Tres hombres, identificados como Wilson Ortiz Fernández, David Gutiérrez Arancibia y Ángel Huamán Huanay, fueron torturados y asesinados dentro de un local de reciclaje en la avenida Cajamarquilla, en la asociación Los Jazmines, Lurigancho-Chosica.

El crimen habría ocurrido a las 9:00 a.m., del miércoles 5 de junio, según la sobrina del dueño del establecimiento, Wilson Ortiz Fernández. En entrevista con el noticiero 24 Horas, contó que su tío le había asegurado que la llamaría pronto, pero nunca se comunicó.

Luego, su abuela, madre de la víctima, la contactó para señalarle que su hijo no contestaba el celular y que su negocio estaba cerrado.

“Aproximadamente sí (supo de él a las 9:00 a.m.) porque justamente yo con mi tío me iba a comunicar, ya que estaba en el hospital con otro tío. Mi tío me dijo ‘hijita yo te voy a llamar’. Yo estaba esperando la llamada y nunca me llamó. Luego, recibo la llamada de mi abuela y me indica que estaba cerrado, que no contestaba. Se nos hizo muy raro. Yo estaba tratando de comunicarme con todos los trabajadores y nadie contestaba”, contó.

La madre de Wilson, acompañada por su nieta, ingresó al local y encontró a su hijo junto a dos empleados tirados en el suelo. Habían sido atacados con una comba, torturados, amarrados de pies y manos, y amordazados, presentando graves heridas en la cabeza.

Un familiar relató que los asesinos cometieron el triple homicidio para robar varias toneladas de cobre almacenadas en un camión. Después, se llevaron el camión y vendieron el cobre en una zona cercana.

Según la reportera del programa periodístico, los delincuentes se llevaron casi S/100.000 y varias tarjetas de crédito. El negocio le permitía a Wilson Ortiz Fernández obtener hasta S/50.000 diariamente.

Los familiares del dueño del local denunciaron que los extrabajadores, de nacionalidad venezolana, fueron los que cometieron este crimen porque buscaban vengarse, luego de que los despidieron de su centro de labores.

Estos sospechosos abandonaron el miércoles 5 de junio la habitación que alquilaban y se desconoce su paradero.

“Fueron extrabajadores, chamos. Queremos justicia para mi hermano Wilson Ortiz. Los han matado a ‘combazos’, de venganza”, señaló la hermana de la víctima.

En tanto, la sobrina de Wilson Ortiz Fernández pidió al Ministerio del Interior y a la presidenta, Dina Boluarte, que ubique a los presuntos asesinos.

“Como le menciono eran extrabajadores y tenían el conocimiento de todo el rubro. Por eso que de venganza, como han sido despedidos, es que han hecho esto. Lo que yo quiero es que haya justicia, que el Mininter se ponga en búsqueda de todo, que cierren todo a nivel nacional, porque esto no se puede quedar así. No se pueden ir esos venezolanos y hacer como si nada. La presidenta, por favor, que ponga orden, que por algo es presidenta”, indicó.

El abogado del dueño del local precisó que los denunciados por el crimen son hermanos y que ambos conocían cómo acceder al establecimiento.

“Por los vecinos y la gente que los conocía (sospechan que los exempleados fueron los asesinos). La casa donde vivían estos venezolanos (…) ya no están viviendo ahí. Ellos responden a Gabriel Lima Reyes y Alexander Lima Reyes. Son hermanos, ambos han trabajado y por eso seguro, como conocían cómo ingresar, han ingresado en horas de la mañana y primero a uno de los trabajadores, al vigilante, lo han maniatado y lo han asesinado a ‘combazos’”, contó.