«Mañana (por este jueves) decidiremos qué es lo mejor: si inicia, si espera y entra después… lo iremos viendo». La cautela de Javier Mascherano al referirse a la vuelta de Lionel Messi, luego de no haber sumado minutos en los últimos tres partidos por una sobrecarga muscular, se contrapone al ferviente deseo de gran parte de los argentinos de ver nuevamente en cancha al mejor de todos. Sin embargo, la espera podría llegar a su final este jueves desde las 21, cuando el Inter Miami visite al Cavalier jamaiquino por la vuelta de los octavos de la Concachampions (la ida fue triunfo 2-0).

Y esto no solo tiene que ver con que Leo ya se siente mucho mejor, completó el último entrenamiento previo al partido a la par del resto de sus compañeros y siempre quiere estar dentro del campo, más a una semana de iniciar una fecha FIFA en la que la Selección se enfrentará a Uruguay y Brasil: por el corto resultado del primer encuentro y el sorpresivo buen nivel del equipo que marcha cuarto en Jamaica (mereció irse al entretiempo en ventaja), el Inter necesita casi imperiosamente a su estrella en el 11 inicial.

Un pase de ronda, donde espera Los Ángeles FC, se impone como una obligación: quedar afuera ante un club que compite en una liga en la que los jugadores cobran en promedio apenas por encima del salario mínimo del país y muchos tienen otros trabajos sería un rotundo fracaso. Y un golpe al costado hipercompetitivo de Messi, quien se quedaría muy pronto sin la competencia continental y sin esos partidos mano a mano que tanto le gustan.

Por eso, Scaloni y compañía estarán más que atentos a lo que ocurra esta noche en un Estadio Nacional de Kingston que tendrá sus 35.000 lugares ocupados (las entradas se agotaron en horas): la manera en la que encontrarán a Messi la semana que viene en Ezeiza dependerá bastante de este encuentro.

Uno que podría marcar su vuelta luego de no haber estado contra Houston Dynamo, Cavalier en la ida y Charlotte, el domingo: su última vez en la cancha data del 25 de febrero, cuando hizo un gol en los 69 minutos que disputó contra el Kansas, por la vuelta de la primera ronda de la Concachampions.

Oscar Ustari; Ian Fray, Tomás Avilés, Maxi Falcón, Jordi Alba; Yannick Bright, Sergio Busquets; Tadeo Allende, Telasco Segovia; Lionel Messi o Benjamin Cremaschi y Luis Suárez.

El partido se jugará este jueves a las 21 y será transmitido por Disney+ Premium, aunque también se podrá seguir el minuto a minuto por la web de Olé.

El escándalo en Madrid dejó repercusiones. El doble toque de Julián Álvarez en la tanda de penales dejó afuera al Atlético y la polémica sigue picante. Real Madrid se llevó la clasificación a cuartos de la Champions League después de un partido para el infarto, pero el foco no está puesto en el triunfo blanco sino en el famoso penal anulado al delantero argentino, que generó un revuelo bárbaro y hizo retroceder la memoria en el tiempo.

La historia arrancó con el Real Madrid perdiendo 1-0 en el Metropolitano y la serie empatada 2-2 en el global. Tras un alargue sin emociones, llegaron los penales. Y ahí fue cuando Julián Álvarez tomó la responsabilidad de patear el segundo tiro del Colchonero. La Araña se perfiló, tomó carrera y… resbalón fatal. Según el arbitraje, el delantero tocó la pelota con ambas piernas al momento de rematar, la pelota terminó en la red, pero los jugadores del Madrid salieron disparados a reclamar.

El árbitro polaco Szymon Marciniak no se dejó apurar y detuvo la ejecución de Federico Valverde, el siguiente en la lista Merengue. Desde el VAR le informaron que había doble toque y, tras revisar la jugada, anuló el tanto. Un golpe de nocaut para el Atlético, que ya empezaba a ilusionarse con la remontada.

El propio Julián Álvarez reaccionó resignado, sin protestar demasiado, aunque con un gesto que dejó dudas sobre si él mismo sabía lo que había pasado. El Madrid terminó festejando la clasificación tras imponerse 4-2 en los penales y ahora se las verá con el Arsenal, que viene de destrozar al PSV con un global de 9-3.

El reglamento de la IFAB es clarito en este aspecto. La regla 14 estipula que si el ejecutor del penal toca el balón por segunda vez antes de que otro jugador lo toque, se concede un tiro libre indirecto al equipo rival desde el lugar de la infracción. O sea, el doble toque no va, por más de que para muchos Julián no la toco dos veces, pero según el arbitraje del partido de Champions sí…

Pero claro, la bronca en el Atlético se desató al recordar otros antecedentes donde el reglamento no se aplicó de la misma forma. Y el caso que más ruido hizo fue el famoso gol de Boca vía Martín Palermo contra Platense en 1999. Aquella tarde en la cancha de Vélez, el Titán resbaló al patear el penal y la pelota tocó ambas piernas antes de entrar al arco. La FIFA, después de revisar el caso, lo dio por válido porque consideró que el doble toque fue accidental y no buscó sacar ventaja. “El gol es considerado válido. El jugador tocó accidentalmente el balón por segunda vez tras un resbalón”, decía el comunicado oficial.

En este mismo año, durante el partido entre Independiente Rivadavia y Tigre, correspondiente a la fecha 6 del Torneo Apertura, Sebastián Villa protagonizó una acción desafortunada que terminó resumiendo la mala noche del conjunto local. Con el marcador 1-0 a favor de Tigre tras el gol de David Romero, tuvo la oportunidad de empatar mediante un penal ejecutado por el colombiano. Sin embargo, este se resbaló al momento de patear, impactando el balón con ambos pies, lo que llevó al árbitro Pablo Echavarría a invalidar la jugada. A pesar de que Victorio Ramis tomó el rebote y convirtió el gol, este fue anulado de inmediato.

En la Copa Libertadores 2023, Pablo Solari vivió una situación similar jugando para River ante Inter de Porto Alegre. El Millonario estaba jugándose la clasificación y en la tanda de penales Solari resbaló al ejecutar el tiro, tocando el balón con ambos pies antes de mandarlo al fondo del arco. El árbitro Andrés Matonte anuló el gol tras la intervención del VAR y River quedó eliminado en una definición dramática por 9-8.

Nicolás «Uvita» Fernández protagonizó un episodio calcado jugando para Defensa y Justicia ante Lanús en julio de 2023. El delantero remató desde los doce pasos, pero el balón entró tras impactar en ambas piernas. El árbitro Darío Herrera revisó la jugada en el VAR y decidió anular el tanto, cobrando tiro libre indirecto para el Granate.

Y si vamos un poco más al pasado, más precisamente al 2021, el colombiano Roger Martínez, jugando para América en la Liga MX, también sufrió la anulación de un gol por doble toque tras un resbalón en el Estadio Azteca ante Monterrey. El VAR detectó el contacto con ambas piernas y el árbitro terminó por anular el festejo de las Águilas.

El Cholo fue picante en la conferencia de prensa post partido y se la agarró con la polémica decisión arbitral: «¿Ustedes la vieron? ¿La tocó o no la tocó? ¿La viste o no la viste? ¿Cualquiera de los que está acá presente vio que tocó dos veces la pelota Julián? Levanten la mano… ¿Quién levanta la mano?», disparó el deté argentino, que también dejó en claro que no habló con Julián tras el partido: «No hablé con él, me fui solo a caminar por ahí atrás».

Lo cierto es que la jugada de Álvarez dejó más dudas que certezas y abrió el debate sobre la interpretación del reglamento. Si Palermo resbaló y fue gol, ¿por qué el de Álvarez no? ¿Hubo falta de criterio? ¿Influyó el contexto? Son preguntas que hoy todos se hacen.