativas en la Provincia de Buenos Aires. A 13 días de los comicios, los inversores ajustan precios en función de la probabilidad de que el Gobierno logre o no un triunfo en la provincia, clave para sostener el plan macroeconómico. El mercado descuenta que si el episodio debilita a La Libertad Avanza en ese distrito, podría complicarse el programa fiscal y monetario que sostiene la calma actual en dólar, tasas y reservas«.
Claro, a los ruidos políticos por los audios, se suman aspectos coyunturales que ya se estaban afrontando desde lo político y económico en el Gobierno.
«Existe mucha tensión e incertidumbre con todo lo de los audios difundidos, que se suman a los proyectos del Congreso y los vencimientos de la deuda del Tesoro. Hay que ver cómo evoluciona la situación», sentencia Camilo Tiscornia, economista y director de C&T Asesores.
Por ejemplo, el ministro de Economía, Luis Caputo, deberá afrontar esta semana vencimientos de deuda donde deberá renovar títulos por $9,1 billones.
«El escenario se vuelve más complejo a medida que avanza la campaña electoral, lo que alimenta la incertidumbre en los mercados», detalla Ignacio Morales, oficial jefe de inversiones de Wise Capital.
¿Tiene techo la suba del precio del dólar?
Ahora bien, la reflexión en la que coinciden los analistas consultados por iProfesional, es que el techo de la suba del precio del dólar quedará establecido en cómo el Gobierno pueda tranquilizar la situación, tanto con las explicaciones del caso en discusión, como también desde la muñeca económica.
«Los niveles actuales de las tasas de interés son preocupantes, y no es algo sostenible, debido a que produce a que se achique el superávit. Por lo que seguirá con volatilidad, en base a cómo el Gobierno reaccione a estas acusaciones y qué pasará con las elecciones. Hay bastante incertidumbre, y distintos escenarios posibles», resume Mauro Cognetta, analista financiero de Global Focus.
Para Quintana, la situación seguirá tensa: «No creo que en los próximos días cambie mucho el panorama actual. Todo puede suceder, es un momento complicado».
En la misma línea, Baer opina que, hasta que «no esté disipada la incertidumbre política, vamos a ver tensiones en todos esos frentes. Por eso, puede seguir subiendo el precio del dólar, porque se está viendo que la tasa de interés, aun en estos niveles altos, no lo frena al billete estadounidense».
Desde el lado de Tiscornia: «Es difícil saber si tiene techo la suba del dólar, pero, a priori, hay un techo, que es el límite establecido por el Banco Central de la banda de flotación», que hoy se ubica cerca de los $1.460.
Finalmente, Castro subraya que, de ahora en adelante, «la clave no estará tanto en la investigación judicial, sino en si el caso altera o no el mapa electoral. O sea, si el oficialismo logra retener apoyo, el efecto será transitorio; pero si se confirma un impacto negativo en las encuestas, el mercado podría seguir demandando cobertura en dólares y castigando activos argentinos».
iprofesional, diario, noticias, periodismo, argentina, buenos aires, economía, finanzas,
impuestos, legales, negocios, tecnología, comex, management, marketing, empleos, autos, vinos, life and style,
campus, real estate, newspaper, news, breaking, argentine, politics, economy, finance, taxation, legal, business,
technology, ads, media,dolar,
ECONOMIA
Importaciones vía courier en Argentina alcanzan máximos históricos y cambian el consumo

Las compras al exterior a través de courier registraron un fuerte incremento en julio y configuran un nuevo escenario para el consumo de los argentinos.
25/08/2025 – 09:27hs
Según un informe de la consultora Analytica, basado en datos de Indec, en julio las importaciones vía courier crecieron 389,5% interanual, alcanzando los US$94 millones.
En los primeros siete meses de 2025, las compras sumaron u$s408 millones, lo que representa un avance de 258,2% y casi duplica el total registrado en 2024. Esta cifra se acerca al máximo histórico alcanzado en 2022.
El reporte advirtió que, aunque el volumen aún es bajo, el cambio en las formas de consumir anticipa que la modalidad seguirá ganando protagonismo.
Cambios regulatorios impulsan el consumo
El crecimiento se enmarca en las decisiones del Gobierno de Javier Milei de flexibilizar las condiciones para importar bajo la modalidad «puerta a puerta».
Desde fines de 2024, el límite por envío aumentó de u$s1.000 a u$s3.000 por paquete, mientras que las importaciones personales de hasta u$s400 quedaron exentas de aranceles, debiendo pagar únicamente IVA.
«Queremos que todos los argentinos puedan acceder a precios más competitivos, no solo quienes viajan al exterior», señaló el ministro de Economía Luis Caputo al anunciar la medida.
Impacto en la moda: siete de cada diez prendas son importadas
El fenómeno también se refleja en la industria textil. Un informe de Tiendanube Evolución destacó que plataformas como Shein y Temu instalaron un modelo de consumo basado en velocidad y volumen, generando un desafío para las marcas locales.
Según la Fundación Proteger, casi siete de cada diez prendas vendidas en Argentina son importadas. Esto afecta la competitividad de la industria textil nacional, que debe apostar por la calidad, cercanía y servicio posventa para diferenciarse.
Nuevos rubros ganan espacio
Aunque la tecnología y la indumentaria concentran la mayor parte de las compras, otros segmentos muestran un crecimiento acelerado.
La plataforma Tiendamia informó que las adquisiciones de autopartes aumentaron 385% interanual en los primeros siete meses de 2025. La eliminación de trabas permitió importar accesorios de moto, sistemas de sonido, repuestos y elementos básicos de seguridad para autos.
Además, el rubro de belleza y cuidado personal también mostró un notable avance: la categoría Health & Beauty registró un incremento de 133% en ítems vendidos y de 163% en facturación respecto al mismo período del año anterior.
iprofesional, diario, noticias, periodismo, argentina, buenos aires, economía, finanzas,
impuestos, legales, negocios, tecnología, comex, management, marketing, empleos, autos, vinos, life and style,
campus, real estate, newspaper, news, breaking, argentine, politics, economy, finance, taxation, legal, business,
technology, ads, media,importaciones,consumo
- DEPORTE2 días ago
Chile organizó una colecta para que la familia del hincha que fue operado por fractura de cráneo pueda viajar a la Argentina
- CHIMENTOS3 días ago
Confirmado: Susana Giménez vuelve con un programa de los más esperados
- DEPORTE2 días ago
El fútbol chileno se solidarizó con la U tras los graves incidentes que se registraron ante Independiente