En un domingo que mezcló en Washington lluvia, nieve y temperaturas bajo cero, el presidente Javier Milei se encontró con la directora gerente del Fondo Monetario Internacional, Kristalina Georgieva, para afinar los detalles en la búsqueda de cerrar un nuevo acuerdo con el organismo con un desembolso de al menos 11.000 millones de dólares que le permita un alivio financiero para poder salir sin problemas del cepo. El argentino se llevó fuertes elogios de la jefa del Fondo y la promesa de que iban a acelerar el proceso.

Fue una «excelente reunión», definió Georgieva a la salida del encuentro con el libertario, elogió las reformas de Milei y dijo que quieren trabajar «con rapidez» en el nuevo programa.

Y agregó: “Discutimos el futuro de nuestra cooperación. Vamos a trabajar con el nuevo programa, un equipo del Fondo va a viajar a Buenos Aires la semana que viene y creo que el resultado será una Argentina más próspera y dinámica».

La reunión sucedió poco después del mediodía, cuando Georgieva se acercó en una camioneta negra al hotel, a pocas cuadras del Fondo, donde está alojado Milei. El encuentro se dio en el marco de la visita del jefe de la Casa Rosada a la capital estadounidense para la asunción del futuro presidente Donald Trump, quien invitó especialmente al líder libertario y otros mandatarios a la ceremonia.

Cuando terminó la reunión, que duró cerca de una hora y media, Georgieva bajó por la escalinata del hotel junto a Luis Cubeddu, el funcionario que lleva adelante las negociaciones. Algo poco habitual en la jefa del Fondo, se detuvo para hablar brevemente con los periodistas que la esperaban, entre ellos Clarín.

“Fue una excelente reunión, en el contexto del tremendo progreso que Argentina ha hecho para bajar la inflación, estabilizar la economía y crecer otra vez. Los argentinos están comenzando a sentir los beneficios. La pobreza finalmente está bajando”, dijo.

«Queremos trabajar con rapidez con el nuevo programa para llevarlo al directorio ejecutivo», agregó, sin dar más detalles de cronograma de las negociaciones.

“Es un buen momento para darle más viento a las velas de la Argentina”, graficó.

Al final volvió a emitir fuertes elogios al plan de reformas de Milei. “Argentina está excediendo lo que habíamos anticipado hace unos meses. Está excediendo en los progresos en bajar la inflación, que es algo muy importante para la gente, porque la inflación es un impuesto que golpea a los más pobres”, dijo.

También destacó los «fuertes progresos» en términos de crecimiento y el apoyo popular de las reformas. «Finalmente, la economía está creciendo y creciendo más rápido de lo que habíamos proyectado. Y lo que es muy importante, muy importante, la gente apoya las reformas y eso, por supuesto es el mejor factor del éxito”.

Desde el Gobierno no se comunicó oficialmente ningún detalle de la reunión aunque fuentes de la Rosada dijeron a Clarín que no se habló de posibles «montos» de desembolsos ni de requerimientos que el Fondo podría hacer a la Argentina para firmar el programa.

Milei busca abrochar un nuevo acuerdo con el organismo, un programa que los funcionarios de Economía vienen negociando con el Fondo desde hace meses, una continuidad del que se firmó en el 2022 con el gobierno de Alberto Fernández y que finalizó en diciembre.

El argentino se siente fortalecido porque con sus reformas ha logrado alcanzar y superar las metas, sobre todo las fiscales, y busca que el nuevo plan contemple un desembolso de al menos 11.000 millones de dólares, que es lo que Milei estima que será necesario para salir del cepo sin turbulencias.

La reunión entre Milei y Georgieva viene precedida de fuertes elogios de la directora gerenta, que había dicho que el plan económico reformista del argentina era “un caso sin precedentes en la historia” del país y también del economista jefe del organismo, Pierre-Olivier Gourinchas, que dio a conocer que la Argentina crecerá un 5% este año y dijo que había habido “tremendos progresos” en la lucha contra la inflación.

Antes de la reunión, fuentes del Gobierno habían anticipado que iba a ser “una charla política y sobre todo técnica”, y señalaron que se enfocarían en “la relación deuda-producto, la política fiscal, la tasa de crecimiento y la tasa de interés del mercado”, entre otros temas. También desde el Gobierno dijeron que en la reunión querían poner “el moño al paquete”.

Previamente al encuentro con Georgieva, Milei participó de una reunión en el Instituto Milken, donde expuso ante representantes de sectores clave para promover inversiones y alianzas estratégicas.

En esa ocasión el Presidente estuvo acompañado por su hermana y secretaria General de la presidencia Karina Milei, por el ministro de Economía Luis Caputo y por el canciller Gerardo Werthein. Allí Milei mantuvo un encuentro con el presidente del BID, Ilan Goldfajn, quien elogió a través de un posteo en redes sociales la marcha del programa económico de la administración libertaria. «Es alentador ver los esfuerzos de Argentina por trazar un camino hacia el crecimiento y las oportunidades», indicó Goldfajn en el pronunciamiento difundido tras la charca con el mandatario argentino.

Posteriormente Milei también una reunión con el senador brasileño Eduardo Bolsonaro, hijo del expresidente Jair Bolsonaro.

El presidente cierra el día con dos fiestas. La primera es en el Museo de la Biblia, la Gala 1775, donde recibirá un premio «Champion of Economic Freedom» por su labor económica y donde también está invitado Elon Musk. Luego se trasladará a otra gala latina organizada por la Asamblea Nacional Hispana Republicana y el America First Policy Institute. El lunes asistirá a la asunción de Donald Trump.