Inés Parry expresó su rechazo a la manera en la que Javier Milei se dirige a figuras de la historia democrática argentina, como Raúl Alfonsín. «La violencia no es el camino para generar acuerdos ni un diálogo democrático razonable», señaló la legisladora. Agregó que le preocupa la influencia de estos discursos en la ciudadanía, especialmente en las generaciones jóvenes que no tuvieron la oportunidad de conocer en profundidad la historia reciente de Argentina.

«El radicalismo representa la democracia y no permitirá su debilitamiento»

La legisladora sostuvo que el Unión Cívica Radical no dejará que se ponga en riesgo la democracia. «Prefiero hablar de calidad democrática; la democracia en sí no está en juego, es una conquista que no vamos a abandonar», afirmó Parry, y remarcó el trabajo de su partido en propuestas como la ficha limpia y la boleta única, que buscan fortalecer las instituciones y la calidad democrática en el país.

El rol del radicalismo en el Congreso y las reformas pendientes

Al referirse a las diferencias dentro de su propio partido y el rol del radicalismo en el Congreso, Parry explicó: «Estamos atravesando diferencias que representan las realidades de cada distrito, pero seguimos comprometidos en ser una fuerza que impulse reformas importantes para mejorar la calidad institucional». Añadió que algunas medidas impulsadas por el gobierno contaron con el apoyo del radicalismo, aunque sostuvo que «el ajuste no debe recaer sobre la clase media ni hipotecar el futuro de la educación y la salud».

«No podemos permitir discursos que desvíen la atención de los problemas reales»

Parry también criticó que el discurso del presidente desvíe el debate de temas fundamentales, como el desempleo, la pobreza y la inflación. «Hoy tendríamos que estar discutiendo cómo recomponer los sueldos de los jubilados o cómo generar empleo real, no atacando figuras históricas que ya están consagradas», insistió.

Contra la antipolítica y los discursos violentos

Para finalizar, Parry advirtió sobre los efectos del mensaje antipolítica y los discursos violentos que, según ella, el presidente utiliza. «El mensaje antipolítica no soluciona los problemas que enfrentamos», enfatizó, y subrayó la importancia de tener debates reales sobre políticas públicas que mejoren la vida de los ciudadanos. «La administración del estado no puede funcionar bajo una lógica de descalificaciones y ataques. Es hora de discutir y acordar en beneficio de los argentinos», concluyó. (www.REALPOLITIK.com.ar) 

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