Christian «Chipi» Castillo calificó la propuesta del gobierno de declarar la educación como un servicio esencial como una «estafa», argumentando que no implica un aumento en la inversión en el sector educativo, sino que busca limitar el derecho de los docentes a realizar huelgas. «No hay compromiso en destinar más recursos a la educación… es simplemente un intento de limitar la posibilidad de los docentes de defender la educación pública», afirmó. Además, destacó que esta medida podría poner en riesgo la seguridad de los estudiantes al exigir que un porcentaje de los docentes continúe trabajando durante los paros.

El diputado también hizo hincapié en las precarias condiciones salariales que enfrentan los docentes universitarios, calificándolas de «salarios de miseria». Ejemplificó con el caso de Misiones, donde los docentes ganaban apenas 200 mil pesos mensuales antes de una reciente huelga que logró duplicar sus salarios. «Imagínate con esta ley no hubiesen podido protestar», señaló Castillo, subrayando que la ley propuesta habría impedido a los docentes luchar por mejoras salariales.

También se refirió a la reciente aprobación de la ley de Financiamiento Universitario, la cual, según él, es un paso positivo al establecer que los salarios de los docentes y no docentes universitarios se actualicen de acuerdo con la inflación. «Esto permitirá cerrar la brecha que hoy es muy grande entre la inflación y los salarios», comentó, destacando que esta medida es resultado de la presión ejercida por las recientes huelgas en las universidades nacionales.

Por último, Castillo expresó su repudio a la visita de legisladores de La Libertad Avanza a represores condenados, calificándola como un intento de «conspirar para la impunidad» de los genocidas. «Fueron a discutir cómo logran la impunidad para los genocidas», aseveró, criticando la falta de sanciones por parte del Congreso y abogando por una investigación exhaustiva de los hechos. (www.REALPOLITIK.com.ar) 

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