La provincia de Neuquén enfrenta una grave crisis educativa debido a los múltiples paros docentes y jornadas de capacitación, que dejaron a los estudiantes sin clases durante 37 días en lo que va del año, según la Agrupación Padres Organizados. De estos, 33 días fueron por huelgas y 4 por capacitaciones. Esta situación generó una fuerte crítica por parte de padres y organizaciones que denuncian la falta de atención a los derechos de los estudiantes, mientras el Gobierno provincial y el gremio docente ATEN debaten las cifras y las causas del conflicto.

Marina Smoljan, representante de Padres Organizados Neuquén, manifestó su preocupación al afirmar que “el año está perdido” para los alumnos, que son víctimas de las disputas entre el gremio y el Gobierno. La agrupación reclama que ni el Poder Ejecutivo ni las defensorías de los derechos de los niños están garantizando el acceso a la educación. Esta crisis es particularmente alarmante en una provincia con tantos recursos como Neuquén, pero con un sistema educativo en crisis.

El conflicto entre ATEN y el Ministerio de Educación de Neuquén gira en torno a la ley 3447, conocida como la “ley de plus salarial”, que establece un adicional remunerativo para docentes que cumplan con ciertos requisitos de presencialidad. Marcelo Guagliardo, secretario general de ATEN, justificó las huelgas al señalar que esta ley modificó las condiciones laborales sin el debido consenso, lo que generó un nuevo motivo de conflicto que no existía antes.

A pesar de que el Gobierno provincial minimiza el impacto de las huelgas, señalando que la mayoría de las escuelas volvieron a funcionar con normalidad, la situación sigue siendo crítica. Según los cálculos de Padres Organizados, si no se suspenden más jornadas en lo que resta del año, los estudiantes de Neuquén terminarán el ciclo lectivo con solo 144 días de clases, muy por debajo del mínimo de 190 días recomendado por el Consejo Federal de Educación.

La falta de resolución en este conflicto educativo generó indignación a nivel nacional. Gustavo Zorzoli, ex rector del Colegio Nacional de Buenos Aires, calificó la situación como “inaceptable” y cuestionó la inacción del Gobierno nacional ante la crisis en Neuquén, sugiriendo la necesidad de una intervención federal para garantizar el derecho a la educación de los estudiantes.