«Bueno, ya sabés cómo funciona esto. ¿No, Julio Garro?», tuiteó el influencer libertario Daniel Parisini en el mediodía de este miércoles, más conocido -en la red social X y más allá- como GordoDan, para apuntalar la polémica sobre los dichos del hasta entonces subsecretario de Deportes de la Nación sobre un pedido de perdón que se sugería diera Lionel Messi ante las críticas por el canto xenófobo en los festejos de la Selección.

En su canal de streaming militante, ya de noche y con el funcionario apuntado fuera del Gobierno, Parisini comenzó su programa Misa con un particular saludo: «Acá ando, echando gente«; mientras se sucedían aplausos y vitoreos. «En mi vida vi a alguien con tanta felicidad», señaló uno de sus panelistas, ante la sonrisa del GordoDan.

«Si tuviste la suerte de ocupar un cargo de segunda, tercera o cuarta línea en el gobierno, porque te necesitaban para la gestión o un laburo específico, y tenés tu propia ideología, que no es la misma que ganó las elecciones, la que tiene el presidente de la Nación (es decir, tu jefe), cerrá un poco el o…, boludo«, insistió Parisini en su primera intervención en el programa.

El militante de redes libertarias tampoco es uno más. GordoDan, devenido empresario de medios, es accionista de Carajo, el streaming de corte oficialista que alberga su propio programa. Si bien niega ser funcionario, parece tener el poder de fuego de instalar el clamor por renuncias en el gabinete de Milei.

No fue, de hecho, la primera vez: en su mira ya había caído Fernando Vilella, ex secretario de Bioeconomía.

«¿Cómo vas a ir a lo de María O’Donnell para que te meta una trampa así, que te tire una bomba atómica?», siguió GordoDan. «Y como ciudadano normal, ¿cómo vas a tener la audacia y la astucia para pedirle a Messi, quizás el argentino más importante de toda la historia del universo, que pida disculpas?», arremetió. «¿Quién sos?», se escuchó otra voz en el estudio, aunque de fondo.

De vuelta con la palabra, Parisini añadió estar muy agradecido con el Gobierno y «con la celeridad con la que actuó, que cuando ve que algo no funciona, lo corta al toque«. Claro, pocas horas antes Garro había brindado una entrevista radial y ciertas declaraciones suyas resultaron controversiales.

Si es que el Gobierno corta al toque lo que parece que no funciona, también es que Parisini advierte antes, desde su cuenta de X, cómo es el prospecto para un funcionario ejemplar de esta administración y les da consejos a quienes ejercen funciones.

Este miércoles mismo miércoles por la tarde posteó: «Si no entendés la ideología que te puso el culo en la silla donde lo tenés sentado, que dicho sea de paso, es la ideología del presidente (que es TU JEFE), entonces agradecé por la suerte que tuviste, disfrutá de tu cargo mientras dure, y CERRÁ BIEN EL…». Horas más tarde, replicó prácticamente las mismas palabras en su programa.

«Creo que el capitán de la Selección debe salir también a pedir disculpas de ese caso [los cánticos racistas en los festejos post final de la Copa América] y lo mismo el presidente de la AFA, creo que corresponde», había afirmado Garro en diálogo con la radio Urbana Play por la mañana. «Es algo que nos deja mal parados con tanta gloria», continuó.

Cuando Garro quiso explicarse, ya la polémica era importante. En su cuenta de X, también durante la tarde del miércoles, se expresó: «Desmiento categóricamente que haya solicitado a Messi que pida disculpas. Sería una falta de respeto a quien nos honra permanentemente con su calidad humana y deportiva». Claro, su tuit llegó mucho más tarde que los cientos que trolls y cuentas afines de Milei publicaron para fustigar sus dichos que lo probaban.

El mismo Javier Milei aprovechó para retuitear uno de esos embates libertarios hacia Garro. «Todos sabemos que el javo ama y banca a Messi incluso desde que era totalmente criticado… Decir que Messi tiene que PEDIR DISCULPAS a unos europeos colonizadores por una canción que encima dice la verdad, es ir TOTALMENTE EN CONTRA de la ideología del javo», fue la publicación replicada por Milei, autoría de la cuenta de X elpitttt. «GARRO TIENE QUE ESTAR AFUERA YA MISMO», sentenció.

Hágase la voluntad: a las 20.15 del miércoles, y mediante un posteo de X, la Oficina del Presidente informó que Garro ya era historia.

Dogmáticos, argumentaron: «Ningún gobierno puede decirle qué comentar, qué pensar o qué hacer a la Selección Argentina Campeona del Mundo y Bicampeona de América, ni a ningún otro ciudadano. Por esta razón, Julio Garro deja de ser Subsecretario de Deportes de la Nación». Minutos más tarde, Parisini aplaudía las palabras del comunicado en su programa.

«No era tan difícil la cuestión: había que ver qué decía (la periodista deportiva) Ángela Lerena y opinar todo lo contrario. Decían que Garro era a quien pusieron para instalar el tema de las Sociedades Anónimas Deportivas, pero es alguien que discute a Messi. El gobierno actuó con seriedad», agregó Parisini.

Garro, uno de los únicos funcionarios que es del riñón del expresidente Mauricio Macri, quedaba afuera.

Parisini, médico de profesión, es uno de los militantes en redes de Milei que formó parte del equipo de comunicación de la campaña libertaria que llevó al economista a la Casa Rosada.

Junto a Juan Pablo Carreira, conocido en redes como «Juan Doe«, ahora director de Comunicación Digital de Presidencia, y Agustín Romo, diputado provincial de La Libertad Avanza, se le endilga ser uno de los integrantes del staff de tuiteros mileístas que trabaja en Balcarce 50 bajo las órdenes de Santiago Caputo, asesor estrella del Presidente. GordoDan niega tener cargo. Parece encargarse de quitarlos.

En marzo, un like supuestamente involuntario puso en aprietos al secretario de Bioeconomía de Javier Milei, Fernando Vilella, tuvo que salir a pedir disculpas tras haber recibido un ultimátum de Parisini: «A partir de mañana no formás más parte del gobierno. Nos vemos».

Era un tuit del senador Martín Lousteau, uno de los principales blancos de los libertarios tras su rechazo al mega DNU, que enumeraba una lista de críticas a Javier Milei.

Villela había dado me gusta al posteo del radical, pero horas más tarde respondió con una crítica al mismo posteo: «Qué mala memoria, nunca un éxito personal que haya generado un impacto positivo en la gente…», intentó cuestionar a Lousteau.

Luego, intentó rectificarse ante su me gusta. «Obviamente fue un error que ya enmendé. Jamás lo haría con alguien con quien disiento en casi todo», escribió. No alcanzó.

Daniel Parisini, sin embargo, pidió su cabeza; incluso, le respondió el tweet a Vilella: «No me interesa. Llévenselo«, expresó, pidiendo que corrieran al por entonces secretario de Bioeconomía.

Vilella no sobrevivió, a la larga, al embate de Parisini. Si bien el episodio fue en marzo, el 10 de julio finalmente el ingeniero agrónomo presentó su renuncia a la cartera de Bioeconomía, aunque lo hizo por expreso pedido del Poder Ejecutivo.

Se convirtió, en ese momento, en el funcionario número 50 que abandonaba el Gobierno, al que había llegado por consejo de Nicolás Posse, ex jefe de Gabinete. El primero, tal vez, del embate libertario de redes.