Buena parte de la estrategia de Sergio Massa rumbo al balotaje está concentrada en Córdoba y, puntualmente, en los votos “huérfanos” con los que busca fortalecer sus posibilidades de imponerse sobre Javier Milei.

Si se suman los votos de Patricia Bullrich, Juan Schiaretti y Myriam Bregman, y se agregan los blancos o impugnados, son unos 9,5 millones de electores que no votaron a ninguno de los postulantes que definirán las elecciones presidenciales en el cara a cara del 19 de noviembre. Casi el 60% de ese botín proviene de la Provincia de Buenos Aires, la Ciudad de Buenos Aires y Córdoba.

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El domingo pasado, Massa capturó un 65% de los votos “huérfanos” de las elecciones PASO, es decir aquellos electores que no asistieron a las urnas en agosto y los espacios que no superaron el umbral del 1,5% en agosto.

En Córdoba, un territorio complicado para Unión por la Patria, hay cerca de 1,2 millón de votantes que el 22 de octubre no se inclinaron por Massa ni por Milei. Más de la mitad (665 mil) son de Schiaretti, el único gobernador peronista no alineado con el Gobierno nacional y el segundo candidato más votado en Córdoba detrás del libertario, que allí tiene un piso del 33%, contemplando sus resultados en las primarias y las generales.

Massa, entonces, busca que los votos de Juntos por el Cambio en Córdoba no migren hacia Milei. Y en esa dirección, comienza a sumar apoyos entre los dirigentes locales.

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Dirigentes de Schiaretti rompen la “neutralidad” y llaman a votar por Sergio Massa

En las últimas horas, Marcos Torres (Alta Gracia) se transformó en el primer intendente que rompió con la “neutralidad” que viene sosteniendo el grueso de las autoridades provinciales. “A modo personal, por su modo de concebir la política y la ninguna coincidencia con Javier Milei, hoy la mejor opción es Massa”, remarcó el jefe comunal, hermano de Facundo Torres, ministro de Empleo y Formación Profesional del gobierno de Schiaretti.

Una legisladora del oficialismo local ya adelantó que su voto irá para el ministro y candidato. Se trata de Nadia Fernández, cuarta en la línea sucesoria del gobernador y quien aseguró: “No hay lugar a dudas en esta coyuntura la mejor opción es Sergio Massa. Esto implica el sostenimiento de todas las banderas levantadas hasta ahora por la provincia de Córdoba”.

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“Uno puede tener diferencias con Massa, pero una cosa es discutir con él como Presidente sobre los temas pendientes desde el Gobierno nacional con Córdoba, y otra cosa es hacerlo con alguien como Milei, que propone una especie de estallido libertario, de anarcocapitalismo donde la gente que trabaja y que produce, los ciudadanos comunes no saben qué les va a pasar; en consecuencia, no hay lugar a dudas”, profundizó Fernández.

Su par Carlos Alesandri se manifestó en el mismo sentido. “El Bloque de Legisladores de Hacemos por Córdoba debe tomar una posición concreta frente la elección presidencial. Es hora de definir si se va a seguir con una provincia aislada o si nos alineamos con el proyecto que abrazamos todos los peronistas y que es el de Sergio Massa”, publicó en la red social X (Twitter).