La oposición en el Senado fracasó en su intento de anular el decreto de necesidad y urgencia (DNU) firmado por el presidente Javier Milei, que asigna más de $100 mil millones a la Secretaría de Inteligencia (SIDE). La ausencia de algunos senadores de Unión por la Patria impidió alcanzar los votos necesarios, lo que otorga al Gobierno una semana más de margen.

A pesar de este revés para la oposición, el oficialismo también enfrentó dificultades en avanzar con la aprobación de la Boleta Única de Papel (BUP) y la eliminación de las PASO, proyectos impulsados desde la Casa Rosada. Victoria Villarruel, presidenta del Senado, decidió no convocar la sesión prevista para este jueves, citando la falta de consenso.

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Aunque inicialmente, desde el bloque de Unión por la Patria, liderado por José Mayans, expresaron urgencia por rechazar el decreto, la falta de senadores disponibles para viajar a Buenos Aires fue el motivo esgrimido para postergar la sesión.

En medio de estas tensiones, la comisión bicameral de Inteligencia, presidida por Martín Lousteau, se reunió para discutir el controvertido decreto y otras cuestiones relacionadas, incluida la posibilidad de citar a la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, por sus críticas al rechazo del DNU por parte de algunos diputados.

Mientras tanto, el Gobierno sigue buscando los votos necesarios para avanzar con la Boleta Única de Papel, pero enfrenta la resistencia dentro del Senado. Karina Milei, secretaria general de la Presidencia, y otros funcionarios del Gobierno intentaron presionar para forzar la sesión, pero Villarruel advirtió que no se aseguraban los 37 votos necesarios, a pesar de los avances recientes en las negociaciones.