Juana Repetto, figura conocida por contar y mostrar su vida cotidiana en redes sociales, compartió hace algunas horas en Instagram que sufrió lesiones en los pezones al amamantar a su hijo Belisario, de tres años. Narró su sorpresa y dolor, describiéndolo como “nivel lágrimas”, una situación inédita para ella en sus seis años de lactancia.
La influencer, autora del libro No estás fallada, explicó que notó aftas en la boca de su hijo, lo que después se convirtió en una infección por hongos, un problema que terminó afectándola a ella. “Arden los pezones, se agrietan y sangran”, relató Repetto a sus seguidores. Esta fue su primera experiencia con este tipo de complicaciones en todos sus años de amamantar.
Juana mostró cómo preparaba una mezcla de bicarbonato con agua tibia para tratar las aftas, siguiendo además las recomendaciones de una pediatra para un tratamiento más efectivo. También compartió que aplicaba una crema en sus pezones para aliviar el fuerte dolor que sentía, provocado por una infección.
En una publicación posterior, demostró el método que utilizaba para limpiar la boca de su hijo y destacó la paciencia de Belisario durante el proceso. “Beli es un genio, no se queja”, afirmó la actriz luego de explicar paso a paso el procedimiento para curar a su hijo y los pezones de ella.
La estrategia de Juana para retirar a sus hijos del colegio
Juana Repetto, contó en sus redes sociales una estrategia inusual pero efectiva para facilitar la recogida de sus hijos Toribio y Belisario a la salida de su colegio. Desde su vehículo, Repetto explicó: “Vengo a la salida del colegio media hora antes de que salga Toro, que es el primero que sale, para encontrar el lugar que me gusta en la manzana del colegio”. Esta anticipación, según la actriz, no solo le permite encontrar estacionamiento cercano, sino también gestionar mejor el tiempo y el esfuerzo físico que implica recoger a sus hijos de diferentes puntos.
Durante las primeras semanas del año escolar pasado, Repetto enfrentó dificultades con su antiguo método, que consistía en estacionar el auto a una o dos cuadras de distancia. “Las primeras veces, estacionaba el auto a dos cuadras, caminaba a buscar a Toro, luego a buscar a Beli y terminaba con Beli muy cansado encima de mí porque sale exhausto del jardín”, relató Juana. Belisario sale por una esquina, mientras que Toribio lo hace por la mitad de la cuadra. Este complejo recorrido terminaba agotando tanto a ella como a sus hijos.
Este año, aprendiendo de su experiencia, Juana decidió cambiar su enfoque para evitar el estrés y la fatiga al final de la jornada escolar. “Ahora vengo media hora antes de que salgan los chicos y estaciono al lado de la puerta por la que sale Beli, el último en salir”, detalló la actriz. Esta nueva organización ha reducido significativamente el esfuerzo físico necesario, permitiendo que Repetto llegue con más facilidad a cada punto de recogida.
La actriz compartió esta estrategia con sus seguidores de Instagram, generando una gran respuesta de su comunidad virtual. Juana Repetto expresó su interés por saber si otros padres emplean tácticas similares: “¿Alguien más que haga lo mismo o soy la única ridícula” Este comentario, característico de su estilo directo y sincero, provocó una inmediata y entusiasta respuesta de sus seguidores, quienes apreciaron su honestidad y pragmatismo.
Entre los argentinos que este año copan las playas –y los shoppings– de Chile, hay un elemento que rankea alto entre las compras que traen en sus valijas llenas: la freidora de aire.
Este electrodoméstico, que tiene tanto fanáticos como detractores, se convirtió en un éxito de ventas también en la Argentina, con un crecimiento que explotó en el último año.
La también llamada air fryer (aunque ese nombre es una marca) o freidora sin aceite es en realidad un horno eléctrico por convección, que funciona por la circulación del aire caliente. Cuando salieron al mercado, se las promocionaba por brindar la posibilidad de “freír sin aceite”. Ahora, las estrategias de comunicación de las marcas apuntan a la cocción más rápida y organizada.
En las redes, están quienes promueven sus beneficios y quienes dicen que en realidad no sirven para todo lo que prometen. “No funciona. No es más que un hornito eléctrico diminuto”, dice en un video de TikTok con casi 70.000 likes la usuaria @lavalemior.
Jimena Corsiglia se la compró hace dos años y le da la razón. “Las cosas no me salen como a mí me gustan. Prefiero el hornito”. Del otro lado, Adriana Arias también la tiene hace dos años y la defiende: “Las papas obviamente no salen como en una fritura profunda, pero quedan crocantes y uso mucho menos aceite que si las hiciera al horno. Y me resulta un montón para cocinar vegetales y calentar comida”. En el medio, Vanesa González, amiga de ambas apostó: “Tengo tres hijos adolescentes que almuerzan en casa cuando no estoy y puede ser una gran solución porque no les gusta cocinarse. Me la compré y estoy esperando que llegue con ansias”.
Ella encarna a los protagonistas que impulsan un verdadero fenómeno comercial. Los datos que aportan tanto las empresas que las distribuyen en Argentina como los locales que las venden, lo confirman.
Advertisement
“Fue uno de los productos estrella del 2024”, dicen desde Cetrogar. “Las unidades vendidas se multiplicaron por siete”, calculan en Carrefour. “La venta de unidades crece un 20% versus mes anterior”, puntualizan en On City. “La categoría todavía no alcanzó su potencial. Se espera este año un crecimiento que haga superar el millón de unidades”, estiman en Frávega.
¿Cuáles son las razones? Varias. Francisco Zoroza, director de Asuntos Corporativos de Carrefour, explica que “son productos 100% importados, y la apertura de importaciones permitió ganar profundidad en el surtido”. En Cetrogar suman un dato en la misma línea: en 2022 tenían solo una marca con tres modelos y hoy ofrecen más de 30 modelos de diversos fabricantes. Desde On City, apuntan a la alimentación saludable como un pilar que hace que la gente demande más estos productos. En Moulinex, empresa que tiene tres modelos, remarcan que “son más sustentables, principalmente por la velocidad de la cocción”. Y en Frávega suman el trabajo “en la comunicación y capacitación” en los consumidores.
Es que este punto es fundamental, como ya se verá: las freidoras de aire no son para todo ni para todos. O, dicho de otra manera, hay una freidora para cada uno. Desde las básicas y pequeñas de 1,8 litros de capacidad (casi en desuso) hasta las más pro con accesorios, función grill y capacidad de 11 litros, pasando por las estándar de 4 y 6 litros. ¿Los precios? En los distintos canales de venta pueden oscilar entre $ 100.000 y los $ 450.000.
En Moulinex señalan que a la hora de comprar, “hoy el consumidor busca que el producto sea grande y cuente con dos compartimentos para cocinar dos comidas al mismo tiempo”. Gerardo Rossi y Carlos Rodríguez Vázquez, gerentes de Producto y Comercial de Yelmo, suman que los usuarios “están solicitando funciones adicionales, como pantallas táctiles y controles más intuitivos, programas predefinidos para distintos alimentos, más versatilidad con funciones como grill o deshidratador, y revestimientos internos más fáciles de limpiar y resistentes a largo plazo”.
Y enfatizan que la tendencia es global: “En 2022 hubo 35 millones de unidades vendidas y se espera alcanzar los 55 millones en los próximos años”.
Las 3 preguntas clave de la freidora de aire
Se podrían resumir en la tríada de la vida: salud, dinero y amor. Y hay respuestas para las tres.
Primero, ¿es sana la freidora de aire? Responde Fernanda Delgado, licenciada en Nutrición y matriculada en el Colegio de Nutricionistas de la Provincia de Buenos Aires. “Es una buena opción porque nos permite cocinar rápido y sin aceite. Se podría usar muy poquito para que no se pegue o emplear moldes de silicona y directamente no lo necesitaríamos”, dice.
Advertisement
Aunque señala que la capacidad puede ser un limitante para las familias grandes y que no todo se puede hacer en una freidora (“Si necesitamos hervir o cocinar en un medio acuoso, no va a servir”). También le baja la espuma: “No es necesario salir a comprar todo lo que salga. Con los medios de cocción tradicionales nos podemos arreglar tranquilamente. No es condición sine qua non tener una freidora de aire, pero si está la posibilidad puede ser una buena opción”.
Aquí, lo segundo: el dinero. Ya hablamos de precios, pero ¿cuánto gasta? Desde Moulinex aportan datos de pruebas que realizó la marca en la cocción de papas fritas congeladas, y aseguran que “comparado con un horno tradicional de clase energética A, ahorra un 70% de energía”.
Y, por último, el amor. ¿Sale rica la comida? Casi como en una relación amorosa, podría decirse que con la freidora también hay que ajustar las expectativas, entender cómo van a quedar los alimentos (sí, las papas fritas son ricas pero no son iguales a las que salen de la sartén) y, fundamental, agarrarle la mano al método.
Consejos para comprar y usar una freidora de aire
“Le tenés que encontrar la vuelta, enganchar el truco”, dice desde el otro lado del océano Maximiliano Aurelio Jurado. Creador de contenido gastronómico en su cuenta de Instagram @maxiaj, este argentino radicado en Madrid desde hace seis años cuenta que la explosión que vive este electrodoméstico acá, en España se dio en 2021.
“Yo estaba descreído de tenerla, porque te ocupa un espacio en la cocina… pero una marca me la mandó de regalo y dije ‘Vamos a probarla’. Ahora la uso todo el tiempo y las recetas que más comparto son de air fryer”, afirma.
En su casa viven dos, y dice que para esa cantidad de comensales es ideal. “Si son una familia numerosa, va a estar restringido el uso. No vas a poder hacer milanesas para 5”, advierte.
Para una pareja, sugiere comprar una freidora de entre 4 y 6 litros, y para cuatro personas, una de 11 (“La de 6 la van a usar, pero le van a dar menos utilidad”). En todos los casos, recomienda las que tienen la canasta cuadrada: “Tenés más espacio. Te entra en un costado una milanesa y en el otro una fuente con verduras”.
Advertisement
Para él, lo mejor del aparato es que permite ahorrar tiempo porque se setean funciones y tiempos. “Podés hacer otra cosa y no tenés que estar atento a la cocción. Metés dos milanesas y mientras cortás el tomate para la ensalada», grafica. ¿Cuánto tiempo llevan las cocciones clásicas? A 180 grados, una milanesa de carne y una pechuga se cocinan en 15 minutos, y unas verduras (por ejemplo, zapallito en cubos) “quedan bien entre 17 y 20 minutos”.
Respecto del aceite, Maxi dice que un poco hay que usar, “porque le da crujiente a la comida y sabor”. Para tener en cuenta a la hora de preparar la comida, resalta que el calor viene de arriba y que es importante que circule el aire por abajo, por eso recomienda “no llenar la cubeta” y usar los papeles de horno que vienen con agujeritos.
Video
Qué recipientes se pueden usar en la freidora de aire.
Sobre los recipientes que emplea para cocinar, aclara que sólo mete en la freidora “lo que podría meter en el horno”, que sea resistente al calor como asaderas esmaltadas, moldes de silicona o vidrio de borosilicato. El lava la canasta apenas la termina de usar (va a lavavajillas) y si queda muy sucia, “pongo en remojo la rejilla y lo de abajo con desengrasante y después la lavo con una esponja” no abrasiva.
Otro tip importante, durante la cocción, es dar vuelta los alimentos a la mitad del tiempo y pensar en la temperatura como en un horno común (“a baja temperatura para que se cocine más parejo, más temperatura si lo quiero más rápido”). Y no llenar nunca la cubeta porque no circularía el calor.
Cómo hacer papas fritas en la freidora de aire
Por último, Maxi comparte su receta del hit de la freidora de aire: las papas fritas.
Advertisement
“Las corto en bastón, les doy un hervor de 10 minutos, les pongo un poco de aceite y las mezclo con las manos para que todas queden con un poco de aceite. Las cocino 15 minutos a 190 grados y cada 5 minutos le doy una sacudida al cesto. Quedan crocantes y tiernas por dentro”, describe, y sugiere también congelarlas después de ponerles el aceite, “las sacás y las freís por unos minutos más”.
Video
Cómo hacer papas fritas en la freidora de aire. La receta de @maxiaj.
Pero el consejo más importante del influencer es que la gente “pruebe recetas. Que intenten cocinar, porque la verdad es muy práctica. Y cuando ves lo que podés hacer, te motiva mucho. Tengo amigos que no encendían una hornalla y ahora cocinan un montón”.